El ejercicio ayuda a dejar el tabaco
Mabel González
Además de sus ya bien conocidos efectos en la salud física, el consumo de tabaco también tendría implicancias negativas en el estado anímico. Según un estudio divulgado esta semana, fumar desmotiva a las personas y las hace más inactivas o perezosas en su vida diaria.
Un equipo de investigadores de la Universidade Estadual de Londrina de Brasil encontró en ese estudio que los fumadores son menos propensos a estar activos físicamente -y sienten menos motivación para volverse activos físicamente- que las personas que no fuman.
Además, los consumidores de tabaco serían más propensos a sufrir padecimientos como depresión o ansiedad que aquellas personas que no fuman.
El estudio, publicado en la revista especializada "Respirology" y citado por el medio digital "Huffington Post", incluyó a 60 fumadores y 50 no fumadores.
Los participantes de la investigación usaron un podómetro por al menos 12 horas diarias durante seis días, con el fin de calcular cuánto caminaban.
"Además de presentar una peor función pulmonar, una capacidad de ejercitarse más baja, una peor calidad de vida y síntomas de ansiedad y depresión, las personas fumadoras también caminaron menos que los no fumadores en su vida diaria", explicó en un comunicado Karina Furlanetto, una de las autoras del informe.
"Cuando se testeó su capacidad para respirar profundo, su función pulmonar se observó reducida y esto impactó en su habilidad para ejercitarse", detalló la especialista brasileña respecto de los resultados de su trabajo.
Los investigadores subrayaron que se trata de una ironía, ya que ejercitarse puede ayudar a los fumadores a dejar el tabaco, debido a que el deporte disminuye las ansias por la nicotina, o al menos así lo indicó un reporte publicado por la revista "Addiction", en el que se revisaron varios trabajos científicos respecto de este tema.
Además, en el estudio del equipo brasileño, cuando a los voluntarios se les pidió calificar su calidad de vida en relación a la salud, los fumadores fueron más propensos que los no fumadores a manifestar que se sentían más cansados y desmotivados a hacer ejercicio, o a hacer un cambio en su estilo de vida actual.
"Según tenemos entendido, éste es el primer estudio que demuestra una reducción en el nivel de actividad física, medido objetivamente, en la vida diaria de los adultos fumadores en comparación con los no fumadores", aseveró la doctora Furlanetto en su declaración pública, consignada esta vez por la cadena CBS.
En un estudio reciente publicado en 2012 en la revista "Addiction Biology", científicos mostraron que los fumadores no duermen lo suficiente o les cuesta quedarse dormidos, en comparación con los no fumadores.
De acuerdo con ese informe científico, un 28,1% de los participantes que fumaban registraron una mala calidad del sueño, en comparación con el 19,1% e las personas que no fumaban.
Además, un 17% de los fumadores reportaron dormir seis horas o menos cada noche, en comparación con el 7% de los no fumadores.
"Pareciera que el tabaquismo es un factor de riesgo modificable conductualmente para la aparición de una calidad del sueño dañada y una duración del sueño disminuida", escribieron en ese entonces los autores de la indagación.
Según el Atlas del Tabaco, lanzado el año pasado en su versión en español, el consumo de tabaco mató en 2011 a casi seis millones de personas en el mundo y casi el 80% de esas muertes ocurrieron en países de bajos y medianos ingresos.
Si la tendencia continúa, advierte este informe realizado por la American Cancer Society y la World Lung Foundation, mil millones de personas morirán a causa del consumo de tabaco o por exposición a él durante el siglo XXI. Esto equivaldría a una persona cada seis segundos.
A nivel mundial, las muertes relacionadas con el tabaco se han casi triplicado en la última década y el tabaco es responsable de más del 15% de todas las muertes de hombres y el 7% de las muertes de mujeres.
En el caso de Chile, el país tiene la mayor prevalencia del consumo de tabaco en América Latina, con 9,7 millones de fumadores. Según el Atlas del Tabaco, el consumo de tabaco en Chile es de los más altos del planeta.
Por ejemplo, los jóvenes, entre 13 y 15 años tienen el más alto consumo mundial de tabaco, con 37,1%, y la población chilena mayor de 15 años lidera el ranking de tabaquismo en las Américas, con 40,6%.
En EE.UU., más de 440 mil personas mueren cada año producto de enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco.
Una revisión de varios estudios publicada en 2012 en la revista "Addiction" demostró que ejercitarse ayuda a las personas fumadoras a dejar el tabaco, ya sea corriendo o andando en bicicleta. Según los autores de la investigación, la actividad física está vinculada a la disminución en el deseo de consumir nicotina. El equipo recalcó que durante su investigación, los participantes no recurrieron a ningún otro tipo de método para dejar de fumar, como terapia o productos.