Con el objetivo de verificar el cumplimiento a la Ley nacional de fármacos, que garantiza a la población el acceso oportuno a medicamentos seguros, de calidad y a un precio justo, la Seremi de Salud del Biobío en Ñuble, a través de su Delegación Provincial efectuó 28 fiscalizaciones durante el primer semestre de este año.

Dicho proceso de control busca evitar la venta de medicamentos bajo el sistema de "canela", es decir, que los trabajadores dependientes reciban incentivos para inducir la compra de determinados fármacos, con el consiguiente perjuicio económico para el usuario; se verifica la prohibición de publicidad en los locales de farmacia, medidas que apuntan a favorecer el uso racional de los productos y la decisión libre e informada; entre otras disposiciones.

Otros de los aspectos supervisados por la autoridad sanitaria dicen relación con que se dé cumplimiento a la presencia del profesional químico farmacéutico, cadena de frio, control de productos estupefacientes y psicotrópicos, cumplimiento del petitorio mínimo de medicamentos; que los establecimientos cuenten con listado de precios actualizados, listado de bioequivalentes, precios en los envases de los medicamentos, disposición a la vista de los bioequivalentes e información de farmacias de turnos.

Multas

Las 28 fiscalizaciones realizadas a la fecha en Ñuble no han dado origen a sumarios sanitarios, mientras que el año pasado, a igual fecha, se registraban 3 sumarios. En tanto, que el año pasado, a igual fecha, se registraban 29 fiscalizaciones; y durante todo el 2015 la cifra alcanzó las 67 inspecciones sanitarias a nivel provincial.

Los establecimientos que incumplen la normativa se exponen a sanciones que van desde multas de 4 a 63 UTM (medianamente grave a muy grave, según tipificación del Ministerio de Salud año 2002), hasta la clausura del local.

La extensión, dispersión y la imposibilidad de muchos de sus habitantes de llegar de manera expedita al sector urbano de la comuna, fueron los aspectos que consideró el alcalde de San Ignacio, Wilson Olivares, para poner en marcha próximamente la primera farmacia popular móvil en la provincia de Ñuble.

Si bien, en algún momento se analizó la alternativa de instalar un nuevo local (existe un almacén farmacéutico en la parte urbana), se optó por contar con una farmacia móvil que pudiera recorrer localidades como Pueblo Seco, Quiriquina y San Miguel. "Teniendo en cuenta la extensión, dispersión y la dificultad de nuestra gente para llegar al área urbana, es que se decidió contar con una farmacia móvil que pueda llegar a todos sus rincones a contar de agosto", precisó el alcalde Olivares.

Respecto al mecanismo que se utilizará para la venta de los medicamentos, Olivares señaló que la idea es actuar como intermediarios, "haremos la gestión de adquirir el medicamento y traspasarlo al usuario a precio costo", detalló la autoridad comunal.

Inscripción

Según Samuel Cádiz, jefe del Departamento de Salud Municipal de San Ignacio, no se manejarán grandes volúmenes de medicamentos, "se comercializarán básicamente fármacos de especialidades que no están en el arsenal farmacológico de la atención primaria", explicó.

Actualmente el municipio se encuentra en el proceso de inscripción de los futuros beneficiarios. No obstante, en primera instancia, se realizó un sondeo para saber las necesidades de la comunidad en relación a la adquisición de medicamentos, "arrojando que alrededor de 2 mil personas entraban en ese grupo, tras el primer filtro dicha cifra se redujo a alrededor de 800. Sin embargo, esperamos que ese número se incremente cuando la Seremi de Salud del Bío Bío nos autorice", enfatizó Cádiz.

Cabe recordar que podrán acceder a los medicamentos de la farmacia popular móvil, quienes vivan y trabajen en San Ignacio.

Actualmente el municipio se encuentra acondicionando el vehículo que usará como farmacia móvil, ya que se pretende que la próxima semana sea inspeccionado, ingresando además la respectiva carpeta a la Seremi, organismo encargado de entregarle la autorización para su funcionamiento.

Requisitos

Para su funcionamiento, las farmacias móviles itinerantes deberán entregar antecedentes como declaración respecto de la ubicación, horarios e itinerarios cuya autorización se pretende. Además de la copia de los instrumentos legales que acrediten dominio del vehículo, permiso de circulación y revisión técnica.

Por otro lado, la autorización por parte de las municipalidades respecto de los sitios de su ubicación cuando se trate de lugares o vías de uso público. En lo relativo al vehículo, debe contar entre otras cosas con el equipamiento que asegure el almacenamiento, conservación, control de temperatura de los medicamentos.

Desde la Seremi de Salud confirmaron que el municipio ha realizado las consultas pertinentes, "señalando que prontamente se acercarán a efectuar la tramitación efectiva", precisaron desde la autoridad sanitaria del Bío Bío.