'Septiembre Amigo': solidaridad a mil metros de altura
Reportaje. Vecinos de Lonquimay se beneficiaron con operativo del Ejército de Chile, representado por la Compañía Andina del Regimiento Tucapel.
Con sus 3.914 kilómetros cuadrados de superficie, la comuna de Lonquimay se alza en el mapa de La Araucanía como la de mayor territorio. A 156 kilómetros de Temuco, las cifras que la definen marcan también sus características de zona extrema: una altura media de 925 metros sobre el nivel del mar, la presencia de montañas hacia donde uno dirija la vista, los límites geográficos impuestos por las cordilleras de Las Raíces, La Cordillera de Los Andes, la Región del Bío Bío y Argentina, y un clima modelado por las montañas.
Así las cosas, cada invierno en Lonquimay es un desafío a la vida. En un lugar donde la nieve impide la siembra y taponea los caminos, las durísimas condiciones de vida han hecho del habitante rural de la comuna una persona acostumbrada al rigor. Y ello quedó graficado en junio de este año, cuando miles de personas quedaron aisladas bajo un manto blanco, sin rutas abiertas, sin forraje para sus animales y -lo más preocupante e increíble para los años que corren- sin alimento.
Pese a la alerta roja que se decretó para la comuna, la realidad era una sola: no había manera de llegar a algunos puntos escondidos entre montañas. Entonces, donde ni los vehículos por tierra ni las aeronaves por el cielo podían intentar la hazaña, la responsabilidad fue asumida por quienes en más de una ocasión ya habían desafiado a la nieve en las perores circunstancias: los soldados del Cuartel Andino. Paso a paso, las patrullas lograron ganarle metros a la montaña, hasta llegar a decenas de familias pehuenches con su carga de alimentos, medicina y forraje. Una de las tantas tareas que cumple este cuartel dependiente del Regimiento de Infantería Nro. 8 Tucapel.
'SEPTIEMBRE AMIGO'
La Compañía Andina de Lonquimay desarrolla funciones de entrenamiento, preparando soldados en ambiente de montaña, pero también realiza una importante función de acercamiento a la comunidad. Con presencia permanente en la zona, soldados y oficiales conforman un cuadro permanente enraizado con los habitantes del territorio.
Todos estos antecedentes explican el por qué la apartada comuna de Lonquimay fuera elegida junto a otras tres zonas rezagadas del país para la ejecución del operativo del Ejército de Chile denominado 'Septiembre Amigo'. Visviri (región de Arica y Parinacota), Ollagüe (región de Antofagasta), y Villa O'Higgins (región de Aysén) se sumaron a la zona cordillerana de Malleco, recibiendo la buena noticia de que serían escenario de una inédita acción de apoyo militar integral durante los primeros días de septiembre y que el caso de Lonquimay abarcaría desde la construcción de viviendas hasta capacitaciones a los vecinos.
'La operación Septiembre Amigo pone a disposición de las localidades más aisladas y necesitadas del país, las capacidades militares, brindando una mano amiga en apoyo de la comunidad', apunta el coronel Cristian Guedelhoefer, comandante del Regimiento de Infantería Nro. 8 Tucapel. 'El hecho de ser Lonquimay una de las sedes, obedece a que la institución del Estado que está mayormente representada aquí es el Ejército, pues cuenta con un cuartel militar que es la Compañía Andina, que tiene capacidades especiales en el ambiente montaña'.
NIEVE Y ESQUÍ
'Septiembre Amigo' en Lonquimay abarcó 3 intensos días, desde el viernes 5 hasta el domingo7, iniciándose la primera jornada en el Centro de esquí Corralco, que si bien se ubica en Curacautín, contó con la presencia de los vecinos y autoridades de Lonquimay.
'Estamos dando inicio a escuela de esquí para los niños de las escuelas municipales, apuntando a aquellos establecimientos que se encuentran más aislados', apuntó el coronel Cristian Guedelhoefer. 'Lo que buscamos es que las condiciones climáticas no sean un impedimento para que los niños puedan desplazarse y convivir con la nieve'.
A cargo de instructores militares de montaña, los niños y niñas de escuelas donde la nieve es más un problema que un motivo de esparcimiento, dieron sus primeros pasos en el esquí.
'Esta es la primera vez que estoy aquí en Corralco, y la primera vez también que esquío', aseguró la estudiante de sexto año de la Escuela Bernardo Ñanco, Milca Huenchunao.
Su compañera, Débora Huenchunao, de 11 años, agregó que 'estoy muy contenta de que me hayan invitado a participar de este curso, nunca había esquiado, aunque conozco muy bien la nieve porque siempre quedamos aislados'.
HIPOTERAPIA
En los terrenos del sector denominado Las Avutardas, en el corazón urbano de Lonquimay, el Regimiento Húsares de Angol realizó su aporte al operativo con 7 caballos entrenados en el área de la hipoterapia. Los beneficiados, los niños y jóvenes de la Escuela Especial Justo Schwaitzer, quienes recorrieron 14 kilómetros desde la localidad de Lolén para disfrutar por primera vez en su vida de este acercamiento con los animales desde un punto de vista terapéutico.
'Esta es la primera vez que realizamos hipoterapia, que sirve sobre todo a los niños con dificultades de comunicación y trastornos motores', señaló Carolina Mora, docente encargada de la escuela especial. 'Me parece excelente que el Ejército nos haya hecho este regalo, esta es una escuela especial que no cuenta con equipos multidisciplinarios'.
