"Las empresas tienen una mala impresión de la Municipalidad respecto a las bases de licitación"
Camilo Benavente, — Concejal de Chillán.
"Estamos viendo la posibilidad de establecer la granja China en Chile, pero que esté en Ñuble"
Jorge Valenzuela, presidente de la Federación de Productores de Fruta.
Luego de un intenso trabajo, de los vecinos y la agrupación cultural del sector, golpeando puertas de las autoridades, consejeros regionales, diputados y senadores, se unieron al movimiento logrando que el Consejo de Monumentos Nacionales escuchara la necesidad de proteger al viaducto ante el informe que aconseja derribarlo.
Centro Oncológico de Ñuble 'Yasna Godoy Vergara'. Ese es el nombre en común que autoridades plantearon como un homenaje a la joven de 18 años que falleció a causa de un cáncer renal. Con el sonido de las campanas, un millar de personas despidieron a 'Yasnita',desde el frontis de la Catedral de Chillán hasta su última morada.
El fundo San Luis, ubicado en el sector El Cardal, a casi 5 kilómetros al oriente del radio urbano de Yungay, se transformó ayer en el escenario de uno de los crímenes más escabrosos que los vecinos recuerden en los últimos diez años, luego de ser hallados dos cuerpos heridos en la cabeza, presuntamente con un hacha.
El tema parece simpático para comentarlo en tiempos de tanta tensión: la moda de agregar el sufijo ía a numerosas actividades comerciales de hoy. A través de muchos años, supimos de las "chancherías", que evolucionaron a rotiserías; de fierrerías, que se transformaron en ferreterías; de librerías que se transformaron en ferias del libro. La venta de muebles dio paso a la mueblería. ¿Para qué hablar de la carnicería? Y hay numerosos ejemplos más.
La modernidad significó la llegada de nuevos términos, de ninguna manera originales. Así, hoy se habla sin tapujos, de la whiskería, la churrasquería, la tetería, la cafetería, la pisquería, la sanguchería, la churrería, etcétera. Es más, alguien tuvo el valor de crear un sitio web denominado "la siutiquería". Porque de eso se trata: de nuestra vocación de siúticos, de aparentar lo que no somos, de estar siempre de moda, en la avanzada. Creemos que usar inventar palabras nos hace mejores. Claro, es más elegante tomar un shop en una cervecería que en un depósito de cerveza. Y más fino todavía, consumir un churro de una churrería que en un negocio de churros.
Son modas y parecemos condenados a vivir bajo su imperio. En la década de los 80´, todo el mundo "descubrió" que el sustantivo biblioteca restringía el asunto sólo a los libros. Entonces, se comenzó a hablar de la discoteca, la enoteca. Y por ahí hasta surgió un audaz que abrió una viejoteca, obviamente apuntada a los que pasaron los 40 años. A los centros de diversión se sumaron, en los dos últimos decenios, las salsotecas.
El fenómeno es gracioso. No amenaza el bolsillo ni la salud física o mental de los chilenos, así que no hay que preocuparse. Esta columna sólo quiere plantear qué ocurrirá cuando se extienda a regiones. ¿Se imagina que en Chillán o San Carlos comencemos a hablar de la "longanicería" o de la arrolladoteca? ¿Por qué no puede existir una parrilladoteca? También está la posibilidad de que en los mercados se instalen "cazuelerías". En un homenaje al pasado, podrían aparecer la "sustancierías", para identificar uno de los productos que siempre fue característico de la región.
La Real Academia Española, que "pule, brilla y da esplendor", afirma siempre estar atenta a la evolución del lenguaje y termina por aceptar neologismos y hasta algunas palabras que hasta ayer eran vulgares y hoy aparecen como de uso común. Pero deberá estar muy activa para sumar términos como "pizzería", "hamburguesería", "completería", "papafritasería" y otros que están emergiendo o pueden emerger.
Si el director de Crónica Chillán acepta el término, sus colaboradores en el futuro no escribiremos columnas, sino que practicaremos la "columnería.
Raúl Rojas, Periodista, Académico y Escritor.
Si bien en los últimos meses del presente año los casos de robo y faenamiento clandestino de animales, también conocido como abigeato, han ido en aumento en relación con el mismo periodo del 2017, el trabajo coordinado que han iniciado distintas instituciones vinculadas al tema de la seguridad pública ha permitido ir conociendo con más detalle el modo como verdaderas bandas organizadas operan frente a este lucrativo, pero al mismo tiempo dañino ilícito.
Para combatir estos hechos, que tienden a recrudecerse a partir del mes de septiembre de cada año, con motivo del incremento en el consumo de carnes, Carabineros especializó una Sección de Investigación Policial (SIP) en abigeato exclusivamente para Ñuble, y los antecedentes que ha recogido han sido de gran valor para los próximos pasos a seguir. La unidad policial ha logrado establecer que no son más de tres las bandas -con un total de 12 individuos- las que operan en el territorio, y sus integrantes están identificados. Sin embargo, la ley es rigurosa en exigir medios de prueba verdaderamente claros para poder imputar estos delitos, y es aquí donde el trabajo multidisciplinario ha comenzado a tomar forma con miras a dar golpes efectivos contra los delincuentes de los campos.
Desde el Ministerio Público, la Fiscalía Regional de Ñuble designó de forma exclusiva al abogado Rolando Canahuate para coordinar una línea de investigación que permita cruzar datos de las denuncias realizadas por los afectados con las pruebas recabadas en terreno por los entes policiales, lo cual permitirá acotar el radio de acción de estas bandas, establecer su modus operandi y de esta manera coordinar operaciones cada vez más efectivas y contar con los elementos suficientes para que la persecución penal logre la finalidad de conseguir condenas para los responsables. Un dato que permite mirar con mayor optimismo el trabajo realizado este año tiene que ver con la mayor recuperación de animales, sumado al incremento en las cifras de detenidos y vehículos incautados.
Recientemente, la Intendencia Regional dispuso la creación de una Mesa de Abigeato, que incorpora al trabajo multidisciplinario a nuevos entes como el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) -encargado de controlar el transporte de ganado con la documentación exigida-, la PDI, Seremi de Salud y el gremio de agricultores y ganaderos. Una de las principales misiones de esta mesa será reducir la cifra negra de víctimas que no denuncian por desconfianza con el sistema, lo que permitirá focalizar mejor los recursos hacia las zonas más afectadas. Sin duda que con la colaboración mutua, el combate al abigeato cobrará más fuerza del lado de la justicia.