Pasado mañana, domingo 10, los españoles vuelven a las urnas para tratar de destrabar la situación política que ha impedido formar un Gobierno estable en este país.
El pasado mes de abril se realizaron elecciones, las que dieron como resultado que hubo cuatro fuerzas políticas, dos de izquierda y dos de derecha, que recibieron significativa votación, pero insuficiente como para formar Gobierno. Entonces se abrió un período de negociaciones en busca de los pactos que lo posibilitaran.
La primera posibilidad era de la izquierda, porque el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) fue el más votado. Sin embargo, su aliado natural situado más a su izquierda, Juntas Podemos, no aceptó las propuestas y puso condiciones que el PSOE tampoco aceptó. Por el lado de la derecha, aunque se juntaran Partido Popular, Ciudadanos y el ultraderechista Vox, no les daba para obtener la mayoría necesaria.
Pedro Sánchez, líder socialista y actual Presidente en funciones del Gobierno, intentó conseguir que Ciudadanos o Partido Popular se abstuvieran en el Congreso, con lo cual la mayoría exigida para formar Gobierno se rebajaba. Pero ninguno lo aceptó, con lo cual se bloqueó el proceso democrático y se debió convocar a nuevas elecciones.
Se ha vivido en España un período extraño, con un Gobierno en funciones (provisorio) que ha debido aprobar presupuestos en forma parcial, con el fin de no dejar a los Gobiernos Autónomos (Regionales) sin recursos.
Y la campaña electoral -que finaliza hoy- ha sido sin precedentes, de apenas 8 días de duración. Ha habido un sólo debate en televisión con participación de los cinco líderes de partidos de alcance nacional y se han dicho de todo, se han acusado de todo. No ha habido diálogo.
Lo peor es que la prensa ha descubierto muchas mentiras en datos, cifras e informaciones proporcionadas por estos líderes. Todos. No se escapa ninguno del uso de las famosas "fake news" (noticias falsas).
A buen entendedor, pocas palabras: no hay acuerdo ni lo habrá después del proceso electoral…siempre y cuando estos líderes sean consecuentes con su nivel de agresividad y no lleguen a pactos post electorales.
La clave de todo será el nivel de abstención. En abril votó el 75%. Las encuestas coinciden en señalar que esta vez bajará. Esta encrucijada impide vaticinar resultados. Coinciden, eso si, en que el PSOE volverá a ganar, pero que va a necesitar apoyos para gobernar…lo cual, a esta altura de la falta de diálogo, se ve muy difícil de obtener.
Miguel Ángel San Martín Periodista.