La Región de Ñuble absorberá todos los proyectos que se encuentran "estancados" y sin evaluación hasta la fecha en el Gobierno Regional del Bío Bío, algo que los alcaldes de las distintas comunas de la actual provincia ya vislumbraban ante la lentitud en la tramitación de sus iniciativas de inversión desde Concepción, ad portas de la puesta en marcha de la división regional y administrativa con el Bío Bío.
Frente a ese escenario, el delegado presidencial de Ñuble, Martín Arrau, realizó un llamado a la calma a los jefes comunales, al anunciar gestiones para la incorporación de una Unidad Evaluadora, que podría contar hasta con ocho profesionales -una cifra muy por sobre lo que existe en otras regiones del país- con la finalidad de dar una rápida respuesta a las evaluaciones sociales de la carpeta de proyectos que hayan presentado o vayan a presentar desde los 21 municipios de Ñuble. De esta manera, a juicio del delegado, se asegurará una ejecución rápida y efectiva de los recursos del Fondo Regional de Desarrollo Regional (FNDR) que se incorporen por primera vez en 2019 a Ñuble.
Cabe recordar que en la actualidad son 160 los proyectos que están a la espera de ser evaluados por el Gobierno Regional del Bío Bío o de la firma de los convenios de programación, y que en definitiva se traspasarán al Gore de Ñuble para su financiamiento.
La gran duda hasta el momento sigue siendo a cuánto ascenderá el monto que la Dirección de Presupuestos asignará por concepto de FNDR a la Región de Ñuble para su primer año de operación. Cabe recordar que el delegado Martín Arrau ha defendido la posibilidad de llegar a $60 mil millones, tomando en consideración que existen proyectos de arrastre por cerca de $25 mil millones, que se repartirían entre los presupuestos de Ñuble y la Región del Bío Bío, que está solicitando $141 mil millones.
Si bien a juicio de los alcaldes y parlamentarios del nuevo territorio la cifra es escasa, en la lógica de distribución que imperaba hasta antes de la división, Ñuble no obtenía más allá del 23% de los fondos regionales del Bío Bío, por lo que el monto solicitado supera y rompe con esa lógica centralista que fue tan criticada y dio pie al anhelo de la nueva región. En conclusión, la Delegación Presidencial ha obtenido un importante avance con la factibilidad de reforzar la Unidad Evaluadora y así facilitar la tarea que deberá ejercer el Consejo Regional para privilegiar aquellas obras que vayan en concordancia con la Estrategia de Desarrollo Regional, que durante 2019 debiese quedar definida para su análisis y aprobación.