Baja asistencia local en marcha que convocó la Confech
EDUCACIÓN. La Confech pidió entender el "dolor" de los endeudados.
A pesar de los tres días de duelo que decretó el Gobierno por la muerte del ex Presidente Patricio Aylwin, los estudiantes llevaron a cabo la primera marcha estudiantil del año, que fue convocada por la Confech, la Cones y la ACES, para exigir que sus demandas sean incluidas en el proyecto de reforma a la educación superior.
Parlamentarios habían hecho un llamado a los estudiantes a no marchar. Sin embargo, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), Camila Rojas, aseguró que "el dolor de la familia (Aylwin) evidentemente nosotros lo respetamos".
"También estamos por el respeto de todos nuestros compañeros que han sido endeudados, de todos nuestros compañeros a quienes hoy día les están embargando sus casas, sus bienes, también tenemos respeto por ellos", sostuvo en declaraciones citadas por Emol.
Por su parte, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago (Feusach) Marta Matamala, aludió a una de las frases más famosas de Aylwin al afirmar que "aquí se nos ha dicho que tenemos que conformarnos con lo que se nos ha dicho regularmente, 'en la medida de lo posible', y hoy día los estudiantes tenemos una claridad: todo lo posible, todo lo necesario".
La hija del ex Mandatario, Mariana Aylwin, señaló en la mañana de ayer que no le molestaba la marcha, pero que los jóvenes tenían que aprender a "respetar los ritos republicanos".
Los estudiantes piden que el sistema universitario sufra cambios estructurales y que se modifique la forma de financiamiento y la gratuidad universal. Los secundarios piden cambios al proyecto de desmunicipalización que actualmente se tramita en el Congreso, así como la modificación del actual financiamiento.
Según la organización, la marcha congregó a más de 120 mil personas en la capital. Situación diametralmente opuesta a lo vivido en Chillán, donde un pequeño grupo de no más de 50 estudiantes realizaron una marcha pacífica por el centro de la ciudad, sin provocar desmanes ni mayores inconvenientes al tránsito.
A nivel nacional, Carabineros no entregó la cifra de asistentes e informaron que la movilización terminó con incidentes aislados en Santiago, que dejaron más de 50 detenidos y tres carabineros heridos. En Chillán, la asistencia fue bastante baja.