Alfareras dicen que chancadora afectaría la greda de Quinchamalí
EN RIESGO. El proyecto espera instalarse en 409 hectáreas, lo cual -dicen- acabaría con la materia prima de la alfarería.
De manera pacífica, representantes de 27 organizaciones proteccionistas del río Ñuble pidieron ser oídas, ante la posibilidad de que las empresas Arenex y HPP se instalen con unas chancadoras de áridos en Quinchamalí. Por ello, ayer realizaron una protesta con pancartas y greda en las afueras del Teatro Municipal de Chillán.
Dislen Vallejos, coordinadora de la Agrupación de Defensa del Entorno Ecológico y Patrimonial del sector poniente de Quinchamalí, explicó que las empresas Arenex y HPP (antigua Islamin) aspiran a instalar sus chancadoras de áridos en 409 hectáreas de Quinchamalí. "Cuando uno habla de 400 hectáreas en Quinchamalí, son como todo el centro de Chillán y más, además que eso traería la destrucción de la biodiversidad, del único camino que conecta a Chillán con la ruta a Confluencia y la destrucción del material del Patrimonio Inmaterial de las alfareras", afirmó.
Vallejos resaltó que "son proyectos absoletos, que tuvieron grandes problemáticas y que ahora se están presentando de nuevo. Eso implica enterrar vivo el patrimonio de las alfareras, quienes llevan más de 150 años sacando greda", manifestó preocupada.
Acción a la que se plegó Paola Castro, integrante de la Asociación de Defensa del Entorno Ecológico y Patrimonial del Sector Poniente de Quinchamalí, y vocera de las alfareras. "Sentimos que no estamos siendo escuchados por nuestras demandas. Nosotros desde un principio no fuimos informados, como comunidad, de este proyecto. El municipio no realizó una consulta ciudadana y por eso llegamos a estas instancias", dijo.
Castro rescató que se han realizado dos reuniones previas con las autoridades del Ministerio del Ambiente, donde se le representaron los diferentes daños que puede causar (el proyecto), "entre ellas dañar la greda", insistió.