Este fin de semana se conoció la lamentable noticia de un joven de 19 años que falleció tras sufrir un accidente de tránsito en su scooter en el camino que une San Carlos con San Fabián. Su familia hizo efectiva su petición en vida, ser donante, decisión que beneficiará a siete personas que podrán tener una vida mejor gracias a esta procuración.
Con este caso, son siete las procuraciones que se han hecho durante el presente año en la capital de Ñuble, liderando a nivel nacional este proceso, que es noticia cada vez que se da a conocer, situación que no debiera ser así. ¿Cómo es esto? La idea es que la cifra que sólo un 10% de las donaciones de órganos se puede materializar por la aprobación de los familiares, cambie, y que tengamos ese 10% en personas que no son donantes, y cada semana o mes las procuraciones sean pan de cada día.
Nos resta mucho por aprender sobre el aprecio al prójimo y sobre nuestra visión de la vida. Resulta paradójico que apreciemos más un cuerpo inerte que la vida, que valoremos más un órgano que proyectar la felicidad de otros que aún tienen una oportunidad.
Y lo más frustrante es que muchas de estas personas que fallecen tienen toda la disposición de hacerlo en vida, pero finalmente sus parientes terminan por abortar su anhelo, ya sea por falta de información, temores infundados o por el dolor de la partida que les impide tomar decisiones más objetivas.
En el año 2010 se modificó la ley de trasplantes a través de la ley 20.413, que incorporó un cambio fundamental: el concepto de "donante universal", considerando que toda persona mayor de 18 años será considerada donante de órganos una vez fallecida a menos de que haya manifestado su voluntad de no serlo.
Aun así la mayoría de las familias se resiste a la donación restando a otras personas poder prolongar su vida. Será necesario un profundo trabajo de concientización para educar sobre el valor de la donación, que es un acto de amor que supera muchas otras acciones que ocurren en nuestra vida, y donde ponemos en su justo lugar el valor que tiene un órgano frente a la vida.