Con 19 bolsas contenedoras de clorhidrato de cocaína en su poder fue sorprendido un sujeto de 33 años, quien fue detenido por la sección OS7 de Carabineros, quienes lo investigaron y dieron por acreditado que vendía la sustancia ilícita a clientes del Pub Suecia, ubicado en pleno centro de Chillán.

De hecho, los agentes del OS7 estuvieron investigándolo por un mes y medio, y aprovechando que visten de civil, entraron varias veces al bar hasta establecer, la tarde del día jueves, que el hombre de iniciales A.C.S.V. era quien proveía de droga a clientes del mismo local.

"Fue una investigación no exenta de complejidad, ya que era difícil discriminar de acuerdo a todos los clientes que concurrían al local nocturno, cuáles eran los que efectivamente adquirían droga, ya que además de la información que se mantenía, se especificaba que la comercialización y el consumo se hacía en el interior de los baños del recinto", declaró el capitán Juan Guzmán, jefe de la Sección OS7 Chillán, quien precisó que fue justamente en el sanitario donde se detuvo al sujeto.

El imputado pasó a control de detención en el tribunal de Garantía de Chillán, donde se le formalizó por tráfico en pequeñas cantidades de droga. Tras la audiencia, quedó en libertad, aunque sujeto a las medidas cautelares de firma mensual y arraigo nacional durante el periodo de investigación.

Carlos ávila responde

El dueño del Pub Suecia es el cantante de la nueva ola Carlos Ávila, quien dijo estar sorprendido con la detención de un traficante.

"Hemos detectado a personas fumando marihuana y de inmediato le impedimos que entren nuevamente; si hubiéramos sabido del consumo de cocaína lo habríamos denunciado inmediatamente", señaló Ávila, asegurando que "nadie en el local sabía de esto".

Entre las 20.53 y 21.06 horas del día viernes, el cajero del automático del Banco BCI, ubicado en la esquina de calle Arauco con Avenida Libertad, estuvo intervenido por un clonador de tarjetas, instalado por una banda que fue neutralizada por Carabineros, toda vez que se detuvo a uno de los involucrados.

Se trata de Víctor Correa Retamal, de 25 años, quien en buscadores de internet se logra ubicar fácilmente por estar asociado a otro caso de clonación de tarjetas. De hecho, fue detenido en características muy similares el 18 de abril de 2016 en Temuco; sin embargo, porque el delito de uso fraudulento de tarjetas de crédito y débito tiene una baja penalidad, recuperó su libertad.

El procedimiento de captura estuvo a cargo del teniente Nicolás Olea, jefe de la Sección de Investigación Policial de la Segunda Comisaría de Chillán, quienes en medio de un patrullaje por el centro de la ciudad fueron alertados por un oficial del departamento OS9 de Santiago, que derivaba el aviso del personal de BCI encargado del monitoreo de las cámaras de los cajeros automáticos.

Gracias a la rápida coordinación de Carabineros y su pronta presencia en el cajero antes mencionado, los efectivos policiales supieron las características de los tres sujetos que ingresaron a las 20.53 horas.

Sin embargo, a la sucursal donde está el dispensador de dinero sólo volvió Víctor Correa Riquelme, con el objetivo de cersiorarse que la cámara y el clonador, llamado también "skimmer", había quedado instalado correctamente; de hecho, en ese proceso manchó su mano izquierda con pegamento, lo que sumado a un tatuaje en su cuello fueron antecedentes que permitieron identificarlo y detenerlo en flagrancia.

Formalización

Víctor Correa pasó a control de detención ayer en la mañana, en el tribunal de Garantía de Chillán, instancia en la que el fiscal Álex Montesinos le imputó el delito de uso fraudulento de tarjeta de crédito y débito en grado frustrado. Además, solicitó su prisión preventiva, lo cual fue acogido por el juez Luis Aedo.

"La prisión preventiva se justificó desde el Ministerio Público invocando la seguridad de la sociedad, peligro de reiteración criminal y además peligro de fuga", señaló el fiscal Montesinos.

"El imputado aparentemente, según se ha establecido de manera preliminar en la investigación, forma parte de una banda, lo que nos lleva a pensar que atrás existe una organización criminal organizada dedicada al robo de datos de tarjetas de crédito y débito a través de la instalación de estos skimmer y micro cámara, captando las claves secretas", detalló el abogado persecutor, quien manifestó que se instruyeron diligencias a la PDI, en Santiago, para que verifique si hubo usuarios afectados durante los minutos en que estuvo instalado el skimmer.

Respecto al prontuario penal de Víctor Correa, el fiscal señaló que "registra condena por tráfico de drogas y porte ilegal de arma de fuego, por lo que no tendrá posibilidad de pena sustitutiva. Además, el hecho de que no tenga arraigo con esta ciudad lleva a pensar que hay un peligro de fuga".

El tribunal dio un plazo de investigación de cuatro meses, para pericias y capturar a los otros dos involucrados.