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Exjuez detalla irregularidades detectadas en indagatoria de adopciones

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Las seis sentencias resueltas en los años 90, que decían relación con procesos de adopción de menores en el extranjero, son los antecedentes más certeros y que dieron luces de irregularidades asociadas a procesos de adopciones de menores. Si bien esta cantidad pudo ser mayor, fueron solo estos fallos los que gatillaron el inicio de una indagatoria del ministro en Visita, Guillermo Cocio Paredes, que terminó con graves sanciones a funcionarios del tribunal de menores de Chillán. A las ya conocidas denuncias de madres que dicen haber sido despojadas de los hijos que dieron a luz en comunas como Quirihue y El Carmen, y tal como lo dio a conocer se sumaron antecedentes asociados al hogar de menores Nuestra Señora de la Esperanza, de Chillán, que por esos años estaba a cargo de una religiosa.

A más de dos décadas de estos hechos y en medio de una investigación por parte del ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, quien indaga posibles delitos en la adopción de menores en distintos puntos del país, el exjuez de Chillán, Guillermo Coccio, accedió a abordar detalles de la investigación y las irregularidades que detectó en estos procesos. 'El problema es que había gente, en la institución y gente que tenía injerencia en que a un niñito se lo llevaran al extranjero, pero con una debida tramitación. Era una irregularidad para nosotros, ya que había mucha injerencia, de personas que estaban a cargo de las adopciones, algunas y otras. Se sabía de casos en un hogar que había en ese tiempo, había una sister extranjera, que tenía mucha influencia', dijo Coccio.

-'Sí, sí esa sister. Entonces el problema era que a veces la madre trataba de colocar sus antecedentes. A mí me dio una impresión que le cooperaban o algunas cosas, lo que nunca se pudo probar, pero había algo, pero la persona que ahí tenía más responsabilidades era el secretario del tribunal de la época, que subrogaba al juez cuando no estaba. Había influencia de gente, ya que habían familias que estaban esperando y pasaban otros por arriba de ellos y se iban al extranjero con autorización del tribunal y revisado. Algunos estaban bien, de los que vi para atrás, y recabé algunos expedientes de los niños que estaban en el extranjero, pero estaban bien por las fotografías que habían'.

Si bien, la investigación del magistrado Cocio nunca pudo constatar transacción monetaria por acelerar un proceso de adopción o colocar una carpeta antes que otra, si se pudieron comprobar errores y rastros de anomalías durante el proceso administrativo de adopción. Cocció avala lo señalado a este medio por la entonces jueza del tribunal de menores de Chillán, Marcela Ramírez, respecto a que su indagatoria se inició por las irregularidades detectadas en esos años por Ramírez.

'Esta investigación surge a raíz de que la señora Marcela Ramírez, quien había asumido hace poco, hizo llegar a nosotros unas irregularidades que estimaba pertinentes de investigar y se optó por lo más sano que fuera uno de nosotros quien investigara y me tocó a mí. Me constituí en el Juzgado de Menores, pero lo irregular que se veía, no es lo que aparece en los diarios y en la prensa, ya que no hubo madre engañadas, sino que influencias', reiteró el ex magistrado.

Informes desfavorables del Sename para validar la adopción de un menor pero que no eran considerados para visar el proceso o que simplemente estos llegaban después del fallo y se incluían igual en la carpeta del menor en adoptado, eran parte de las anomalías detectadas.

-'Las personas decían que no las tomaban en cuenta y otros sí. Había gente que interrogué que era gente conocida y que lo hacían a veces por ayudar, que sé yo, era lo que decían, pero en el fondo era eso. Las carpetas decían que las madres sabían todo lo de la adopción que estaban en un hogar por un tiempo, pero lo malo era la influencia que había en el tribunal para apurar las causas o para entregarles a determinadas personas los menores'.

-'Lo que vi, eran trámites que pasaban muy rápido y especialmente cuando estaba el secretario, ya que el secretario subroga al juez cuando éste no está, eso fue.

-'Allá no llegó ningún reclamo en el tiempo que estuve, que fueron 25 años de ministro, nunca hubo un reclamo de ese tipo de lo que se ve en los diarios.

4 meses de indagatoria

Fueron cerca de cuatro meses lo que el ex ministro en visita se tomó para investigar. Los funcionarios del Tribunal de Menores de Chillán, implicados en estas irregularidades tuvieron severas sanciones.

'Propuse sanciones, no me acuerdo si era suspensión o no, ya que esto fue hace mucho tiempo atrás, para el secretario y otras personas por falta de acuciosidad y lo otro fue informar a la Corte, era ella la que finalmente resolvía, pero yo no entraba en esa resolución, ya que había investigado el caso. Así que la Corte era la que tomaba las medidas', dijo Guillermo Cocio.

En la investigación no se demostró, con prueba concreta, de que hubiere transacción de dinero por las adopciones. La investigación que se inició en mayo del 90 solo tomó los casos que en ese momento se estaban tramitando en adelante, para atrás no se revisó.

'Había una cosa que me llamó la atención, pero no para mal, es que los extranjeros se llevaban niños más grandecitos, no como aquí que por lo general quieren guaguas, pero lo irregular era que el secretario conversaba con las personas interesadas y comiendo con las personas que iban a adoptar, tenían reuniones con ellos y como magistrado no podría comer con una persona que va a litigar, eso no se puede ya que después uno se tiene que pronunciar'.

-'Sí. En realidad podrían ser irregularidades judiciales, pero nadie reclamó. Solo puedo decir que había esa influencia de la religiosa que tenía designada en este hogar y ella proponía'.

Un año antes que se realizara la investigación el tribunal tenía un registro de que alrededor de 30 guaguas, habían salido fuera del país en manos de matrimonios extranjeros. Las comunas que mayor cantidad de adopciones tenían era Chillán y San Carlos.

'Era lo que dijo la jueza de ese tiempo, que había encontrado situaciones, así que interrogué a gente, asistentes sociales, al secretario ya que era notorio, y decían que venía gente a adoptar, de fuera de Chillán. Lo que tenía que investigar era si habían irregularidades, en el sentido de que se suponía que la influencia era con dinero, y eso no lo probé porque era muy difícil, pero sí de gente que reclamó que hacía tiempo que llevaban esperando, matrimonios jóvenes y en cambio venían otras personas del extranjero salían más rápido.

-'Creo que tal vez pudieron haber pequeños favores al secretario, que sé yo, porque habría sido una prevaricación grave si hubiera dinero de por medio, se habían tenido otro tipo de sanciones, pero en caso concreto, de lo que hubiera dinero, no encontré nada.

-'En los otros juzgados de nuestra provincia nunca supimos de esto. Yo asumí como ministro el 79, es que los jueces en ese tiempo eran del crimen, civil, juez del trabajo y de menores era todo en uno. Hacia afuera nunca tuvimos quejas'.