El joven detenido por tener una causa pendiente en Chillán y ser testigo del bombazo en una estación del Metro de Santiago, Pablo Riquelme Matus de la Parra (25), quedó en libertad tras ser condenado ayer como autor del delito de lesiones menos graves ocurridas en un incidente en Chillán, a principios de año.
Lo anterior se debe a que este chillanejo con residencia en la región Metropolitana, tenía que asistir a una audiencia al Tribunal de Garantía de la ciudad, fijada para el 26 de mayo pasado, por los delitos de agresión leve en contra de dos personas y por porte de arma corto punzante.Sin embargo, Riquelme no se presentó a la audiencia, lo que generó una orden de detención en su contra.
Dos meses después, en un vagón del Metro en la estación Los Dominicos, detonó un artefacto explosivo. Riquelme se encontraba en ese lugar y fue señalado como presunto sospechoso por imágenes registradas, que aún son materia de investigación. Sin embargo, este joven se declaró inocente y él mismo señaló que fue a dejar constancia a la 47° comisaría de Los Dominicos, por haberse visto en las imágenes.
Carabineros al tomarle los datos se dio cuenta que Riquelme de la Parra tenía una orden pendiente de detención por no comparecer a una citación judicial en mayo de este año en Chillán. Por ello fue detenido y trasladado hasta la capital de Ñuble para ser sometido a un juicio simplificado por los hechos que habían ocurrido el 23 de enero.
Juicio Simplificado
Pablo Riquelme se presentó ayer a la audiencia con la misma vestimenta que usó en el Cuarto Juzgado de Garantía capitalino. La audiencia se extendió por aproximadamente 20 minutos y en ella se dieron a conocer las denuncias de las víctimas por agresión, y el cargo por el porte de arma blanca. Riquelme reconoció los hechos y su defensor público, Pedro Aguilera, apeló a la admisión de su representado.
Por otro lado, la fiscal Paulina Valdebenito solicitó al juez la pena remitida de 541 días y el pago de 3 unidades tributarias mensuales (UTM). Finalmente, el juez de la primera sala del tribunal chillanejo, Manuel Vilches, determinó que debido a los delitos de lesiones menos graves y el porte del arma corto punzante, el imputado quedaba en libertad y desechó el pago de una UTM, medida que fue aceptada por los intervinientes. Al respecto, el abogado defensor, Pedro Aguilera, dijo que 'estamos bastante conformes. Es lo que conversamos con don Pablo y él también está conforme con la resolución. Esto no tiene nada que ver con la causa de Santiago, él es un testigo en esa causa. Esto derivó de un problema que sucedió en el verano y no asistió a Chillán porque él se encontraba en Santiago. Mi defendido no quedó con una unidad tributaria mensual en virtud de esta causa, porque está cumplida con los días previos en que había quedado privado de libertad', dijo el defensor.
La fiscal a cargo del caso, Paulina Valdebenito, tras finalizar el juicio, dijo que 'él tenía una orden de detención del tribunal de Garantía de Chillán, por una causa de delitos de lesiones menos graves y porte de arma cortante. En una primera instancia se le formalizó, hubo un control de su detención, además se fijó un plazo de investigación y el Ministerio Público presentó un requerimiento por estos delitos y el 26 de mayo él no se presentó a la audiencia y se despachó la correspondiente orden de detención'.
Agregó que 'esta audiencia es la causa que él tenía pendiente y en esta oportunidad se concluyó con esta causa con la admisión de responsabilidad del imputado', explicó la fiscal Valdebenito.
Por su parte, el denunciado salió de la audiencia bastante molesto por la vinculación que se hizo respecto de su eventual participación en el bombazo del Metro.
'Me voy a querellar contra el Metro y algunos medios de comunicación porque pusieron fotos de mi persona que no correspondían y eso es lo que voy a declarar no más (sic)', sostuvo Riquelme.
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