Ruidos molestos hasta altas horas de la madrugada, riñas y aumento de los robos son parte de los reclamos de los vecinos de la población Purén en contra del club Burdeos.
La discoteque, que hace cerca de cuatro años se encuentra instalada en la esquina de avenida Argentina y España, ha traído una serie de problemáticas que denuncian los vecinos, entre ellos, la presidenta de la junta vecinal de la población Purén, Clara San Juan.
"Las principales molestias son las peleas que se originan una vez que cierran, alrededor de las 4.30 de la madrugada, y que se extienden hasta las 5. Por eso los vecinos estamos tan molestos", señaló la dirigenta, quien añadió que "tenemos que aguantar los asaltos y robos. De hecho, hace un par de días estaban saltando por los techos de las casas. Carabineros vino a verificar, pero tardaron mucho y cuando llegaron ya se habían ido".
Según la mujer, esta situación los ha llevado a recurrir al municipio desde donde, dicen, no han obtenido respuesta. Así tampoco han podido consensuar posibles medidas para generar un término de conflicto con la administración de la discoteque.
Disconformes
Pedro Zapata, uno de los vecinos afectados, comentó que el municipio ha tenido distinto trato al de otras poblaciones que tienen en su sector un bar nocturno. "Cerraron la discoteque Balmaceda y Kmasú, con ciertos criterios, pero lo que no entiendo es por qué no aplican los mismos acá", señaló el hombre, quien al igual que Clara San Juan piden una salida definitiva al problema.
"Lo que nosotros pedimos es el cierre de esta discoteque, pero nos hemos encontrado con varias trabas, porque incluso para presentar un recurso de protección nos piden partes de Carabineros, pero ellos no siempre los cursan, aunque hayan ruidos molestos", reclamó Clara San Juan.
Según comentan los vecinos, entre ellos Sergio Osorio, incluso han visto, desde que abrió Burdeos, el aumento de robos. "En las cuadras cercanas al local se van a estacionar y ocupan los espacios que nos corresponden. Pero para peor, han robado varios de ellos y todos estos delitos quedan impunes", manifestó Osorio, quien reclama que también son víctimas de malos olores, dado que en más de una oportunidad se han percatado de la presencia de desconocidos que durante la noche orinan sus portones, o árboles ubicados en la vereda.
"Todo en orden"
Desde el municipio, el alcalde Sergio Zarzar manifestó que no poseía antecedentes de estos reclamos, y que hasta ahora, la documentación de Burdeos está en orden y las fiscalizaciones no han arrojado irregularidades.
"La situación del local Burdeos actualmente se da con normalidad y en observancia de la ley con su patente de restorán de turismo", declaró el edil, quien por otra parte, manifestó que hasta ahora "No he recibido en lo personal quejas ni he sido informado de alguna transgresión".
Otro de los aspectos que molesta a vecinos es la observación de clientes del local que beben alcohol en la terraza del local. Sin embargo, Sergio Zarzar adujo que "la terraza se encuentra en orden, pues se estima que éstas son una proyección del local y por consiguiente del permiso con que opera".
Por otra parte, el concejal Jorge Vaccaro, presidente de la Comisión de patentes de alcoholes en el municipio de Chillán, comentó que hasta ahora no han recibido una queja formal por parte de los vecinos.
"Si se exceden en los niveles de ruido, ellos tienen que unirse y expresar su molestia, porque así como cerramos Balmaceda y Kmasú, yo estoy dispuesto a evaluar el cierre del local Burdeos si así ellos lo requieren", declaró Vaccaro.
Según el edil, existe la posibilidad de diálogo para subsanar la situación. "Ellos no me han hecho llegar un reclamo nuevo, pero si ellos se organizan y hacen llegar una lista con firmas, aduciendo que no pueden dormir y están cansados de las molestias, yo tendría una reunión y advertiríamos al contribuyente de que no le vamos a renovar la patente", expresó.
Abiertos al diálogo
La representante legal de Burdeos, Claudia Cuevas, declaró que se encuentran abiertos al diálogo, e incluso dispuestos a seguir invirtiendo para no generar molestias en los vecinos.
"Hemos estado pendientes de lo que piensan los vecinos, y efectivamente algunos nos han dicho que les molesta la bulla y para eso se tomaron algunas medidas, como lo fue la instalación de una puerta y colocamos aislantes de ruido, y desde año nuevo ya teníamos esto", declaró Claudia Cuevas, quien destacó que es una situación que solo se vive tres días a la semana.
Según Cuevas, la situación vivida molesta a no más de cinco casas vecinas en relación al volumen de la música durante los jueves, viernes y sábado. Sin embargo, aduce que la delincuencia es un tema de barrio, más allá de su voluntad.
"En muchas ocasiones son personas que circulan por acá, provocando a nuestros clientes. De hecho, avenida Argentina con España es un punto conflictivo de por sí. De hecho, hemos sido un aporte, porque antes en este sector habían robos e incluso violaciones, pero con la llegada de Burdeos hemos otorgado iluminación al lugar", comentó la representante legal de Burdeos.
Si bien el local cuenta con cámaras de vigilancia interna y externa, los vecinos reclaman la instalación de una cámara de seguridad que permita focalizar la delincuencia y situaciones irregulares ocurridas en la avenida Argentina, principal lugar donde desconocidos cometen fechorías. Desde el municipio, el concejal Jorge Vacaro comentó que el alcalde Zarzar se comprometió, tiempo atrás, a licitar una cámara especial para el sector, "pero hasta ahora no hemos tenido ninguna novedad al respecto", declaró Vaccaro.
4
años fue instalado el club Burdeos. Vecinos aducen que desde entonces delincuencia y ruidos han aparecido en población Purén.
4:30
horas
es la hora de cierre de Burdeos, que abre su puertas los fines de semana, jueves, viernes y sábado.