Locales de comida rápida cerrados esperan abrir el lunes
FISCALIZACIÓN. En los comercios trabajan para solucionar las irregularidades detectadas por la Seremi de Salud.
Desde tempranas horas de ayer en los puestos "Oba-Oba", "Samoa", "TocompleJil" y otro sin identificación, ubicados en la esquina de Maipón con 5 de Abril, iniciaron los trabajos y adaptaciones exigidas por la Seremi de Salud para el expendio de alimentos, luego de que el viernes funcionarios de la Unidad de Seguridad Alimentaria comprobaran serias deficiencias de higiene, refrigeración y conservación de alimentos, entre otras irregularidades.
Para algunos de los locatarios sancionados, la medida ejecutada por la autoridad fue precipitada. "La Seremi tenía que haber avisado y dar unos días y si al volver las cosas no están hechas, ahí proceder y no decir 'cierren no más'. La seremi fue muy brusca", explicó el propietario de uno de los establecimientos que prefirió no identificarse.
En relación a la presencia de baratas en las instalaciones, el locatario manifestó que "cualquier local de aquí tiene bichos, tendríamos que quemar todos los puestos para que se acaben. Voy a contactar a un fumigador para hacer un tratamiento de 10 sesiones", agregó.
Entre los trabajos que efectúan están el recambio de piso y la instalación de losas.
Sobre el tema, el cajero de la Tostaduría Saldaña opinó que "el cierre de un puesto no se lo deseamos a nadie, porque uno como vendedor tiene compromisos pero la salud de las personas es importante. Por eso no vendo alimentos elaborados ni delicados", aseveró.
Mientras que los dueños de los puestos consideran que la medida tomada por la seremi Marta Bravo les genera pérdidas, otros comerciantes apoyan las fiscalizaciones.
"Estoy de acuerdo con las fiscalizaciones, son un proceso normal porque todas las cosas deben hacerse de acuerdo a las reglas en cuanto a la preparación de alimentos", indicó Fernando Cifuentes, propietario de El Puntillano.
Resaltó la importancia de mantener la limpieza al momento de preparar las comidas que se ofrecen al consumidor.
"Tengo mis maquinarias de acero inoxidable y eso no permite que agarre suciedad, entonces nada tiene por qué estar sucio. Nunca he tenido problemas con las autoridades, siempre mantengo la higiene", dijo, al tiempo que resaltaba que "a mucha gente no le interesa la calidad, lo que les interesa es echarle algo al estómago y chao".
Desde el Mercado Municipal respaldaron los procedimientos dedicados al buen servicio del comercio. "Frente a este tipo de procedimientos, es de total acatamiento a la norma e institucionalidad vigente. En este sentido, el Municipio siempre se ha valido del mecanismo existente y mandatado por la ley para asegurar el buen funcionamiento de los establecimientos ubicados en el Mercado Municipal y la Plaza Sargento Aldea".