El squash local muestra un progresivo ascenso, gracias al trabajo y gestión del Cristian Schulz,
Entre los discípulos de Schulz destaca Felipe Quezada, chillanejo de 18 años que terminó el 2016 como el número 10 de Chile en la clasificación general y como el número uno en Sub 19.
"El 2016 fui el número uno de la Liga Sur, luego de disputar ocho campeonatos durante todo el año, así que claramente fue un muy buen año", dijo el ex alumno del Colegio Chillán.
El 2016 ya es pasado para el exponente del deporte frente al frontón y ahora se proyecta para el primer reto internacional de esta temporada, el Panamericano que se vivirá en Paraguay entre el 6 y el 12 de febrero. "Ya me estoy preparando para el Sudamericano Juniors y estoy entrenando duro, mañana y tarde, para sacar alguna medalla, ojalá un segundo lugar", dijo quien hace cinco años practica dicho deporte.
Desde aquellos primeros remaches, el chillanejo de inmediato se puso la camiseta de la Selección Chilena, equipo con el cual ya ha participado fuera de las fronteras nacionales. "La última vez que participé fuera de Chile fue el Panamericano de Estados Unidos, donde obtuve una medalla de bronce", recordó.
"Para que te vaya bien en este deporte el 70 por ciento es físico y el 30 por ciento es técnica, lo fundamental es el fondo físico que puedas tener", dijo sobre los secretos del squash.
El ránking lo completan Jaime Pinto, Sebastián Gallegos, Álvaro Carranzas, Rafael Allendes, Andrés Rodríguez, José Gallegos, Matías Lacroix, Rodrigo Suavalle y Anita Pinto, quienes ocupan el lugar desde el uno al nueve respectivamente, mientras que Quezada es el diez.
Cristian Shulz, entrenador que desarrolla su capacidad en la ciudad, destacó el lugar de privilegio que ostenta el chillanejo como top ten del squash. "Felipe desarrolló su capacidad producto de las escuelas de squash que se hacen en el gimnasio Alquimia y de donde han salido varios niños y en estos momentos es el mejor jugador de Chillán en este momento".
"Felipe ha mejorado mucho su nivel y puede dar mucho más producto de lo joven que es y en este momento está entrenando para el Sudamericano con miras a obtener una medalla", dijo.
El entrenador también destacó la presencia de otros chillanejos que encabezan sus categorías como por ejemplo, Enrique Arelmann, quien es el uno de Chile en Sub 15 y también va al sudamericano y Camilo Cifuentes, ganador en Sub 13 y también participante en Paraguay. "Fue un muy buen año para el squash y esperamos que el 2017 todos los niños se transformen en una realidad y tengan más éxitos", concluyó Schulz.
El entrenador fue el impulsor de la disciplina en Chillán, hace ya cerca de cinco años, el penquista llegó a la ciudad para instalarse y explotar las características naturales de algunos chillanejos que en el gimnasio Alquimia desarrollaron su talento, instancia de la cual emergieron los hermanos Cristóbal y Florencia Opazo, su prima Josefina Opazo, quienes compitieron a nivel internacional, mientras que a su alero crecía Felipe Quezada que el 2016 se ubicó en la elite del squash chileno.
Pionero en Chillán
En 1997 y en Concepción, Cristian Schulz comenzó a practicar squash para luego perfeccionarse a través de cursos en la misma ciudad, posteriormente tomó otras instancias formadoras y participó en diversos eventos, el profesor de educación física llegó a Chillán hace ya cinco años y de inmediato comenzó a descubrir y potenciar los talentos. De acuerdo a sus palabras, este deporte se caracteriza por la capacidad anaeróbica, tener buenos reflejos, coordinación y técnica de golpe. Además, se necesita rigurosidad y está abierto para jóvenes y adultos.