Todo un caballero, hijo de esta zona y servidor por muchos años de su círculo asociado a la actividad bancaria y particularmente en su caso, el Banco Chile, del cual era feliz pensionado.
Lo que ocurrió en la noche del último viernes 14, fue un hecho tan impensado como sorprendente y lamentable. Un imprevisto infarto puso fin a su vida. Pese a la recuperación a que fue sometido por médicos y enfermeros la reanimación no funcionó, para pena y dolor de su familia y sus amigos. Un desenlace de este modo, siempre será muy duro aceptarlo. Estamos acostumbrados a la propia enfermedad, que funciona como aviso previo ante una emergencia como ésta. Su familia integrada por su esposa Alina Rodríguez Dávila y sus hijos María Jacqueline, Paz Eugenia, Mónica y Sergio Le Bert Rodríguez.
Don Sergio era socio activo de la Red Comunicacional del Adulto Mayor, del cual ha sido activo integrante y miembro de su directorio, que en el momento actual preside la señora Mónica Peña. Han fallecido los dos socios más antiguos, a quienes recordamos como fundadores de esta institución que en la actualidad mantiene buenas relaciones con organizaciones superiores, inclusive con la CEPAL, que ha permitido asistir a convenciones internacionales, como ya ocurrió en Costa rica, cuando el primer presidente Benedicto Gutiérrez a quien igualmente tanto recordamos.
Nos ocurrió lo mismo con don Sergio, por múltiples razones, por su calidad como persona, que se caracterizaba por su carácter, siempre alegre y positivo. Sus afanes para que la Red se mantuviera como un faro importante para los adultos mayores. Con su impulso conseguimos un gran esfuerzo, que nos ha llegado desde diferentes lados, como ha ocurrido recientemente en que tuvimos como Red Comunicacional; abandonar el local que ocupábamos y devolverlo para que la Gobernación se lo entregara a una de las nuevas oficina que operará con la autoridad de la intendencia. Nos hará falta don Sergio, que para estas ideas, siempre el suyo era un consejo valioso.
Nuestro compromiso como Red se fortaleció mientras nos acompañó. Recordaremos con nostalgia la vida de este amigo, a quien nos sumamos el gran número de personas que acudió a su velatorio en el Santuario de Schoenstatt de Chillán viejo y al cementerio Municipal de Chillán en su sepultación el último viernes 15. Para su familia y amigos, un gran recuerdo y una gran resignación, con mucho afecto, porque él supo ganarlo mientras vivió junto a nosotros.
Por Carlos René Ibacache I. Miembro Correspondiente
por Chillán de la Academia Chilena de la Lengua.