La rama de halterofilia y lucha olímpica de la Universidad del Bío Bío, representada por el Milon de Crotona, ya ha sumado dos torneos preparatorios previos al nacional universitario de levantamiento de pesas que se desarrollará el próximo 30 de este mes en la capital del país.

Durante el campeonato todo competidor realizado en el mes de marzo, denominado Copa Jaime Iturra, compitieron por equipos e individuales, sumando puntaje en cada categoría en disputa explicó Herbert Leyton, deportista y entrenador del club.

"Tuvimos una buena participación, Néstor Contreras fue oro en 62 kilos, yo logré el oro en 69 kilos, Pedro Muñoz oro en 77, Juan Somorrostro oro en 85, Carlos Rivas oro en 105, Cristian Medina plata en más de 105 kilos y sumando los puntajes de Diego González y Danilo Rivas, ganamos nuestra primera copa por equipos como club Milon de Crotona", señaló.

En aquella ocasión, los chillanejos superaron a clubes de Concepción, Temuco y Curanilahue. Posteriormente asistieron a la copa Universidad UBB en Concepción, se compitió en la modalidad Sinclair que es por medio de un puntaje sacado en base a la relación entre el peso corporal del pesista y la suma de su mejor peso levantado en arranque y envión.

En aquella ocasión, fueron en representación de la Universidad, y no como club. "Se premió a las 5 mejores damas del torneo que fueron las 5 de UBB y 4 de nuestro equipo de Chillán. Primer lugar Gladis Medina, segundo Katherine Landeros, tercera Jennifer Santander y cuarta Camila Alarcón", indicó Leyton.

En varones en tanto, se premiaban los 10 mejores puntajes entrando a podio los 3 mejores donde el resultado nuevamente se definió entre los pesistas de Chillán, quienes dominaron en la competencia.

En esta ocasión, el primer lugar fue para Herbert Leyton quien logró 271 puntos, segundo lugar lo obtuvo Carlos Rivas con 251 puntos, y estrechamente se quedó con el tercer lugar Juan Somorrostro con 250 puntos; todos de Chillán.

Con estos resultados, más los puntos sumados por los demás competidores de la UBB, lograron nuevamente la copa de primer lugar por equipos siendo la segunda de este año.

Ahora en más, los deportistas se preparan con entrenamientos diarios para enfrentar el nacional universitario, competencia en la que esperan sumar primeros lugares y medallas doradas para la casa de estudios.

"Ahora entramos a las últimas semanas de preparación previa al nacional universitario de 30 de mayo en Santiago organizado por la federación chilena de pesas", cerró Herbert Leyton.

Con la lluvia como invitada de piedra, se desarrolló en el estadio Arístides Bahamondes de Chillán Viejo, la prueba masiva de jugadores del club Colo Colo, actividad organizada por la filial del club Albo en Chillán, entidad que dirige Ernesto Ponce, y la que contó con la presencia de Lizardo Garrido, director de las escuelas formativas de la institución capitalina.

"Ha sido muy satisfactorio. Ya tenemos 5 niños que viajarán a la casa Alba para estar una semana en prueba, y eso es una alegría para uno que trabaja para que los niños tengan la posibilidad de enrolarse en Colo Colo", reconoció el "Neto" Ponce.

El ex defensa Albo, Lizardo Garrido, reveló que más del 80% de las canteras albas, están abastecidas por jugadores de provincia. "Estamos sorprendidos gratamente por la calidad de niños que hay acá. Hay chicos que marcan mucha diferencia y ojalá que en el Monumental rindan lo mismo, para formar parte de Colo Colo", sostuvo.

Sobre las características que debe tener un niño para ser parte de Colo Colo, Garrido explicó que "debe ser inteligente para jugar, destacar pro sobre el resto y por sobre todo tener mucha velocidad, ver si el niño orienta, ordena, tiene toma de decisiones distintas al resto, pero en general al llevar tantos años en el fútbol uno a los 10 minutos se da cuenta quién es quién, y tratamos de equivocarnos lo menos posible", precisó.

Pero Garrido no llegó solo, ya que arribó junto a la Copa Libertadores, trofeo que obtuvo Colo Colo el año 1991, la única Libertadores que tiene un club del país.

Por lo mismo, el trofeo que el propio Garrido levantó junto a otros insignes futbolistas como Morón, Rubén Espinoza, entre otros, fue sin duda el más requerido por los niños y sus padres que aprovecharon la ocasión de fotografiarse con el trofeo.