Tras seis meses de espera el pequeño Diego de cinco años finalmente recibió el esperado transplante de médula ósea que esperaba y que llevó a su familia a realizar una campaña.
Lo anterior, porque a los cuatro años a Diego le diagnosticaron Leucemia Linfoblástica tipo B aguda, y la única alternativa de seguir viviendo era el trasplante. Es así, como ayer a eso de las 11.00 horas, en el hospital clínico de la Universidad Católica, el niño chillanejo fue ingresado al quirófano con la finalidad de ser intervenido y así poder recibir nuevas células.
La madre del niño, Claudia Vivanco, señaló que la operación duró aproximadamente una hora y que afortunadamente no tuvo complicaciones. ' Su primera etapa de trasplante fue todo un éxito, se esperaban mil reacciones del Diego, pero reaccionó súper bien a su trasplante. Ahora vienen dos semanas más importantes en la vida de mi hijo, porque hay que esperar que esta médula se active, además que se pueden presentar hartas complicaciones como infecciones', contó Vivanco.
Según lo explicado por Claudia este periodo es vital porque los médicos notificarán el grado de aceptación que tenga el cuerpo de Diego con las células que fueron trasplantadas. 'Ojalá que las reacciones que presente no sean graves porque hay riesgo de infecciones, como fiebre, mucositis, porque las nuevas células al encontrase con este nuevo cuerpo puede suceder esto. Estas dos semanas son muy importantes para su evolución', sostuvo Vivanco.
A su vez, Claudia, destacó la entereza con que Diego enfrentó la operación ya que el estaba consciente de todo lo que estaba pasando y el ánimo del pequeño nunca aflojó. 'Definitivamente Diego es mi héroe, porque está dejando una enseñanza increíble. Hasta los médicos están admirados por la fuerza y valentía de dieguito. También nos sirvió mucho estar acompañados por nuestras familias de Chillán, Concepción y amigos, quienes nos dieron toda su fuerza, amor y cariño', expresó Claudia.
Hasta el momento el trasplante de médula al menor fue un éxito, sin embargo, como lo señaló anteriormente su madre, hay que esperar estas dos semanas, por lo que desde hoy, Diego estará en una sala aislado sin poder recibir visitas para que se complete bien su recuperación y no haya riesgo de infecciones en pulmones, riñones intestino, infeurinarias y un sin fin de cosas, que se pueden generar, ya que el cuerpo está limpio de células y no tiene defensas.
'Con este trasplante mi hijo quedó neutropénico totalmente, es decir, está sin defensas, muerto en vida, le mataron todo para que esta célula madre nueva, que entró a la sangre, se encuentre con el cuerpo limpiecito y lo que pasa ahí es que se desconocen y comienzan a pelear como me dijo el doctor tratante', manifestó Vivanco.
Cabe recordar, que Diego Espinoza Vivanco, antes de la operación tuvo que ser sometido a quimioterapia y radioterapias por ocho días, esto porque Diego tenía que eliminar todas las defensas de su organismo, las cuales deben ser recuperadas con la nueva médula.