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veinte votos en contra, cinco favorables y tres abstenciones. Ese fue el resultado de la segunda votación del Consejo Regional (Core), con respecto al proceso de otorgamiento de un cupo de casino en la comuna de Chillán.
Tal como se esperaba, los Cores nuevamente se pronunciaron desfavorablemente en relación al proyecto de la empresa Boldt-Peralada, aduciendo esta vez, argumentos relacionados con sus competencias, tal como lo ordenó la Corte Suprema y la Superintendencia de Casinos de Juegos (SCJ).
fundamentos del CORE
A través de la subcomisión casinos -creada por el órgano colegiado para revisar el tema-, se dio respuesta al requerimiento de la SCJ. Ahí se acordó que en cuanto a la comuna de emplazamiento, Chillán, la propuesta no tenía objeción. Sin embargo, en el impacto de dicho emplazamiento en la Estrategia de Desarrollo Regional vigente, se recomendó un pronunciamiento desfavorable.
Uno de los argumentos presentados ayer por esta subcomisión, fue que "este proyecto genera externalidad negativa cuando se contrapone al lineamiento estratégico N°7 de dicho instrumento de planificación, en cuanto no promueve hábitos de vida saludable, ya que al emplazarse inmediatamente colindante con una universidad suscita a sus estudiantes el flagelo de la ludopatía".
Por otro lado, los Cores argumentaron que el proyecto impacta desfavorablemente, pues va en dirección opuesta al lineamiento estratégico N°2 de la Estrategia de Desarrollo Regional, en cuanto a la idea de fomentar el uso eficiente de la energía, con focalización en la incorporación de energías renovables de bajo impacto ambiental.
"El hecho de que los muros del cubo del edificio de 40 metros de altura se transforme en pantallas con juegos de luces, proyecciones y mapping, dándole con esto un carácter de edificio vivo, son por sí mismos, grandes consumidores de energía y si a eso se le suma al alto consumo que genera al usar sus muros exteriores como pantallas no es conveniente", dice el texto de la subcomisión.
CORES DE ÑUBLE
De los seis Cores de Ñuble, sólo dos votaron favorablemente al proyecto de la firma argentina-catalana. Estos fueron Gustavo Sanhueza (UDI) y Cristian Quiroz (MAS), quienes ratificaron su postura del año pasado, en donde también habían votado a favor de la iniciativa extrajera.
"Yo reiteré mi postura, ya que si se analizan las dos propuestas cumplen y, a mi parecer, no se contraponen a la Estrategia de Desarrollo Regional", expresó el Core gremialista.
Quiroz, por su parte, indicó que "ésta es una inversión que va a generar empleo, una oferta turística importante y también un aporte cultural para Chillán. Por lo tanto. No hay antecedentes fundados que indiquen su rechazo".
El presidente de la subcomisión, Javier Ávila, por su lado, señaló que "el hecho de que un casino esté al lado de un universidad a mí no me parece. Estudios dicen que la proximidad de estos centros de juegos son gatilladores de problemas de ludopatía, más aún en los jóvenes, eso está probado científicamente", dijo.
SOBERBIA, IGNORANCIA
Y MENTIRA
Ricardo Abdala, representante de la firma extranjera fue duro: "Yo lamento que presenciamos un acto soberbio, porque increpar a la Corte Suprema en mi calidad de abogado, es grave. Volver a caer en la falencia anterior y no respetar la ley es un acto de ignorancia. Y la mentira la escuchamos", dijo, en referencia a uno de los argumentos presentados por los consejeros, donde pusieron como ejemplo una votación efectuada en Ovalle, apelando a que la votación no tuvo mayores argumentos, cuando desde la visión del abogado, estuvo basada en informes que dictaminaban su inviabilidad.
"Lamentamos haber asistido a un consejo predispuesto. La razón la desconocemos. Qué quieren, un casino, o un determinado casino", agregó el abogado refiriéndose al proyecto respaldado por el Core en julio pasado, perteneciente a Marina del Sol.
Abdala mencionó además que se estudiarán todos los antecedentes para tomar una decisión respecto a continuar sobre una vía legal, argumentando la desigualdad ante la ley. Aunque el ingeniero Juan Carlos Salaberry, director del proyecto, estima que así debería ser. "Todavía sigue configurada una cierta desigualdad ante la ley. Hay conceptos erróneos y algo de mal interpretación. Tenemos que tomarnos un tiempo, probablemente continuemos con judicialización", afirmó.