Educación: la gran ganadora tras aprobación de recursos del Gore
ÑUBLE. Liceo Polivalente de San Nicolás recibió $4.411 millones, más de la mitad del total asignado a los proyectos por los consejeros regionales que le dieron el visto bueno.
Una amplia cartera de iniciativas aprobadas, que contempló mejoras de caminos, construcción de ciclovías, un ambicioso proyecto para implementar un moderno centro cívico en Chillán, fueron las más destacadas. No obstante, fue la educación la que recibió casi $4.500 millones, más de la mitad de los recursos que visaron los consejeros regionales en la sesión de este pasado miércoles realizada en la provincia.
Sin duda, el gran ganador tras la votación realizada en Ránquil fue el Liceo Polivalente de San Nicolás. El establecimiento educacional, que viene destacando hace años por sus excelentes resultados académicos, necesitaba disponer de instalaciones que permitieran acoger de buena manera a sus casi 1.400 alumnos.
La normalización del proyecto del recinto educativo por $4.411 millones traerá consigo la mejora de la infraestructura existente, con sus respectivos cambios de piso y cielo, más la construcción de 2.770 metros cuadrados, destacando la instalación en dicha superficie de un gimnasio, el incremento de 16 nuevas aulas, y la construcción de un comedor, que permitirá dar alimentación a 500 estudiantes, que actualmente no la reciben por falta de espacio.
"Estamos muy satisfechos con la aprobación hecha en el Gobierno Regional, pues es un importante espaldarazo al trabajo realizado y sin duda esto nos ayudará a seguir siendo uno de los referentes educacionales de la nueva región de Ñuble", destacó Víctor Reyes, director del recinto educativo.
Se espera que tras los trámites administrativos, el que incluye el visto bueno por parte de la Contraloría, se esté llamando a licitación en octubre. "Una vez adjudicado el proyecto, el plazo de edificación es de 18 meses. "Esperamos que se establezca un plan ordenado para realizar los trabajos con tal de no afectar el proceso de enseñanza-aprendizaje de los alumnos", finalizó Víctor Reyes.
Una visión de futuro
Pese a haber sido visado en marzo del 2016, recién en la última sesión del Gore en Ránquil se firmó el convenio de traspaso de fondos por $2.089 millones para la normalización del liceo Nibaldo Sepúlveda de Portezuelo.
La iniciativa que busca dotar de los espacios adecuados para los cerca de 400 alumnos, implica al igual que en el caso de San Nicolás, sumar a la infraestructura existente nuevas dependencias, como multicancha techada, laboratorio de ciencias, biblioteca y nuevas salas. "Esperamos poder albergar a 520 estudiantes tras la nueva construcción", sentenció el alcalde de Portezuelo, René Schuffeneger, quien agregó que espera estar comenzando los trabajos a finales de año.
Uno de los puntos que preocupa a la autoridad comunal tiene que ver con el traslado que deberán hacer del alumnado mientras se ejecuten las obras. "Será complicado efectuar los trabajos con los niños en el establecimiento, por lo que tendremos que ver alternativas para que sigan sus clases, considerando que como mínimo demoraría un año en estar terminado", sentenció Schuffeneger.
Otra de las iniciativas que recibió la aprobación fue la habilitación de la enseñanza media para la Escuela El Porvenir de Cato, en Coihueco.
"Son $76 millones para realizar el diseño, y buscamos que los alumnos del sector norte de la comuna prosigan sus estudios, ya que un 30% de los que terminan la enseñanza básica, desertan", cerró Rafael Contreras, director del Daem de Coihueco.
Lento avance en Yungay
Uno de los proyectos emblemáticos de reconstrucción de establecimientos educacionales es liceo A 17 de Yungay, que a siete años del terremoto aún mantiene en containers a sus alumnos. "Actualmente estamos a la espera de presentar una parte del proyecto arquitectónico, tras lo cual debe ser evaluado por el Ministerio de Desarrollo Social, y tras esto podríamos pasar al diseño, que implica recursos por $95 millones, lo que esperamos se pueda concretar durante el mes de julio", explicó con un dejo de esperanza Nelson Burgos, director de la Secretaría de Planificación de Yungay.