Esperan frenar contagio masivo de tuberculosis aviar
LLOLLINCO. Municipio de Chillán Viejo comenzó a trabajar con vecinos del sector rural y convocará a una mesa técnica integrada por el SAG, Indap y la comunidad afectada .
La sospecha que la semana pasada esbozó la municipalidad de Chillán Viejo al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), respecto de la muerte de aves a causa del contagio por tuberculosis aviar en predios cercanos al relleno sanitario e industrial ubicado en el sector rural de Llollinco, está a un paso de confirmarse.
"Hoy (ayer) nos debió llegar el informe desde el SAG con la confirmación, pero no alcanzaron a terminarlo, pero sí nos señalaron que existiría un 90% de certeza que las aves murieron por tuberculosis aviar, así que empezaremos a trabajar con la población, ya que hay que trabajar en el sentido de que las aves de este sector no se pueden comer y tal vez tendrán que sacrificarse", explicó Antonio Arriagada, encargado del departamento de Medioambiente del municipio de Chillán Viejo.
La información que se manejaba a raíz de denuncias hechas por los vecinos sobre esta mortandad en sus predios, dio paso para que el municipio solicitara un informe a la Universidad de Concepción, el cual determinó que el fallecimiento se debería al contagio de tuberculosis aviar.
Este documento preliminar, que fue entregado al SAG, detonó para comenzar la investigación desde un órgano de gobierno, para oficializar la información y comenzar con la contención de la población y evitar la propagación o que el contagio se traspase a la población.
"Lo importante es que la institucionalidad está funcionando con estas fiscalizaciones que se realizan. Una vez que tengamos el reporte oficial vamos a saber qué medidas son las que se deben adoptar tanto con la salud animal, como de las personas que son vecinas del relleno. Siempre he estado preocupado del tema de Llollinco y creo que toda la parte ambiental muy compleja y me alegro que esté funcionando todo lo que implica la fiscalización, para dar tranquilidad a la comunidad", sostuvo el diputado Carlos Abel Jarpa.
Ante la gravedad de lo que podría pasar, en caso de masificarse el contagio, ayer se realizó una reunión con los vecinos, a quienes se les informó que el alcalde de Chillán Viejo convocará a una mesa técnica integrada por representantes del SAG, Indap y la comunidad afectada.
"Si bien es cierto es lamentable lo que pasa con algunos rellenos a nivel nacional, pero también es cierto que la fiscalización que está haciendo tanto el Ministerio de Medio Ambiente como el de Salud, es buena", dijo el parlamentario.
Las tres posibles causas de contagio serán atacadas previo a la entrega del informe del SAG, por lo que se monitoreará la empresa de secado de algas, que está en el camino de entrada a Llollinco, el relleno sanitario e industrial y además el intercambio o compra de aves.
"No creo que sea el contagio por algas o que haya llegado desde afuera la enfermedad. Creo que debe ser del relleno porque hace menos de 15 días hubo un derrame en el relleno industrial y al joven que le ocurrió este accidente lo despidieron, entonces son estas aguas las que contaminan el suelo y las napas, que es lo que después deben tomar los animales, las gallinas y aves. Lo único que pido es que en caso de hacer un muestreo sea con una empresa de fuera y no de la región", pidió Lilian Sandoval, presidenta del comité ambiental de Llollinco.
Infracciones que pesan
De manera preliminar se cruzaron los datos aportados por la Universidad de Concepción con la formulación de cargos que realizó la Superintendencia de Medio Ambiente, la cual indicó que los monitoreos de aguas subterráneas tendría elevados indicadores de metales pesados, que sobrepasan la norma. La conjetura a la que llegaron los vecinos, fue que dichas aguas pudieron llegar a los pozos de los vecinos, a través de las napas, y estas fueron utilizadas para alimentan a sus animales y de esta manera se produjo, en una primera instancia la contaminación.