Gabriel Muñoz
Pasadas las 12.30 horas de ayer transcurría una jornada normal en las inmediaciones de la Plaza de Armas de Chillán.
Sin embargo, la tranquilidad del lugar se vio abruptamente interrumpida por las llamadas de auxilio de una mujer que corría a toda velocidad a la siga de quien, acusaba, le había sustraído la suma de 940 mil pesos desde el interior del banco Santander, ubicado la intersección de las calles Constitución con Arauco.
El robo había ocurrido hace sólo unos momentos atrás, cuando la afectada, quien no entregó su nombre por temor a represalias, esperaba su turno en la sucursal bancaria para depositar el dinero.
No obstante, el trámite que se supone rutinario y seguro cambió repentinamente de rumbo, cuando de improvisto un sujeto le arrebató el dinero que traía.
"Me dirigí a la caja cuando me tocó el número de atención. Dejo el dinero en la caja y sorpresivamente aparece un tipo quien estiró la mano, me arrebató el dinero y salió arrancando. Lo primero que hago es girar la cabeza y no veo guardias y nadie que me ayude, así que mi reacción fue seguir al tipo y gritar por la calle como una loca", expresó la víctima.
La afectada agregó que "crucé Arauco hacía la plaza y gritaba: ¡me robó, me robó, atájenlo, atájenlo!, por lo que la gente que estaba en el camino se alertó. Todos empezaron a mirar, algunas personas lo intentaban detener, entre ellos estudiantes, así que el delincuente se caía y se volvía a parar para seguir corriendo, pero finalmente alguien con más fuerza lo redujo y se sumaron más personas. Lo tiraron al suelo y me dirigí a él para reclamarle por lo que me había hecho, además de exigirle mi dinero y pedir a las otras personas que lo registren", dijo la víctima más tranquila mientras se dirigía nuevamente hacía el banco a pedir explicaciones por la supuesta falta de seguridad, según denunció.
Afortunadamente, tras el largo periplo, el dinero, según detalló la afectada, fue recuperado en su totalidad gracias a la ayuda de los transeúntes y de Carabineros.
"Fue un momento espantoso, pero logré que me entregara parte del dinero que me había sustraído. Luego apareció otro señor y me entregó dinero que recogió ya que el delincuente había botado un poco por el camino, y después de eso vino mi reacción de histeria porque me habían robado, hasta que llegó Carabineros y se lo llevó detenido".
El hombre, en tanto, tras la detención de los transeúntes, fue apresado por el sargento segundo Sergio Castro y por el cabo primero Francisco Carrasco, quienes lo trasladaron a la unidad policial.
Ahí se identificó al implicado como Cristian Alarcón Poblete, con domicilio en la ciudad de Concepción. Durante esta jornada, el hombre sería formalizado en el tribunal de Garantía de Chillán.
A pesar de que los testigos aseguraron que en ningún momento el detenido fue agredido por quienes fue aprehendido, el detenido al ser trasladado hasta la unidad policial presentaba sangre en su oreja izquierda, por una herida que sin embargo no era de mayor envergadura.
Delitos de este tipo, que se gestan al interior de casas bancarias del centro de la ciudad de Chillán no son nuevos, sin embargo en esta oportunidad llamó la atención la decisión con la que actuó el sujeto, ya que en otras oportunidades el "modus operandi" más usado era a través del método del pinchazo, el que consiste en individualizar en el interior de los bancos a clientes que retiran grandes cantidades de dinero, posteriormente los delincuentes pinchan la rueda del vehículo de la víctima, siguiéndola hasta que se detienen por la falta de aire de los neumáticos para allí asaltarla.