Una polémica se conoció tras la adjudicación del diseño y construcción del hospital de Ñuble. Fue el jefe de títulos y grados de la Universidad de Santiago, José Huenuqueo, el encargado de revelar que el profesional que la empresa Inso Chile postuló como ingeniero civil para la etapa de ejecución del proyecto, tenía solo un título de técnico universitario en riego.
La consulta, que fue hecha por un tercero, incluía la aclaración de los números de rol que aparecen en los certificados que presentó como ingeniero civil en obras civiles y constructor civil, que pertenecen a otras personas con otras carreras, mismos títulos que adjuntó en la postulación de la empresa italiana.
"Todos los documentos son revisados tanto por los organismos públicos que licitamos como por Contraloría. Sin embargo, existe en nuestra legislación el principio de buena fe, por lo que dudar de un título profesional, que tiene toda la apariencia de legalidad, y de una persona que cuenta con amplia experiencia en el sector público es totalmente excepcional y fuera de esa regla general", precisó la directora (s) del Servicio de Salud Ñuble, Jannet Viveros.
Extenso curriculum
Raya para la suma es que en el curriculum que entregó el falso ingeniero, quien estaría a cargo del plan de aseguramiento de la calidad de la construcción del hospital de Ñuble, enumeraba a lo menos siete obras nacionales de salud, entre ellas la construcción del hospital regional de Rancagua, la normalización del hospital de Pitrufquén y la construcción del hospital regional de Talca, en las que habría figurado.
A los anteriores proyectos, en los que se desempeñó como profesional residente o administrador de obras, se suma además la conservación del edificio del Tricel, la inspección técnica en la cárcel El Manzano y la construcción del edificio de la Compañía de Teléfonos de Chile. Con el extenso compendio de obras en las que trabajó, el "ingeniero" cumplía de sobra las exigencias que se pedían en las bases, como lo era la experiencia profesional, punto que el SSÑ objetó al resto de los oferentes y que los dejó fuera de la licitación.
"En cuanto tomamos conocimiento de esta información, como institución realizamos todo lo que nos correspondía hacer; nos reunimos con la empresa para pedirles que sustituyera al profesional en cuestión y, a su vez, junto al Ministerio de Salud, presentamos los antecedentes a la Fiscalía ya que creemos que este hecho configura un delito", confirmó Jannet Viveros.
Según el SSÑ, no existe inconveniente en cambiar a un profesional, ya que las bases administrativas así lo establecen, pero en este caso la diferencia es que, si se hubiese detectado antes al falso profesional, Inso Chile también estaría fuera de bases al igual que las otras empresas, habiendo quedado desierto el segundo llamado a licitación.
"La situación señalada no afecta el curso del proyecto, pues el proceso de licitación culminó, éste fue tomado de razón por Contraloría y el contrato con la empresa adjudicada ya está firmado. Por ello, seguimos trabajando en el diseño del Nuevo Hospital de Ñuble", recalcó Jannet Viveros.
En tanto, desde Inso Chile se confirmó que al igual que el SSÑ, se interpuso una denuncia ante la fiscalía.
Credibilidad del proceso en duda
En tanto, el senador Víctor Pérez aseguró que con este antecedente se comprueba una falta de rigurosidad en el proceso, ya que se reconoció que había un profesional falso. "Esto abre una duda muy razonable sobre la naturaleza del proceso y espero que esto no sea una causal para retroceder en la licitación, pero no hay duda que quienes compitieron con la empresa tienen el legítimo derecho de expresar su preocupación y hacer valer sus intereses, porque no hay duda que la falsificación de títulos profesionales pone en duda toda la credibilidad del proceso".