1.500 familias estuvieron sin luz eléctrica a raíz de los incendios
ÑUBLE. Vecinos de las diferentes comunas afectadas por el fuego dependen de la electricidad para obtener agua de sus pozos. Copelec aseguró ayer que el 99% de los servicios ya está activo.
Hasta ayer 83 incendios forestales se encontraban en combate a nivel nacional, 59 controlados y 9 extinguidos. La tragedia que ha significado esta seguidilla de siniestros en diferentes regiones del país traen consigo un sinnúmero de repercusiones para las familias que han sido víctimas del desastre, puesto que sumado al drama de haber perdido sus hogares, deben afrontar la pérdida de sus lugares de trabajo y el corte de suministros básicos.
Precisamente el corte de energía ha sido uno de los mayores problemas que se han presentado para los pobladores de las comunas afectadas. Según informó Copelec, más de 1.500 de sus usuarios sufrieron la suspensión del suministro eléctrico desde el 20 de enero a la fecha, lo cual significó un problema adicional.
Cortes de energía
Sin duda Portezuelo ha sido uno de los lugares que más daños ha sufrido los últimos días a raíz de las voraces llamas que han amenazado los sectores rurales de dicha comuna. Quitento y Los Sauces fueron los más afectados.
"Yo al momento del incendio no estaba en la casa porque andaba en cerro tratando de que el fuego no pasara para este lado, pero nos vimos sobrepasados y tuvimos que volver. Cuando llegamos, de la casa no quedaba nada, puras cenizas. No alcance a sacar nada y más encima se cortó la luz", relató Patricio Paredes, vecino del sector Quitento de Portezuelo.
Paredes además comentó que insumos como la luz eléctrica es indispensable para los sectores rurales, ya que el agua también depende de este suministro. "Para nosotros es súper importante tener luz porque con la luz nosotros tenemos agua, sin electricidad los motores no prenden para sacar agua del pozo, porque todo eso funciona por medio de punteras, y sin agua ¿qué hacemos?", agregó.
Esta misma situación se replicó en otras cinco comunas que se han visto afectadas por los incendios en las últimas dos semanas. Familias de Chillán (específicamente Santa Cruz de Cuca), San Nicolás, Bulnes, San Fabián de Alico y San Carlos también sufrieron la interrupción de la energía eléctrica, y al igual que en Portezuelo esto significó el corte también del agua.
"A nosotros se nos quemó todo el campo, nosotros vivimos de la agricultura, tenemos aves, pavos, ovejas, y las gallinas se nos quemaron muchas, pavos igual. Algunos pueden decir que no es tanto, porque no se quemó la casa, pero se nos quemó nuestra fuente laboral y si sumamos a eso el hecho de no tener luz, es terrible", señaló Josefina Andana, vecina de Piedra Lisa en San Nicolás.
En ese sector, sin embargo, la luz no tardó más de 48 horas en ser repuesta. "Acá ya está funcionando el servicio de energía eléctrica y de agua potable, pero los dos primeros días estuvimos sacando agua con balde del pozo, y eso es peligroso y difícil, por eso agradecemos que la luz haya vuelto luego, porque sin luz tampoco hay agua, eso de repente la gente no lo entiende. Al final esto es como una cadena, porque el humo era insoportable, y sin luz no teníamos agua, y sin agua no podíamos limpiar ni capear el calor", agregó Josefina.
Despliegue de emergencia
Copelec, que cuenta con más de 70.000 usuarios en la provincia de Ñuble, ante la dramática situación que se ha vivido a raíz de los incendios, ha extendido todo un operativo de emergencia para poder restaurar el suministro eléctrico a las familias más afectadas.
Aproximadamente desde el 20 de enero, desde que empezó la emergencia de los incendios, eran más de 1.500 personas las que se encontraban sin suministro eléctrico. Miguel Hernández, jefe de Operaciones de la Cooperativa, aseguró que -hasta ayer- el 99% del servicio estaba repuesto.
