Los canes que vivían en los espacios del campus La Castilla de la Universidad del Biobío-Chillán empezaron, de pronto, a ser matados y desaparecer sin ninguna explicación.
Esta situación no pasó desapercibida por la Unión Protectora de Animales (UPA) de la mencionada casa de estudios. Rubén Quezada, presidente de UPA, habla de un aproximado entre 10 y 15 perros desaparecidos. "El problema surgió a principios de este año donde desaparecieron 2 perritos que son muy emblemáticos y llevaban muchos años dentro de la Universidad. Tenemos las sospechas de las personas que están involucradas", cuenta.
A Quezada le parece extraño que se estén exterminando a los perros, ya que ellos como organización reconocida por la Universidad, desde principios de este año se encargan de los cuidados médicos e identificación de los caninos con recursos de los mismos miembros.
"No entendemos estas desapariciones dentro de la Universidad, porque son perritos que tienen el cariño de estudiantes y profesores y que en cuanto a salud no representan ningún tipo de conflicto", indicó Quezada.
Un detalle que resalta el presidente de UPA, es que los trabajos de desaparición se realizan los fines de semana largo. "El temor que tenemos es que ya viene el periodo de vacaciones y que con esto puedan desaparecer más perritos".
Caso San Ignacio
En San Ignacio sucedió una matanza de perros, específicamente en el sector Pueblo Seco. Alrededor de 10 perros murieron por envenenamiento.
Jeannette Vega de la Fundación Nëwen, contó que en dicho sector realizan constantemente operativos de vacunación contra las garrapatas y que el día siguiente de haber completado una jornada más, sucedió el hecho.
"Eso fue un domingo que vacunamos y al día siguiente me llaman para decirme que los perros que vacunamos se estaban muriendo. Fui casa por casa para verificar y uno de los vecinos me dijo que se le habían muerto los dos perros, uno vacunado y el otro que no. Evidentemente alguien les tuvo que dar un veneno", asegura Vega.
"Por la forma de morir con muchas convulsiones y caída de pelo, me comentaron que pudo haber sido con algún producto para fumigar", dice Vega, quien agregó que fue hasta Carabineros sin tener éxito: "Me dijeron que sin pruebas no se podía hacer nada".
Investigaciones
Ante estos hechos ocurridos, miembros de UPA se reunieron con la Federación de Estudiantes de la Universidad del Biobío (Feubb) para comenzar una recolección de información que les permita presentar una acusación formal.
"Existe un audio de una persona que trabaja en el interior de la universidad que fue testigo ocular de cómo a un perrito lo mataron a palos. Lamentablemente esta grabación fue tomada en un contexto de conversación. Lo que estamos haciendo es tratar de convencerlo para que dé su testimonio de forma pública para que pueda pasar a una instancia mayor", explica Quezada.
Elevar una denuncia ante la justicia es complejo en estos casos. Así lo hace saber el presidente de la organización Protección Animal Chillán (Proach), Carlos Parra.
"Lo que falta es una ley clara, porque la que existe no específica lo que es o no es maltrato y queda todo a objetividad del juez", cuestiona.
Jornadas de esterilización
Durante el fin de semana, se estuvieron realizando jornadas de esterilización por parte de diversas organizaciones defensoras de los animales. El sábado el grupo Protección Animal Chillán (Proach) estuvo en un operativo municipal donde fueron atendidos 9 perros y 8 gatas sin dueño. Mientras que ayer "se esterilizaron 70 mascotas, entre perros y gatos todos con dueños. Esto fue organizado por el grupo Unidos Por Los Animales Chillán (Upachi) y el grupo veterinario Enemigos del maltrato animal (EMA), nosotros estuvimos como apoyo", indicó Carlos Parra, presidente de Proach.