"En la Región de Ñuble hay 28 Eleam autorizados para funcionar, y otros siete sin autorización"
Marta Bravo, — Delegada ministerial de Salud.
"En un plazo récord ya tenemos todas las gobernaciones instaladas"
Paola Becker, — Gobernadora de Ñuble.
El mes de agosto es considerado uno de los más complejos en materia de salud para los adultos mayores, y es por ello que particularmente este grupo etáreo celebra con mayor alegría los primeros brotes del mes de septiembre, previo al inicio de la primavera. Pero la realidad que viven las personas de la tercera edad en nuestro país es mucho más compleja y dura como para acotarla simplemente a las dificultades propias de la edad, enfermedades o a las carencias económicas. Un aspecto poco tratado es el abandono en el cual muchos subsisten.
Según un reciente estudio elaborado por la Universidad del Desarrollo y la Caja de Compensación Los Héroes, el 16,1% de los adultos mayores residentes en áreas rurales vive solo, mientras que en zonas urbanas es el 14%; en este último caso hablamos de una cantidad cercana a las 410 mil personas quienes según el último Censo de población 2017 aseguran vivir en hogares unipersonales.
En el caso de nuestra Región de Ñuble, el 13,5% de la población corresponden a mayores de 65 años, es decir, 65.116 personas.
El problema se agrava cuando por razones familiares o de enfermedad estas personas son internadas en Establecimientos de Larga Estadía para Adultos Mayores (Eleam). De acuerdo a un catastro del Servicio Nacional del Adulto Mayor, al 2012, en Chile 12.632 personas mayores en situación de dependencia física, psíquica y postración residían en estos Eleam, que en la Región de Ñuble registran 28 establecimientos formales y otros 7 informales.
Estos recintos se rigen por el Decreto Supremo N°14 del Ministerio de Salud y son fiscalizados de manera permanente por la autoridad sanitaria. Sin embargo, ello no obsta a que cada cierto tiempo se conocen denuncias por el mal estado en que muchos de sus abuelos y abuelas conviven a diario. Sólo entre 2017 a la fecha, la Seremi de Salud ha cursado en Ñuble seis sumarios sanitarios, al presentar falencias tanto de seguridad como de condiciones poco idóneas para mantener a personas a su cuidado.
Todo lo anterior nos produce un sentimiento de mayor recogimiento ante la tragedia ocurrida este martes en la casa de reposo "Santa Marta" de Chiguayante, donde un incendio provocó la muerte de 10 de las 42 mujeres que permanecían allí a su resguardo. Tal realidad, sumado a los recientes datos divulgados por el estudio de la UDD, deben llamarnos a una profunda reflexión como sociedad y preguntarnos si estamos realmente protegiendo y dando calidad de vida a quienes entregaron sus vidas y esfuerzo por formar familias y aportar con su trabajo al país.
Como a la mayoría de los hombres, me encantan las mujeres. Las respeto, las cuido, las quiero, no dudo de su capacidad y, obviamente, entiendo que juegan un rol fundamental en una vida buena y feliz. Sé que han sido postergadas en muchas cosas (acceso a empleos, remuneraciones, igualdad ante la ley, etcétera). Pero últimamente, con esto del feminismo se les está pasando la mano. Una prueba de ello es que a un sector le dio por incursionar en lo musical y se dedicó a encontrar contenidos "machistas" (término que se convirtió casi en un insulto) en canciones que todo el mundo conoce.
Creo que se está creando una situación injusta para los varones. Por razones generacionales, conozco muchos boleros de antes. La mayoría rinde culto a la mujer que se fue, que nos dejó, a la cual no olvidaremos y materias similares. Sin embargo, hay otras que corren el riesgo de ser acusadas de ofender a las mujeres. Una hermosa canción cubana, "Dos gardenias", señala: "Más si en un atardecer/las gardenias de mi amor se mueren/ es porque han adivinado que tu amor me ha traicionado porque existe otro querer". Su autora, Isolina Carrillo, fallecida hace muchos años, no imaginó que, en los tiempos actuales, podrían acusar a su canción de tratar a las mujeres de traidoras o infieles.
Suma y sigue. "Señora", otro recordado "hit" (antes no se usaba ese término), proclamaba: "Señora, te llaman señora/ todos te respetan/ sin saber la verdad". Estoy seguro de que, por ahí, surgirá un grupo denunciando que ofende gravemente a las mujeres y atenta contra su dignidad. Lo mismo sucede con un boleto que cantaba también Bienvenido Granda: "Tu precio/ creo haberlo pagado". Ni qué decir que pueden aparecer las que insinúan prostitución y no respetan a lo que antes se llamaba "el sexo opuesto", aunque nadie sabe a qué se oponían. Y no quiero ni mencionar un bolero que cantó hasta Olga Guillot, el cual advertía: "Cría cuervos y verás cómo te comen los ojos".
Sé que algo similar está sucediendo con canciones modernas, cuyos intérpretes incluso se niegan a cantarlas, a fin de no enfrentar el rechazo femenino. Esto ocurre hasta con el reggaetón. En cambio, las feministas exageradas guardan discreto silencio con hermosos temas que les rinden tributo: "No existe un momento en el día/ en que pueda olvidarme de ti/ el mundo parece distinto/ cuando no estás junto a mí", "El día que me quieras/ la rosa que engalana/se vestirá de fiesta, con su mejor color".
Para resumir, éste es un buen momento para recuperar la cordura y la temperancia. La mujer merece y merecerá siempre el mayor respeto. Las buenas canciones, antiguas o modernas, son eso y nada más. Sin segundas intenciones. Nota: el autor de esta columna lleva 47 años casado con la misma señora y tiene una nieta.
Raúl Rojas, Periodista, Académico, Escritor.
Hasta la Intendencia del Bío Bío al llegó el alcalde de San Nicolás, Víctor Toro, para reunirse con el intendente, Rodrigo Díaz, el diputado Jorge Sabag y los seremis de Desarrollo Social y Educación, para abordar la compleja realidad de la escuela Sergio Martín, tras el incendio que destruyó el 50% de sus instalaciones.
Ayer volvió a Chillán para conversar con el abogado que lo representará judicialmente, Cristian, de 28 años, quien relató su traumática experiencia como chofer de Uber, lo que le significó haber sufrido una encerrona por parte de a lo menos diez taxistas la madrugada del sábado. Después de este episodio, concurrió a Carabineros.
Antes que termine agosto, la chillanvejana Sylvia Bocaz volverá a depositar sus cartas en las oficinas de Correos de Chile, tal como lo hacía hasta 1995, fecha en que cerró su sucursal en la comuna. La oficina, que estará ubicada en calle Ángel Parra con Juan Martínez de Rozas, está siendo intervenida en los últimos detalles.