Crónica Chillán
Autoridades comunales y regionales, acompañadas por gerentes de Celulosa Arauco; visitaron a un grupo de agricultores de Quillón que hace dos años fueron beneficiados 17 invernaderos circulares para apoyar la producción de sus hortalizas. Y de hecho, la evidencia saltó a la vista, ya que una gran variedad de lechugas, ajíes y morrones recibió a los visitantes, quienes se mostraron conformes con los beneficios que reportó la ayuda entregada.
"Quiero agradecer a Arauco que tuvo la excelente política de apoyar a la agricultura familiar campesina, entregando toda la estructura para estos tremendos invernaderos. Lo bueno es que estamos viendo cómo funcionan, nuestra gente está trabajando esto, le está sacando provecho, lo que es fantástico. Esto le ayuda mucho a los productores, quienes pueden aportar importantes recursos financieros a sus familias e ir armando nichos de negocio beneficiosos para la comuna incluso", indicó el alcalde Alberto Gyhra.
Este es el segundo año de producción que realizan los productores quilloninos bajo los invernaderos. Ellos destacan que ha sido una ayuda muy importante que les ha permitido mejorar sus cosechas y la calidad de los productos. Además, han podido continuar la producción de hortalizas que por clima no se pueden producir en invierno, al aire libre, en el Valle del Sol.
"Ya hemos tenido dos temporadas de producción, donde han habido resultados buenos en invierno, que es cuando tenemos la brecha de estacionalidad y gracias a este gran aporte de Celulosa Arauco y la Municipalidad, se han ido acortando. Con estos invernaderos hemos podido ir diversificando los cultivos e incluso hemos logrado plantar tomates, lo que comúnmente no se puede hacer en invernaderos como estos", contó Lilian Muñoz, agricultora beneficiada.
Producción mejorada y duplicada
Por su delicadeza, son las verduras de hoja las más beneficiadas con la instalación de las estructuras. Aún así, la idea es seguir mejorando la producción de todo lo que comúnmente se planta a la intemperie, ya que en una temporada de cultivo normal, se siembra en marzo y se cosecha en junio, produciéndose un vacío productivo hasta octubre, cuando comienza una nueva temporada de siembra.
Sin embargo, con las estructuras de 20 metros de largo por 7.40 de ancho, la estacionalidad sólo depende de cuánto tiempo se deje descansar el terreno que se está utilizado.
"Hemos estado implementando estas alianzas público- privadas con las distintas municipalidades de las comunas, en cuyos alrededores estamos instalados como empresa y en el caso de Quillón ya tenemos cerca de un año trabajando", aseguró Pamela Villagra, jefa de Relaciones Comunitarias y Asuntos Públicos de Empresas Arauco.
Villagra precisó además que en este caso específico de Quillón, "se aplicó un proyecto donde ciertas estructuras de la empresa, que estaban en desuso, fueron aportadas como invernaderos, como petición de algunos trabajadores de nuestra empresa. Vemos que esto ha tenido un excelente uso y ha generado muchos beneficios para quienes los utilizan. Esto es parte del valor compartido que estamos creando como empresa, hoy en día, sumar y crecer en conjunto con nuestros vecinos", indicó.
Los expertos han visto con mucho optimismo la nueva adquisición, puesto que ha permitido a los agricultores duplicar la cosecha de sus hortalizas con el aumento en la duración de las temporadas productivas. Cabe destacar que la techumbre plástica que cubre las estructuras puede ser removida en temporada de verano para evitar el intenso calor y seguir manteniendo productos sanos, frescos y de muy buena calidad.
invernaderos donados por la empresa Arauco han ayudado a potenciar la producción agrícola en la comuna. 17