'Nuestra misión es poner temas en el tapete. Como canal queremos entretener, pero hacerlo con un sentido y esta teleserie va en esa línea', afirma el director del área dramática de Televisión Nacional, Álex Bowen, y el cerebro de 'No Abras la Puerta', la apuesta nocturna de TVN.La producción, que viene a reemplazar a 'Vuelve Temprano', aborda a través de la ficción diversos asuntos que están latentes en nuestra sociedad, como la violencia de género, el aborto, y la discriminación a las parejas homosexuales. El objetivo de llevar a la pantalla tramas como la de 'No Abras la Puerta', según manifiesta Bowen, es 'hablarle a los chilenos contándole nuestras historias', y en esa línea esperan trabajar todas las teleseries que se realicen durante su estadía en la dirección del área.El hombre que asumió la jefatura del área dramática de TVN tras la salida de María Eugenia Rencoret ve como una 'gran oportunidad' que la estación pública siga privilegiando la factura nacional para el horario prime y no opte por producciones extranjeras, como ocurre en otros canales nacionales.'Afortunadamente acá tenemos que generar sí o sí productos nuestros. Esa es la apuesta y ya veremos qué pasa', dice el director, quien afirma no tener miedo de salir a pelear por el rating frente a fenómenos de audiencias como 'Las mil y una noches'.'No me complica competir y me encantaría ganarle a las teleseries turcas, pero no sé si lo voy a lograr', confiesa Álex Bowen, quien anoche enfrentaba su primera batalla en la 'guerra de las teleseries nocturnas'.Cabe destacar que 'No Abras la Puerta' es la primera producción que se realiza íntegramente bajo el alero de la administración de Bowen.

Reinventarse es una palabra que en el mundo artístico siempre se ha hecho recurrente. Lo hacen los famosos de Hollywood; los músicos y también faranduleros chilenos como Valentina Roth, quien dejó el carrete y lo excesos por la vida sana y el ejercicio. Sin embargo, la fibrosa hija de Rodolfo Roth no es la única que ha dado un giro en su vida, pues la trasandina Matilde Bonasera, famosa por sus tongos y cahuines televisivos dejó hace rato los programas de farándula para sumirse en la danza. Tan bien le ha ido, que ahora obtuvo el certificado de instructora de zumba, en la academia de Rodrigo Díaz. Molida todavía por las largas horas de baile para llevarse el título, Mati contó el proceso para darle un plus a su currículum, era algo que quería hace rato, pues 'es una modalidad bastante entretenida para la gente, así que me certifiqué. Había hecho zumba antes. Hace un año que hago todo tipo de danzas, entonces la zumba es una parte de'. Agregó que 'la gente que se certificó es de las que les pone ganas. Aparte, las certificaciones con Rodrigo Díaz son bien entretenidas, no son tan monótonas. La parte teórica no es tan fome como en otros lados'.

Tienes que pasar por muchos procesos. Lo más importante es tener claro qué es zumba. La mayoría de la gente cree que es baile entretenido. Pero es nada que ver. La zumba es una mezcla de música, coreografía con fitness. Lo otro es gastar energías bailando. La zumba hace pasos fitness que los adapta al baile. Eso es lo divertido, estás trabajando el cuerpo y no te das cuenta. Bajas de peso, tonificás y todo, pero lo estás haciendo sin notarlo.

Todavía me duelen las piernas. Es terrible jajajá. La zumba tiene algo particular que la gente no entiende. No todo el tiempo estás ejercitándote harto, sino que sube y baja.

Sí, me encantaría hacer clases. Hacer de esos eventos que realizan las municipalidades, lo encuentro muy entretenido.

Matilde Bonasera se hizo conocida en Chile por sus continuos tongos, pero hoy está alejada de ellos. Es más, confesó que 'estoy mejor lejos de la TV. Ahora sí puedo andar tranquila por la calle'. En este cambio se tiñó hasta el cabello, dejando el rubio platinado por un castaño medio. ¿Qué pasó? Según reveló, 'me aburrí del pelo rubio, quiero pasar más piola. La gente igual me reconoce, pero no tanto como antes. Además, la mayoría de las personas dicen que me queda mejor de esta manera, así que yo feliz. Está cómoda con el new look y también con su novio, con quien ya se fueron a vivir juntos. 'Éste ha sido un buen año, no me puedo quejar. Estoy muy feliz, he hecho muchos cambios y todos han sido para bien, en ninguno me ha ido mal. Todo lo bueno me ha favorecido. He tomado buenas decisiones', dijo.