Este 27 de junio se inicia en el país y en la región del Biobío la implementación de la Ley 20.606 "Composición Nutricional de Alimentos y su Publicidad", que regula el etiquetado de alimentos, venta en kioscos escolares y la publicidad dirigida a menores de 14 años de edad.
A través de esta política pública, que tomó un cariz altamente participativo, tras los Diálogos Ciudadanos realizados el año 2014 que permitieron elaborar y finalizar su Reglamento, se busca contribuir a una urgente modificación de los hábitos alimenticios, por cuanto un 95% de la población requiere cambios en su alimentación, de acuerdo a lo señala la Encuesta Nacional de Consumo Alimentario.
Fundamentos sobran para que autoridades, empresas, comunidades educativas y familia se alineen tras el objetivo común de reducir la malnutrición por exceso, que de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud 210 alcanza al 67% de la población, es decir a 8 millones 900 mil personas; con principal afectación a los más pequeños, donde 5 de cada 10 de ellos en primero básico presenta exceso de peso (Junaeb 2014).
En nuestra región, de acuerdo al Diagnóstico Nutricional Integrado de la población bajo control menor de 6 años, al 2015, 12,5% de ellos tiene obesidad y un 24,4% sobrepeso; mientras al revisar el Diagnóstico Nutricional de Gestantes de la región, en el mismo año, 31,1% es obeso y un 32,5% presenta sobrepeso. Si esos datos parecen preocupantes, aún más lo son los daños asociados al binomio obesidad - sobrepeso, que pueden ocasionar disminución de autoestima y apnea del sueño; acentuación de desviaciones de columna, aumento de lesiones articulares; problemas cardíacos, respiratorios, al hígado y riesgo de diabetes; además de incidir en enfermedades como la diabetes, hipertensión arterial y riesgo cardiovascular, de acuerdo a conclusiones del Estudio de Carga de Enfermedad 2007.
Desde el punto de vista de la implementación de la normativa, como autoridad sanitaria es nuestra responsabilidad y deber ético hacer cumplir las disposiciones de ella, realizando vigilancia activa en la región, verificando que los envases de productos alimenticios que estén sobre los límites establecidos como recomendables, estén rotulados con la frase "ALTO EN", sobre un fondo negro y ubicados en la cara principal de la etiqueta; lo que indiscutiblemente favorecerá una elección en el marco de información más clara al consumidor. Ello también implica fiscalizar la disposición de prohibición de publicidad a menores de 14 años, salvaguardando que tampoco puedan expenderse productos con nutrientes críticos que incentiven la compra a través de "ganchos comerciales", como pueden ser juguetes o regalos; lo que disminuirá las presiones publicitarias para el consumo de productos con nutrientes críticos y permitirá avanzar en entornos más saludables.
Mauricio Careaga Lemus Seremi de Salud Región del Bío Bío.