El Pentágono informó ayer que aviones tripulados y drones estadounidenses realizan vuelos de reconocimiento en Nigeria para dar con el paradero de las más de 200 niñas secuestradas por la milicia radical islámica Boko Haram hace más de un mes.
El portavoz adjunto del Departamento de Defensa de EE.UU., coronel Steve Warren, aseguró que los aviones no están armados y están recopilando información de inteligencia que, por el momento, no está siendo compartida con el Gobierno nigeriano hasta que no se acuerden los protocolos para compartir datos delicados. 'EE.UU. está usando aviones tripulados y no tripulados, aunque no podemos detallar qué tipo de plataformas', dijo.
El portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, insistió en que EE.UU. está asesorando al Gobierno nigeriano en sus esfuerzos por localizar a las adolescentes y que sean rescatadas de manera segura, pero descartó el envío de tropas.
Carney recalcó que el personal militar que participa en las tareas de rescate está sólo 'asesorando', ya que Nigeria es una 'nación soberana' y destacó la dificultad de la búsqueda en un área que comparó con el estado norteamericano de Virginia Occidental.
EE.UU. estableció en su embajada en Abuya, la capital de Nigeria, una célula de coordinación con alrededor de 30 personas del Departamento de Defensa, del Departamento de Estado y el FBI.
Además, el Pentágono está usando imágenes satelitales para examinar las zonas boscosas donde podría haberse escondido a las niñas.
El Reino Unido y Francia también están ayudando en la búsqueda, dado que las Fuerzas Armadas nigerianas, poco profesionalizadas y con bajos recursos, aún no han conseguido avances significativos en la operación de rescate.
El Pentágono aclaró que su personal enviado a Nigeria, que forma parte del Comando de Africa, no va a participar en misiones de rescate armadas que pongan en riesgo vidas de estadounidenses.
En tanto, la policía nigeriana reportó ayer que los pobladores de los estados norteños de Nigeria -donde opera Boko Haram- crearon grupos de autodefensas para contrarrestar a los milicianos islámicos.
El martes por la mañana, tras enterarse de un inminente ataque de los milicianos, vecinos de Kalabalge, un pueblo a 250 kilómetros de la capital del estado de Borno (Maiduguri), emboscaron dos camiones con hombres armados, según informó un oficial de seguridad a The Associated Press.
En la emboscada, al menos 10 milicianos fueron detenidos y 'muchos' fueron asesinados, según el funcionario. Hasta ayer no estaba claro dónde se encuentran los detenidos.
Los residentes de Kalabalge justificaron su acción asegurando que el Ejército no ha hecho suficiente para frenar los ataques de Boko Haram.