"Hoy deberíamos llegar al 100%, siempre y cuando no haya otra emergencia, que esperemos no sea así. El 21 de enero nosotros iniciamos nuestro protocolo de emergencia. Trabajamos las 24 horas del día, con tres brigadas, es decir alrededor de 100 personas en terreno. La forma de hacer nuestro trabajo es comunicándonos con Bomberos y la Conaf, donde se nos informan los focos de incendio y al momento en que ellos nos permiten pasar nosotros nos dirigimos al lugar y empezamos inmediatamente a trabajar, a reponer los postes y empalmes", señaló Hernández.
El Jefe de Operaciones dijo, sin embargo, que muchas de las viviendas fueron destruidas en su totalidad, por lo que se tuvo que recurrir a otro tipo de ayuda.
"Hay varias casas que se quemaron enteras, en esos casos lo que estamos haciendo nosotros es colocar un kit de faena con su medidor, su automático y su enchufe para que la gente pueda usar lo básico, que principalmente es la bomba de agua", señaló Hernández.
Corte preventivo
Engiria Parra vive con su madre de 80 años en un sector rural de San Nicolás. La mujer asegura que la situación de los incendios le ha traído más de un problema, sobre todo por la agresividad con que avanzó el fuego.
"Fue todo súper rápido, se me quemó todo el galpón, donde teníamos alimento para las aves y las ovejas, motores, una moto, todo eso se quemó", contó afligida.
Engiria comentó también que la luz no se cortó cuando el fuego alcanzó su propiedad, sino dos días antes. "La luz acá se cortó mucho antes que llegara el fuego, cuando el incendio estaba lejos de San Nicolás".
Manuel Bello, presidente de Copelec, explicó que esta situación se debe a que desde hace un tiempo ya existe un sistema que permite prevenir las altas temperaturas en el tendido eléctrico, para así evitar posibles focos de incendio.
"Desde noviembre que nuestros equipos de línea de Ñuble están al mínimo grado de sensibilidad, eso quiere decir que cuando se presenta una temperatura mayor a los 30°, operan y se desconectan automáticamente, y esto precisamente para evitar que haya incendios forestales", señaló.
Además, Bello aseguró que se ha realizado un despliegue en todas las zonas afectadas por las llamas, y que se ha ido reponiendo automáticamente los servicios, de manera paulatina pero eficaz, pero que sin duda se debe trabajar más en el tema de seguridad forestal.
"Hemos reaccionado de manera muy óptima, con un trabajo que se viene realizando hace muchos años, me refiero principalmente al roce. Desde hace mucho tiempo ya se ha invertido en eso, y quiero decir que si se hubiera hecho una labor de despeje correcta, no habríamos tenido tanto problema con los incendios", manifestó el presidente de Copelec.
Bello concluyó asegurando que, tanto lo del roce, como lo del corte de suministro automático, lo van a mantener como protocolo estable, pues "a pesar de que no está dentro de las normas y reglamentos de la ley eléctrica, hoy tenemos que salvaguardar que la cooperativa tenga un servicio responsable, seguro y sobre todo de calidad".
"Hay varias casas que se quemaron enteras, en esos casos lo que estamos haciendo nosotros es colocar un kit de faena con su medidor, su automático y su enchufe para que la gente pueda usar lo básico, que principalmente es la bomba de agua".
Miguel Hernández, Jefe de Operaciones de Copelec."
Reposición de energía eléctrica
Aparte de Copelec, CGE también ha doblado esfuerzos para recuperar la electricidad a los usuarios afectados por los incendios. En la región del Biobío, existen aún 285 clientes de CGE sin luz eléctrica, donde se han preocupado especialmente de la comuna de Cobquecura, debido al foco de fuego que se produjo en la zona. Las brigadas de la empresa se han dispuesto a trabajar en la reposición del suministro en aquellos lugares donde se ha contenido la emergencia y ya se han entregado más de 350 kits de emergencia, 200 canastas familiares, 10 estanques de agua y más de 200 linternas en las zonas más afectadas.