Como Héctor Aguilera Torres de 59 años, fue identificado el hombre que ayer sufrió un fatal accidente mientras realizaba trabajos de reparación en una vivienda ubicada en Quirihue.

El hecho se desencadenó durante la mañana cuando el malogrado hombre llegó a la vivienda ubicada en calle Maipú a realizar las obras de reparación.

En el lugar, ubicó una escalera para ascender a la parte alta del inmueble, pudiendo llegar hasta la cima, a cerca de cuatro metros de altura, sin poseer un arnés ni otras medidas de seguridad para llevar a cabo la arriesgada maniobra.

Por ello, y por causas que aún son investigadas, Aguilera perdió el equilibrio y cayó sobre el pavimento del suelo, golpeando severamente su cabeza. Una vez que los demás trabajadores se percataron del hecho, llamaron a la ambulancia y también a carabineros.

De emergencia, trataron de socorrer como pudieron al hombre; sin embargo, todas estas labores fueron infructuosas, ya que por la magnitud del impacto que sufrió, Héctor Aguilera perdió la vida en el mismo lugar adonde había llegado pocos minutos antes.

De esta manera, personal de la Quinta Comisaría notificó a la fiscalía local de Quirihue, quienes instruyeron realizar peritajes correspondientes para corroborar la tesis del accidente.

Asimismo, se constituyó en el lugar personal del Servicio Médico Legal, quienes después de un par de horas retiraron los restos del malogrado vecino de Quirihue. De esta manera, los peritos forenses llevaron los restos hasta el edificio de la entidad ubicada en Chillán, desde donde serán entregados hoy sus restos a familiares, con el objeto de velar y realizar los funerales del hombre.

Danny Fuentes Espinoza

Una condena de 20 años de cárcel es la que recibió Héctor Cavieres de 33 años, luego de que el tribunal Oral en Lo Penal de Chillán lo declarara culpable del delito de secuestro con violación.

La sentencia fue dada a conocer ayer, en medio de la expectación de los amigos de la víctima, Karen González, ex pareja del condenado, quien también llegó al tribunal.

Los hechos ocurrieron el 9 de junio en el domicilio de Héctor Cavieres, ubicado en la población Lomas de Oriente, de Chillán, hasta donde llegó Karen González para buscar al hijo de ambos, de 7 años en ese entonces, dado que tenían la tuición compartida.

En el lugar, Cavieres, quien se había desempeñado como auxiliar del área de psiquiatría del Hospital Herminda Martín, le inyectó un somnífero que había sustraído en el recinto asistencial.

Según se acreditó ante el tribunal, Cavieres se trasladó con su víctima y el hijo hasta el sector de Atacalco, en la comuna de Pinto, donde acamparon hasta el otro día.

Fue en ese contexto que la mantuvo bajo amenaza, amordazándola y amarrándola de las extremidades. Ya durante la mañana del 10 de junio, a sabiendas de que carabineros los estaría buscando, Cavieres le pidió a su ex pareja que reconciliaran la relación amorosa que habían sostenido por siete años, a lo que la mujer accedió.

No obstante, le pidió que regresaran a Chillán. Fue, de hecho, camino de regreso cuando la mujer aprovechó que Cavieres le permitió ir a comprar alimentos para su hijo, que contactó a la PDI, quienes luego los interceptaron en la carretera, deteniéndolo.

Por estos hechos, el tribunal consideró como atenuantes la irreprochable conducta anterior y también la colaboración sustancial con la investigación. No obstante, también ponderó las agravantes de premeditación y actuar en lugar oscuro o despoblado, argumentando así la pena asignada al delito.

Desde el Sernam, que fue parte querellante del caso, la directora regional de la entidad, Valentina Medel, comentó que "es una condena positiva, en el sentido de permitir a sus víctimas realizar un proceso reparatorio con una sensación de justicia, que es muy relevante en estos casos".

Sin embargo, la víctima, Karen González, criticó al Sernam y también a fiscalía, en tanto ella ya había realizado previamente diversas denuncias por la constante violencia que empleó Héctor Cavieres contra ella. "Un mes antes lo había denunciado por amenazas y recién en octubre, cuando Héctor ya estaba en prisión, me pidieron declarar por ese hecho", dijo la víctima, comentando además que al día de hoy mantiene visita constante al psiquiatra y al psicólogo, al igual que su hijo, quien se encuentra en un programa de reparación del Sename ante la situación extrema que le tocó vivir.

Por al menos cuatro días se espera que se extienda el primer juicio que enfrenta el ex subcomisario de la Policía de Investigaciones, Rodrigo Saldivia, quien fue acusado por fiscalía de apropiación indebida.

Los hechos materia de acusación datan de junio de 2013, cuando el ex subcomisario, quien cumplía funciones en la Bicrim de Chillán, se hizo cargo de la administración de los dineros correspondientes a los arriendos de una serie de oficinas y aparcamientos ubicados en un terreno del centro de Chillán, los que estaban a cargo de su pareja de ese entonces, quien los subarrendaba.

En su alegato de clausura, el fiscal Eduardo Planck comentó que Saldivia se apropió de los dineros de los arriendos fluctuados entre junio y diciembre de 2013. "Ella tuvo confianza en Saldivia por su calidad de funcionario de investigaciones, encargándole la administración de las oficinas donde ella ejercía también su profesión de podóloga".

Por su parte, Francisco García, abogado defensor, esgrimió en su alegato que Saldivia es inocente, en tanto él ayudó a su ex pareja a solventar las deudas incluso con un crédito que solicitó. Además, dijo que fiscalía y querellante calculan una cantidad de dinero que no es tal, dado que las oficinas y estacionamientos no estuvieron todo el tiempo en condición de arriendo, por lo que espera que se le declare inocente. En la audiencia también declaró Saldivia, quien rechazó las acusaciones y señaló que con los peritajes se demostrará su nula culpabilidad.

Además de esta causa, Saldivia enfrenta una investigación por ejercicio ilegal de la profesión y por otra parte, a mediados de marzo se iniciará otro juicio oral, tras haber sido acusado por presunto abuso sexual contra una menor que tenía bajo su tutela la ex pareja.