Cada vez resulta más evidente la necesidad de modernizar, en todos sus sentidos, el servicio de locomoción colectiva, tanto del Bío Bío como del resto del país donde existen múltiples líneas que realizan esta gestión. Son varias las aristas de este complejo problema, siempre analizado por la tensa relación entre los pasajeros estudiantes y los conductores, tema más que evidente en todos. La actitud, en un porcentaje sustantivo de las ocasiones, es agresiva desde uno y otro sector. ¿Qué ocurre?: los choferes ganan por corte de boleto y el de los estudiantes les es poco atractivo, lo que se constituye en germen de animadversión, por fortuna con muy positivas excepciones. Una regularización de la situación laboral de los conductores debería considerarse en este panorama general necesario de enfrentar, para evitar malos tratos, escolares pequeños que se quedan en los paraderos sin ser llevados, muchas veces víctimas de las inclemencias del tiempo, sobre todo en estos días donde la lluvia se ha dejado sentir con mucha fuerza. Todo ello es real y ha sido tal cual por décadas, lo que no significa que se den pasos en procura de encontrar caminos de solución y, de esta manera terminar con este histórico conflicto. Otro aspecto está referido a la modernización de la flota microbusera, en algunos casos absolutamente inapropiada para el transporte de pasajeros. Finalmente, aparece el motivo del paro: el uso de la tarjeta escolar de rebaja en el pasaje durante todo el año. Los choferes aducen que correspondería presentarla solamente los días en que hay clases, quedando fuera de esta posibilidad las actividades en sábados u horarios nocturnos, y por cierto, los viajes que no guardan relación con los afanes estudiantiles, constituyéndose ellos en contralores de lo anterior. Los intereses de los choferes y de los propietarios de las máquinas son desde luego distintos y los primeros acusan que los aportes del Estado no llegan a su bolsillo y que se ven perjudicados al trasladar a personas por un pago muy menor a la tarifa. Habrá que enfrentar este tema.

Cumplidas o no las medidas anunciadas para los primeros 100 días de mandato de la presidenta Bachelet lo relevante es cuál es el Impacto real de estas, analizándolas se puede concluir que de las 56 medidas, 20 corresponde a tareas concretas y el resto compromete, más bien, la entrega de planes o el inicio de estudios y la constitución de comisiones de expertos. Resumiendo 14 Proyectos de ley, entre otros, el Bono Marzo y las Reformas Tributarias y Educacional, 7 Nuevos programas o reposición de beneficios, varios de los cuales han requerido un ajuste presupuestario.Entre otros, la reposición del Bono de Invierno para los pensionados que dejaron de percibirlo por distintas razones; cambiar la Ficha de Protección Social; e implementar el Fondo Nacional de Medicamentos, 11 Estudios y comisiones de expertos, entre ellos, el Consejo Nacional de la Infancia, las comisiones presidenciales que estudian reformas a las Isapres y AFP, 10 Agendas y planes nacionales entre ellos la Agenda de Energía, el Plan Nacional de Inversiones en Salud y el Plan de Desarrollo Especial para zonas extremas, 10 Definiciones de comunas y regiones beneficiarias de programas e infraestructura, para la construcción de nuevas salas cunas, CFT regionales públicos, centros deportivos, entre otros. Debe observarse especial atención en la selección de comunas en donde se construirá nueva infraestructura o aquellas que se beneficiarán de determinados programas, el Gobierno deberá informar con claridad cuáles han sido los criterios de elección y la oposición deberá verificar e impedir un sesgo de acuerdo al signo político de los alcaldes en ejercicio y por ultimo 2 Nuevos Delegados Presidenciales, para la Reconstrucción y para los Recursos Hídricos. Para la gratuidad en la Educación Superior se estima un costo de US$ 3.500 millones, de acuerdo al cálculo del economista Sergio Urzúa, es preocupante conocer estos anuncios sin complementarlos con políticas de fomento al crecimiento y al empleo, el aumento del gasto sin creación de riqueza es la receta directa al fracaso como lo demostró europa con un estado del bienestar que hoy los tiene sumidos en un desastre social.