El anuncio realizado ayer por la concesionaria del predio termal, Nevados de Chillán, sobre el prematuro cierre de la temporada esquiable en la cordillera de Ñuble, viene a confirmar el mal año que tuvo el turismo de la zona esta temporada 2016, algo que sin duda trae consecuencias tanto a la visita de turistas como a la economía ñublensina.
La llegada del invierno en la zona es esperada con ansias pro muchas personas que ven en este nicho, una fuente laboral de ingresos, dado principalmente por el gran flujo turístico que se produce. Tanto Nevados que genera puestos de empleos para instructores de esquí y trabajadores de sus hoteles, como para los negocios del sector de Las Trancas que ven como el alojamiento crece considerablemente.
Cifras que este 2016 quedaron bastante atrás. La escasez de nieve que obligó a posponer en varias semana el inicio de la temporada esquiable, sumado a los continuos pulsos eruptivos del volcán que se mantiene con alerta amarilla, se conjuraron para que esta vez la cordillera de Ñuble no sea atractiva para visitar. Lamentablemente contra la madre naturaleza no hay poder que pueda ir en su contra, y ahora nos golpeó con fuerza. Pero la cordillera es más que nieve, sus atractivos son infinitos, de ahí la invitación a llegar con total tranquilidad a disfrutar de un hermoso entorno natural, paisajes que son realmente hermosos, casi imposibles de ver en otros lugares. Los empresarios de la zona están llamados a reestructurar sus negocios, crear un valor agregado para que, si el próximo año esta situación se repite, atraer un mayor flujo de personas aumentando los atractivos turísticos, que un lugar como éste ofrece.
Aquí también deben intervenir autoridades de gobierno como Sernatur, con la finalidad de potenciar este destino turístico, capacitar a los empresarios, abrirse a nuevas experiencias, potenciar las fiestas costumbristas, conocer cómo se trabaja en otros lugares que viven de la cordillera en temporada de invierno.
Hoy estamos sin nieve y con un volcán activo, pero seguimos mantenido un lugar maravilloso digno de exportación y de conocer.