Educar a los hijos sobre el uso de internet puede prevenir el "Grooming"
delito cibernético. La Policía de investigaciones reconoce que ha existido un aumento de los casos de ciberabuso sexual infantil, por ello entregan algunos consejos para evitar estos abusos.
El 12 de noviembre del año 2008, en Santiago, se llevó a cabo el primer juicio por "Grooming" en nuestro país, un término que consiste en abusos contra menores a través de internet. En aquella ocasión, el imputado recibió 5 años y medio de cárcel, imputándosele los delitos de abuso sexual, amenazas, producción de material pornográfico infantil y delito informático en contra de una menor de 13 años en la comuna de Pudahuel.
Desde entonces, este término anglosajón para referirse a las situaciones de abuso sexual de niños por parte de adultos a través de internet, usando los chat y las webcams, se ha ido haciendo cada vez más conocido, gracias a que hoy en día los niños crecen en un entorno muy diferente al de generaciones anteriores, rodeados de nuevas tecnologías que cada vez hacen que el acceso a internet, sea más expedito y menso engorroso.
Es aquí donde se da el terreno más fértil para los denominados "groomers", que obtienen la atención de los menores. Hace pocos días la provincia de Ñuble fue testigo de dos casos investigados por este delito, que terminaron de buena forma gracias a las diligencias llevadas a cabo por la Policía de Investigaciones.
"Nosotros siempre apostamos a que debe existir una buena relación o comunicación entre padres e hijos. Muchas veces los papás se confían que los niños están en el computador, con sus tablet o teléfonos navegando dentro de su casa y creen que están seguros, pero realmente no saben lo que están haciendo", explica el subcomisario Cristián González, de la Brigada del Cibercrimen de la PDI.
El año pasado hubo 390 casos, y este año ya van más de 60 en el país. "El consejo principal es que exista una comunicación donde sepan en qué redes sociales están insertos sus hijos, si están participando en algún perfil de Facebook o se comunican por whatsapp. Conversar con ellos, involucrarse con estas nuevas formas de comunicación", agrega el subcomisario.
Para la autoridad policial, es difícil poder detectar cuando los niños están siendo afectados por un caso como este. "Muchas veces se dice que cuando los niños están muy metidos en las redes sociales, cambien de estado de ánimo, los noten que están un poco angustiado, todo eso va relacionado con la comunicación y hay que explicarles los riesgos que existen en las redes sociales. Hay personas que no son lo que dicen ser, y ante la más mínima incitación a hacer algo que les incomoden, lo den a conocer", precisa.
Estos hechos no solo ocurren en plataformas como Facebook o Whatsapp, sino que también en los juegos en línea donde hay salas de chat donde los Groomer acceden y comienzan a ganarse la confianza de los chicos, y los llevan a otras redes sociales donde pueden obtener imágenes y videos. Cuando ya ha existido intercambio de imágenes y está la etapa de la extorsión o se piden juntar con abusos con contacto corporal, puede existir un cambio rotundo en la personalidad de los menores.
"Al hablar de grooming es necesario tener en cuenta la exposición que los niños y adolescentes viven hoy en día. Un mundo virtual acosador e impactante que ha permitido que el grooming posea una plataforma de acción muy amplia e inmediata. El primer tema importante es la comunicación de parte de los adultos responsables y los menores; resulta indispensable que existan códigos que los puedan poner en marcha ante ciertos casos. Debe existir también un empoderamiento para con los niños y niñas", afirma Enrique Vildósola, sicólogo educacional de la Escuela República de México de Chillán.
El sicólogo reitera que es clave el trabajo de los padres. "Resulta indispensable empoderar a los niños y niñas hacerles saber lo importante que son, lo mucho que valen y eso es tarea de los adultos responsables de su cuidado", añade.
Punto crítico
El subcomisario Cristian González explica que "los que llegan a concretar un encuentro físico con los niños son en menor medida, pero eso no quiere decir que el delito si se realiza a través de un medio virtual, no deja de ser delito, se llama delito sexual impropio".
La abogada de la Oficina de Protección a la Infancia (OPD) del municipio de Coihueco, Daniela Hormazábal, precisa que hoy en día las leyes se han ido endureciendo para castigar a quienes cometen estos delitos. "Desde el punto de vista legal, en Chile el año 2011 entró en vigencia la ley 20.526 que sanciona el acoso sexual de menores, la pornografía virtual y la posesión de material pornográfico infantil. Si bien en Chile, antes de la entrada en vigencia de esta ley, ya se penalizaba, en el marco de los delitos informáticos, el almacenamiento y distribución de material pornográfico infantil y el delito el abuso sexual, ocurre que para que exista abuso sexual, hay una fase previa de acercamiento a un niño o adolescente, que es cuando ocurre el 'grooming' y que al no estar tipificado como delito implicaba que, en términos prácticos, la persona sospechosa era detenida y dejada en libertad, simplemente porque la conducta no estaba sancionada en Chile", detalla.
La abogada añade que "en términos simples la ley 20.526, introdujo modificaciones al código penal con el objetivo de llenar este vacío. La nueva ley sanciona como conducta ilícita la solicitud al menor de 14 años de enviar, entregar o exhibir imágenes o grabaciones de su persona o de otro menor de 14 años de edad con significación sexual, e incluye la producción de material pornográfico con menores de 18 años. La ley establece un rango de pena que comienza en los 3 años y un día de prisión hasta los cinco años".
Hoy el uso de las nuevas tecnologías es clave, por ello el subcomisario de la Brigada del Cibercrimen, Cristian González, llama a los padres a enseñar y no prohibir el uso de internet a sus hijos. "Antiguamente se decía que no había que tener el computador en lugares apartados de la casa, algo que ya no va porque los teléfonos son verdaderos computadores que permiten acceder a internet en cualquier lugar. Nosotros no apostamos a conductas prohibitivas, ya que no es la solución. No podemos tapar los ojos a los niños, porque es algo tan masivo y ellos son nativos digitales", puntualiza.
2009
fue el primer caso
en Ñuble, donde fue formalizado por Grooming el ingeniero industrial chillanejo Pedro Bravo Salinas.
3 a 5 años
de prisión arriesgan
los denominados "Groomers", esto gracias al endurecimiento de las leyes en nuestro país.