Aunque siempre quiso ser futbolista profesional, la vida por diversos motivos, le cerró las puertas al respecto. Sin embargo, jamás imaginó que el convertirse en gendarme, le abriría las puertas a desarrollar una de las actividades que más pasión y alegría le otorgan a sus días.
Lo anterior, ya que desde el año 2013, Francisco Baeza, oriundo de el sector El Roble (Yungay), integra el plantel de Gendarmería de Chile, que desde el 2013 juega en la zona norte, de la Tercera División B, junto a otros nueve elencos.
De la mano del ex símbolo azul, Mariano Puyol, Francisco y sus compañeros luchan partido a partido por dejar bien puesto el nombre de su institución, en el exigente certamen futbolístico.
conformidad
Desde pequeño, el deporte del balón llamó la atención de Francisco. Participante habitual de las pichangas en la cancha del sector El Roble, donde ha vivido gran parte de sus 21 años, lentamente fue considerando convertirse en un jugador profesional. Incluso, se probó en la filial de Ñublense en San Ignacio, pero la lejanía y el costo económico que le significaba desplazarse desde Yungay, lo hicieron desertar de su aspiración, pese a tener aptitudes para la actividad.
Sin embargo la vida le tenía guardada una sorpresa. Tras egresar de la Escuela de Gendarmería, y cuando aún no cumplía un año de trabajo, la institución forma su primer equipo de fútbol, y Francisco pasa a formar parte de él.
A la hora del análisis, se muestra cauto, pero reconoce que pese a ser un equipo recién conformado, han tenido resultados aceptables.
'A pesar de todo, hemos podido irnos superando. Con mucho trabajo hemos ido logrando un fondo de juego, que nos permite situarnos alrededor de la medianía de la tabla de posiciones', precisó.
En relación a su cometido personal, Francisco reconoce que ha ido de menos a más, no obstante, actualmente se encuentra entre los goleadores del equipo, con cuatro anotaciones.
'Afortunadamente he ido ganando en confianza, lo que me ha permitido sacarle provecho a mis características como atacante (rapidez y no dar pelotas por perdidas), lo que me tiene bastante conforme', sentenció.
BROMAS
Pero más allá de lo netamente deportivo, el elenco de Gendarmería ha debido convivir con las bromas de los barristasrivales, como lo que a juicio de Baeza, le otorga un condimento especial.
'Es típico que cuando entramos a la cancha, nos gritan que vamos a cuidarlos, o festinan con las lumas, pero es algo que ya lo tomamos con naturalidad, y pasa a ser parte del folclore', reflexionó.
Sin embargo, lo más relevante de la participación de Gendarmería en un torneo de fútbol, tiene que ver a jucio de Baeza, 'con que queda demostrado que los funcionarios de la institución somos personas íntegras, ya que lamentablemente muchas personas nos estigmatizan por la naturaleza de nuestra labor'.
En ese sentido, afirmó que los aspectos que más destacan dentro del grupo, son la solidaridad, el compañismo, y el espíritu de lucha, 'claves no sólo en el fútbol, sino que en todo los ámbitos de la vida', puntualizó.