Crónica Chillán
"Terminaron tres años de mucho sacrifico", con esa frase el delantero y emblema de Ñublense, Luis Flores Abarca, daba a conocer la noticia de su titulación como entrenador de fútbol profesional.
El "Pistolero" finalizó su curso en el INAF, y sueña con algún día poder dirigir al primer equipo de los Diablos Rojos para "devolverle al club todo lo que me ha dado".
Y es que desde su renuncia al fútbol profesional debido a un problema cardíaco, Flores se tuvo que reinventar, sacó su título de preparador físico y de paso, volvió a la actividad profesional convirtiéndose en un aporte invaluable al joven plantel rojo en el campeonato de la B, traspasando su experiencia y su calidad futbolística.
"Es una decisión que había tomado hace tiempo, sabía que tenía vocación para eso y hace tiempo me venía preparando no solo en la parte técnica, sino que también en la física teniendo también el título de preparador físico nivel superior en Inacap y ahora sacando estos tres años de bastante sacrificios, principalmente por el tema de los viajes", comentó el ariete.
Flores también agrade el apoyo que recibió del club, con los permisos para poder viajar a Santiago. "Tuve mucho apoyo de parte de la institución, el apoyo primero de los dirigentes de Ñublense y después del cuerpo técnico comandado por Pablo Abraham, sin ellos no hubiese sido esto posible porque me autorizaron en poder rendir con mi responsabilidad en cuanto a mis estudios".
Sello ofensivo
Como buen delantero, Flores adelanta que sus equipos plasmarán un sello ofensivo. "Me gusta la posesión del balón, ataque construido con mucho vértigo por las bandas, las sociedades, proyección de los laterales, me gusta mucho el volante central entre los centrales para proyectar a los dos laterales y dejar un equilibrio en la parte ofensiva. Me gusta el juego lindo, toque, pasar por la espalda, buscar la pared. Uno como jugador y por mi posición, pienso más en el ataque y eso me hace tener en mi cabeza muchas variantes al atacar", reconoce.
Consultado si el ser jugador le da un plus extra como entrenador, el "Pistolero" le resta importancia, asegurando que "da un plus, pero más que nada en algunas situaciones que uno puede prever o visualizar de acuerdo a la experiencia, pero hay mucha metodología y preparación que uno debe manejar, por eso esto también me ha abierto la mente no tan solo en la parte técnica, sino que como futbolista".
Y ya se proyecta para dirigir a Ñublense. "Es un sueño dirigir a Ñublense, me encantaría poder darle a la gente lo que se merece, títulos y porque no soñar con cosas grandes, pero son cosas a largo plazo", aseguró.
Junto con Flores, otros ex Ñublense también se titularon. Es el caso del arquero Jorge Deschamps (hoy en Curicó), el delantero Juan Francisco Viveros, quien vive en Chillán, y el atacante Renato Ramos. Precisamente con este último, Flores rendirá su tesis final para ya tener el título en su poder. Además José Antonio Rojas sigue los mismos pasos, pero aún le resta un año para finalizar sus estudios.