En muchos aspectos, Chillán y Chillán Viejo constituyen una intercomuna unida por una conurbación natural, que comparten territorios, habitantes, desafíos y una historia en común. Hoy, 26 de Junio, ambas comunas celebran su aniversario y como es tradicional las actividades y festejos se iniciaron con el abrazo de sus máximas autoridades comunales en el límite marcado por el Paso de Piedra. Ese abrazo simboliza la voluntad de trabajar unidos en pos del desarrollo de ambas comunas y sus habitantes, y se ha traducido por ejemplo en la unión en pos del anhelo de Ñuble Región.

Sin embargo, un claro norte que debieran plantearse ambos municipios es como potenciar dicho trabajo en conjunto para un beneficio mutuo, por ejemplo aunando esfuerzos en materia turística o cultural, al compartir tanta riqueza histórica y patrimonial.

Pese a las voluntades, aún no se afinan aspectos tan relevantes como la definición de sus límites para que cada municipio pueda abordar los problemas de sus comunidades. Pese a que fue en el año 2007 que la exintendenta María Soledad Tohá aprobó el Plan Regulador Intercomunal, hasta el presente año se mantenían pendientes, que se han ido subsanando con la aprobación de los distintos Planes Reguladores por ambos concejos municipales. Paralelamente desde el año 2013 se vienen sucediendo reuniones entre los equipos planificadores de ambos municipios para avanzar en los temas de la agenda común. La conurbación enfrenta los índices de peor calidad de vida y desigualdades socioeconómicas según incluso organizaciones como la Unesco. Se suman deficiencias en términos de conectividad, transporte, salud, empleo, áreas verdes, espacios comunes, medio ambiente, entre otros.

La futura construcción de un Hospital en un lugar equidistante entre ambas urbes terminará por unirlas aún más y en ese ejercicio Chillán Viejo se verá enormemente favorecido. En términos habitacionales, Chillán se está quedando corto de terrenos para construir, a diferencia de su vecina histórica, que está experimentando un alza en proyectos de construcción. En este sentido, el proyecto de Circunvalación Oriente, que se inicia desde el by pass sur en Chillán Viejo y la conectará con la variante Nahueltoro, permitirá mejorar el flujo y comunicación terrestre desde la Ruta 5 Sur hasta Coihueco, permitiendo la circulación de vehículos de carga fuera del centro.

De un trabajo cohesionado y pensando en el desarrollo común de ambos territorios, sólo se lograrán ganancias para la calidad de vida de sus habitantes.

Con ese nombre se creó y con ese nombre Chillán fue fundado y con ese nombre se mantiene. Hay veces que señalan que el territorio donde Chillán está instalada hoy, pertenece a la cuarta fundación de nuestra ciudad, lo que le da derecho a los Chillanvejanos a ser los propietarios de los 434 años.

Bernardo O'Higgins nació en Chillán, porque así se llamaba la ciudad donde él nació. Mientras no se oficialice la vigencia de la ley, firmada por el Presidente Joaquín Prieto, determinando que Chillán nació hace 179 años esto es, el 5 de noviembre de 1935, seguiremos con el problema.

Ya recuerdo que en el año 1935, la revista Zig-Zag de grata memoria, que se editaba entonces, en Chile, celebró en una voluminosa edición especial el primer centenario de Chillán. Este alegato que pareciera banal no lo es, si pensamos que estamos celebrando el aniversario de dos comunas el mismo día. Y no es broma, si además pensamos, que los parlamentarios que nos representan en ambas cámaras, tienen que duplicarse para estar en los actos celebratorios de Chillán y Chillán Viejo.

Cualquiera de estas contingencias, cualquiera sean las circunstancias que esta situación provoca nos alegramos de celebrar este aniversario que nos permite hacer estas consideraciones y después de algunas reflexiones, congratularnos por vivir en una ciudad que pese a todas las limitaciones que pudiéramos tener nos gusta ye estamos contentos por ello. Si alguien quiere ver siempre el vaso medio vacío y con ese criterio califica el medio en que vivimos, está en su derecho. Por mi parte, yo entre muchos otros, insistimos en el vaso medio lleno. Quien tiene una mirada clara de nuestra realidad es nuestro amigo Máximo Beltrán, editor y director de la Revista 'Chillán Antiguo' en su edición N° 14, de este mes de junio. En esta edición, fusionada con la revista 'Vitrina Urbana', nos entrega en sus 38 páginas un conjunto de crónicas que nos levantan el ánimo. Aquí se nos muestra una ciudad vigorosa, dueña de su destino, en permanente estado de crecimiento con una inmensa cantidad de proyectos en el ámbito inmobiliario y un movimiento significativo para ponderar realidades del mundo patrimonial y turístico. Lo único sensible es definitivamente saber si se va a mantener esta dualidad que nos ofrecen las dos fechas citadas: El 26 de junio de 1580 o el 5 de noviembre de 1935. Si se aprobara la fecha real del actual emplazamiento de Chillán que nos asignó el Presidente Riesco, esto es, el año 1935, nuestros estimados folcloristas que recién bailaron 434 cuecas, el próximo año bailarían 180.