Las presentaciones hechas ante Contraloría, por la Corporación Quo-Vadis y la empresa FCC Construcciones S.A. fueron el tema de la reunión que ayer sostuvieron el diputado Carlos Abel Jarpa y el contralor general, Jorge Bermúdez, para analizar la licitación del proyecto del Hospital de Chillán que se encuentra en etapa de evaluación y posterior adjudicación.
A menos de dos semanas para que se adjudiquen las obras a una de las siete empresas que ofertaron, en la oficina de dependencia de regulación, de Contraloría del Biobío se encuentran las presentaciones que deben ser revisadas, razón por la cual están presentes las dudas respecto de los plazos del proyecto, las cuales fueron consultadas por el diputado.
"Se está analizando el proyecto, el cual es complejo, dado que son una serie de cajas con antecedentes que se deben revisar producto de la magnitud de la inversión y el compromiso asumido es a tener una respuesta oportuna", explicó el contralor Jorge Bermúdez.
Por su parte, el diputado Carlos Abel Jarpa agradeció la deferencia del contralor y el compromiso asumido de analizar el proyecto en virtud de la relevancia que éste tiene para los habitantes de la futura región de Ñuble.
"Fue una muy buena reunión, donde señaló que efectivamente la envergadura de este proyecto hace compleja su revisión. Sin embargo, adquirió un compromiso que se valora, dado que esta inversión equivale a 30 teatros municipales y se comprometió a hacer una tramitación lo más expedita posible entendiendo lo que significa para la futura región", explicó el legislador.
Valor agregado
El 3 de agosto pasado venció el plazo que le entregó Contraloría Regional al Servicio de Salud Ñuble para responder el cuestionamiento hecho por la Corporación Quo-Vadis, que aseguró que el cobro de impuesto que se le aplicó a la sección de consultoras estaría equivocado, ya que éstas se encuentran impedidas de pagar IVA, de acuerdo al artículo 2 N°2 del decreto de ley que regula este impuesto.
El Servicio de Salud entregó su informe antes del plazo, pero tres días más tarde ingresó una nueva presentación, esta vez realizada por una empresa que participó en la licitación, la cual debatía el hecho de solicitar -por parte de la comisión evaluadora- documentos en un periodo que estaría fuera del plazo establecido en las bases y que afectarían la oferta.
Documentos como el formulario N°6, que es el de experiencia de la empresa o el formulario N°8 B 1, sobre los antecedentes del profesional proyectista de climatización, fue parte de lo que se pidió fuera de plazo y sin que estas solicitudes estuvieran reguladas por las bases de licitación.