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Ex jugador del Rojo Luis "Motoneta" Mardones clama por ayuda

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"Me han puesto José, Javier, Jaime; pero mi nombre es Luis Edgardo Mardones", nos aclara de entrada con total lucidez el otrora ex puntero derecho de Ñublense en la década de los '60, Luis "Motoneta" Mardones, quien hoy con sus casi 70 años a cuestas (los cumple en el mes de abril), se encuentra postrado en una cama en la comuna de San Nicolás, localidad a la que llegó gracias al alma caritativa de una mujer que es, según indica Mardones, su única familia.

Su historia de vida no ha sido fácil, hace un par de años el desaparecido Esaú Bravo junto al programa Ñuble Deportivo de Radio Ñuble, fue en su ayuda cuando estaba internado en un hogar de ancianos anclado en la comuna de Chillán Viejo, esto luego que un accidente cardiovascular, lo tuviera entre la vida y la muerte.

Lamentablemente, el hogar de anciano fue clausurado, y de ahí en más de Mardones no se supo más hasta hoy, cuando la persona que lo cuida, Miriam López, llegó a la radio a contar su historia, y pedir ayuda para el "Motoneta", quien vive en una pequeña pieza junto a sus botellas de agua, una vieja radio, sus pañales y antiguas fotos en las que aparece defendiendo la camiseta de su querido Ñublense.

"Yo pensé que me iba a morir cuando me dio esto del ataque al corazón, pero aquí estoy", dice Mardones, mientras cuenta recuerdos de las campañas que realizó en el rojo donde estuvo entre los años 1965 y 1969, tras ser visto en la selección de fútbol amateur de Chillán. Su rapidez era su principal arma de juego, esto lo llevó luego a vestir la camiseta de Arturo Fernández Vial, donde se retiró de la actividad. "Mi primer técnico fue Lincoyán Neira y también tuve a Caupolicán Peña", rememora.

Cuando cerró el hogar en el cual se encontraba, Mardones quedó en el total desamparo, siendo Miriam, su cuidadora en el hogar, quien lo acogió como un componente más de su familia, y es ella que llegó a pedir ayuda. "Necesito una pieza para él, porque donde vivimos es muy pequeña mi casa, y quiero que él viva cómodamente, ya que él percibe sólo 73 mil pesos de su pensión que lo invierto en sus pañales, leche y otras cosas para él", explicó.

Consultada por la familia del jugador, Miriam contó que "yo he hablado con ellos, pero no se hacen cargo. Los he llamado y lo único que quieren es ponerlo en un hogar o comprarle una tumba, yo les digo para qué si él esta mejor que nosotros y capaz los que se mueran primero seamos nosotros". La hermana del jugador vive en Los Ángeles, pero no tiene contacto con el ex jugador.

Sobre la condición actual en la que viven, Miriam explicó que "yo arriendo una casita acá en San Nicolás, pero es muy chica y él está en una pieza chiquita ya que yo también vivo con mi hija que tiene una bebé y mi otro hijo de 5 años. Él es revisado por las enfermeras del consultorio de acá, le traen sus medicamentos. Espero también comprarle una tele porque le gusta ver el fútbol y cambiar su vieja radio", cuenta esta mujer oriunda de Chillán Viejo.

A oídos del ex presidente de Ñublense y empresario maderero Casiano Andrade Vera, llegó esta noticia, y él en cosa de segundos no dudó en ayudar.

"Dios me ayuda y yo trato de devolverle la mano ayudando a las personas. Gracias a Dios tengo harta madera, y le donaré una casa de emergencia de 16 metros cuadrados y le donaré una cantidad de dinero para que tenga para los pañales. Mi aporte será construirle esta casa y dinero a este ex jugador de Ñublense que tantas satisfacciones le dio en su momento a muchos ñublensinos", señaló Casiano Andrade.

El "Motoneta" agradeció el gesto del empresario. "Es una persona de un gran corazón. Que Dios lo bendiga siempre. Muchas gracias", dijo entre lágrimas. Así como Casiano, Mardones espera que la gente ñublensina no lo deje en el abandono.