Romería destacó a Oyarzún y a otros que dejaron huella
ÑUBLENSE. Con la visita a la tumba del emblemático entrenador del Rojo, el club bajó la cortina a los actos oficiales del centenario.
En cada aniversario de Ñublense, la romería a la tumba de Nelson Oyarzún es infaltable y por su puesto que en el marco del centenario no se podía faltar a la tradición.
La visita al cementerio de Chillán para dejar una ofrenda floral a los pies de la tumba del ex entrenador de los Diablos Rojos, es uno de los hitos más emotivos que da paso al recuerdo de quien falleciera producto de un cáncer en 1978 en la previa de un partido contra Colo Colo, pleito en el cual los chillanejos ganaran por 2 a 1.
El plantel de honor y cuerpo técnico asistió en pleno, al igual que un puñado de jugadores del fútbol los cuales no solo reconocieron a Nelson Oyarzún, sino que también a otros que dejaron su huella como los ex presidentes, Pedro Guzmán Álvarez y Osvaldo Erbetta Walker, también se citó a quienes se sentaron en la banca técnica Esaú Bravo e Isaac Carrasco y también a ex comentaristas y relatores radiales como Óscar Navarrete y Jorge Antonio Quijada. No se omitió al ex ayudante de campo, Alfredo "Torpedo" Núñez y a Carlos Cerda, quien fuera reconocido en el marco del centenario como el denominado hincha histórico.
"Para mi es algo habitual, es algo en el cual venimos al camposanto para rendir honores a Nelson Oyarzún y como es costumbre vino todo el plantel y el cuerpo técnico para estar presente en esta ceremonia. Tuvimos una semana llena de actividades y ahora nos enfocamos en el partido", dijo el capitán de los Diablos Rojos, José Antonio Rojas, quien ya se centra en el choque del domingo a las 15.30 horas contra Puerto Montt.
El gerente Hernán Rosenblum, destacó también la trascendencia de la tradicional romería. "Es un momento recogedor, inspirador, es algo importante porque Nelson Oyarzún marcó esta institución a fuego y uno lo nota en todas las celebraciones. En este caso la presencia del fútbol joven y de todo el plantel es importante para que se impregnen de este sentimiento que es muy noble y que saca la frialdad del día a día en el cual se exigen resultados".
"Ñublense es más que resultados, es una institución familiar y en cien años de historia han pasado muchas cosas y que no solamente tienen relación con el fútbol", agregó.
Rosenblum también dejó en claro en el marco de las celebraciones del centenario se reconoce a quienes inscribieron su nombre en la lista de inmortales, aunque de seguro hay muchos que no fueron citados, pero no por eso olvidados. "En cien años ha pasado mucha gente y es lógico que se escape más de alguno. Ojalá podamos recordar uno por uno a cada de quienes han pasado por un club, jugadores o dirigentes que han aportado sanamente para el engrandecimiento de esta institución", concluyó el gerente.
La barra también celebra
Para la tarde de ayer la barra de Ñublense organizó una marcha familiar desde el estadio a la Plaza de Armas, la cual se suspendió por la lluvia que se dejó caer.
Para esta mañana desde las 10.00 horas se realizará una segunda romería a cargo de los hinchas y desde las 20.00 horas la cena en el estadio que contará con baile y la presencia de dobles de algunos artistas.
La premiación del concurso Centenario en 100 palabras, organizado por el Movimiento Autónomo Ñublensino de Esfuerzo y Valor, se postergó para el 2 de septiembre en la Librería Qué Leo.
Nelson Oyarzún 1978
Arribó a Chillán y en pocos meses supo plasmar una identidad de juego y un profesionalismo poco conocido para la época. 20