Coludidos en contra de Chile
La colusión que se deja ver con más claridad en el Chile actual viene de larga data, pero es una colusión de una clase dominante contra Chile como país, para frenar su desarrollo y mantener sus privilegios. Esta clase que se colude es la misma que logró la abdicación de Bernardo O'Higgins, financió la primera desestabilización y anarquía del país, impuso en el poder a Diego Portales y la Constitución de 1833, promueve las guerras económicas contra Perú y Bolivia, financia la guerra civil de 1891, transa la Constitución de 1925 con Arturo Alessandri, impulsa el desarrollo productivo del país en los años 40, para luego apropiarse de la matriz productiva desarrollada y luego promoviendo el golpe de estado del 11 de septiembre de 1973. Es la misma que se mimetiza en la Concertación, en acuerdos de continuidad y silencio con Patricio Aylwin y Ricardo Lagos, la misma que nos hizo creer en el riesgo de "boinazo" para mantener la "amenaza militar", es la misma que luego amparara y protegiera a Pinochet rescatándolo de Londres.
Es la misma que nos hace creer que no somos capaces de generar capital a través de valor agregado a nuestra materias primas, es la misma que nos quiere incorporar irresponsablemente al TPP, es la misma que nos domina actualmente no dejándonos pensar ni actuar, la misma que se aloja en el duopolio político.
Esta clase esta coludida con Chile hoy, habiendo transformado el país en el paraíso de la colusión y la impunidad, siendo la vergüenza de América. Siempre ha estado presente a lo largo de nuestra historia y lo seguirá, en tanto no seamos capaces de asumir nuestra cuota de poder ciudadano.
Enrique Edis Jara Rivera.
Denuncia contra multitienda
Señor Director: Fui cliente de la multitienda Falabella como 17 años y he sido estafado en mi cuenta de crédito personal de compras. Fui deudor de un préstamo de $400 mil en dinero, crédito de consumo. Pagué mensualmente alrededor de $80 mil en un periodo de 7 a 8 meses. Al preguntar por el saldo, ya que lo consideraba pagado, me salieron con que todavía debía $2.350.000.
Fui al Sernac a Santiago, donde me dijeron que cancelara la suma de $1.329.400. Así lo hice, pero pasado un mes me volvieron a llamar de Falabella para comunicarme que me quedaba un saldo de $600 mil. Yo ignoré este saldo porque pensé que sería una broma. Y pasó un año y seis meses aproximadamente y me dejaron una carta informando que tenía una comparecencia con un señor abogado para cancelar dicha cuota y me tenían embargada la camioneta de trabajo por $600 mil.
Yo indignado no acudí donde el señor abogado por temor a descontrolarme. Así es que fue mi señora a dicho comparendo y hace más de un año que está pagando $200 mil mensuales, porque la deuda de $600 mil se ha convertido en $1.145.701. Pienso que aún faltan unos 4 años para terminar dicha deuda de $400 mil en crédito de consumo.
Pedro Inostroza Salamanca.
Desmunicipalización
El proyecto de desmunicipalización de la educación tiene implícito un supuesto, a saber, que la municipalización ha sido una de los causantes de los malos resultados de nuestro sistema educativo y por aquello el Estado debe intervenir haciéndose cargo de la educación. Sin embargo, al observar en detalle el sistema de educación municipal, nos damos cuenta que en la práctica no lo es, sino que es estatal.
Los municipios no tienen herramientas de gestión para poder mejorar la calidad y eficiencia de los colegios. Ocurre que la descentralización nunca se aplicó plenamente. La libertad de enseñanza ha sido sistemáticamente coartada y la competencia es virtualmente inexistente. En la teoría el sistema educativo chileno parece ser liberal y moderno, pero en el fondo, es estatista. Es el Ejecutivo el que fija los contenidos mínimos obligatorios, cuya extensión ahoga la creatividad de los directivos y profesores. La fijación de infraestructura, la negociación de la renta del magisterio, como también la evaluación docente y el aprendizaje curricular, y la jornada escolar, entre otros, se han hecho a nivel central en vez de permitir a los colegios adoptar sus propias decisiones.
Iván M. Garay Pagliai, Director y Fundador de Cheque Escolar
Otra vez los "Chicago Boys"
"El monopolio yo lo odio" decía con fuerza un profesor de derecho económico, señalaba que evitaba el libre mercado y a su vez perjudicaba a los consumidores. De esta forma la colusión, que es en sí un monopolio, perjudica al mercado y la fe en el mercado. En el libro "El Padre de los Chicago Boys: Arnold Harberger" queda claro que los Chicago Boys no están a favor de estas prácticas, que a pesar de todo el mercado libre se sobrepone, hay que buscar formas de fortalecer la libre competencia e impedir que otros, ya sea el Estado o privados, generen colusión o monopolios. Esto se ve en las "Farmacias populares" que acceden a precios preferencial teniendo una "colusión" que desfavorece a la inmensa mayoría de los consumidores.
Arturo Fuenzalida, Economista.