Esta escuela especial tiene una matrícula de 26 alumnos, con edades que van desde los 8 y los 25 años de edad, atendiendo multidéficit, todos con discapacidad intelectual asociada con otras dificultades.
La felicidad de los pequeños fue -según lo señalado por los 'tíos' del Ejército- el mejor pago por los esfuerzos. Incluso quienes se hallaban impedidos de movimiento en sus sillas de ruedas, pudieron subir a un caballo. Camila, una pequeña con síndrome de Down, fue una de las más felices de este contacto con el animal y las montañas.
EN LAS ESCUELAS
La plaza de Lonquimay se convertía durante la mañana del viernes en punto de encuentro para cientos de vecinos que disfrutaron desde sopaipillas y café gratis hasta la actuación de la Big Band, conformada por soldados-artistas de la Escuela de Suboficiales.
En paralelo, una comitiva encabezada por el coronel Guedelhoefer y a la que se sumaría el alcalde de Lonquimay, Guido Barría, recorría los liceos y escuelas de la comuna, con un cargamento de libros y atlas de regalo.
Benjamín Negrier, director del Liceo Brigadier Carlos Sánchez Villalobos, recibía el regalo entregando una buena noticia: la adjudicación por parte de una empresa de Santiago, de la construcción del liceo.
'En julio de 2016 podremos contar ya con un liceo del orden de los 5.800 millones de pesos, una noticia que nos satisface, pues estábamos con un hacinamiento total de nuestros 400 alumnos tras el incendio de nuestro edificio', señaló Negrier. 'Han sido años duros. Por ello esta buena noticia nos llena de alegría, y más ahora que hemos recibido este aporte de textos por parte del Ejército'.
La siguiente parada de la caravana fue la Escuela Bernardo Ñanco, en medio de la comunidad mapuche El Naranjo, con una matrícula de 171 niños, el 97% de ellos de origen mapuche.
'Este operativo del Ejército es trascendental, pues siempre faltan estos apoyos', señaló el director de la escuela, Federico Morales Jiménez. 'Agradezco esta acción y espero que esto fortalezca más el espíritu patriótico y de servicio a la comunidad que caracteriza al Ejército'.
El alcalde de Lonquimay, Guido Barría, acompañó a los directores de los establecimientos en la recepción de los textos.
'Para nosotros es fundamental el apoyo del Ejército, que está permanentemente presente en nuestra comuna', apuntó la primera autoridad comunal. 'Y aquí no sólo la gente de La Araucanía viene a hacer instrucción, sino que de todo Chile, pues todos los años viene la Escuela Militar, la Escuela de Alta Montaña, por lo que el contacto con el Ejército siempre ha sido muy estrecho. Por nuestras condiciones geográficas, por la dureza del clima, el aporte de la Compañía Andina es fundamental para los vecinos. Sin ir más lejos, en la última nevazón de junio fue el Ejército el que a través de sus patrullas llegó a auxiliar a las familias que estaban aisladas por la nieve'.
VIVIENDAS
Uno de los puntos centrales de los 3 días de 'Septiembre Amigo' estaba centrado en la construcción de viviendas para 34 familias en vulnerabilidad social, que en términos de esta apartada zona cordillerana significa estar expuestos al frío, al viento y a la nieve.
A 15 kilómetros de Icalma, el matrimonio conformado por Dina Cañumir y José Huanchacal debió soportar las intensas nevazones de junio en su pequeña mediagua por donde se colaba el viento y la lluvia. Ellos conforman una de las tantas familias que formaron parte de las estadísticas de personas aisladas y fueron también designadas por el municipio como prioridad para recibir una de las 34 construcciones.
'Estas viviendas se están levantando en diferentes partes de la comuna, concentradas hacia el sudeste principalmente', señaló el coronel Guedelhoefer. 'La Municipalidad realizó un catastro con personas en condiciones más extremas en habitabilidad, y nosotros cooperamos en traslado y armado. En cada casa en construcción hay un equipo de soldados, principalmente del regimiento Tucapel, que junto a 'Jóvenes sin Fronteras' trabajan liderados por un capataz dependiente del municipio'.
Las apartadas localidades de Mitrauquén y Pehuenco fueron los puntos donde se concentró la construcción de las viviendas, cada una estimada en unos 3 millones 200 mil pesos, con un alto estándar capaz de resistir el rigor del clima.
En medio de los martillazos, Dina Cañumir, hiladora, señala que 'me vine de Cruzaco con mi marido, y nunca pensamos que este invierno iba a ser tan duro. Esta es una zona cercana a Icalma, con mucha nieve, incluso en junio quedamos completamente aislados, con más de un metro de nieve. Así es que estamos muy contentos de que nos estén construyendo una casita como esta, que además se ve muy acogedora'
CAPACITACIÓN
Pero junto con la construcción de casas y el operativo de salud, también hubo espacios para la entrega de conocimientos y técnicas para los lonquimayinos. Es así como se efectuaron 3 capacitaciones, dirigidas a la comunidad: un curso de herraje, una capacitación de proyectos para personal municipal, y un curso de mueblería básica.
El curso de mueblería se efectuó en dependencias del Cuartel Andino. Juan Segundo Paillalillo, de 59 años, es vecino del sector de Mallín del Treile, uno de los lugares más afectados por las últimas nevadas. 'Yo me enteré por la municipalidad, y decidí venir porque yo hago algunos trabajitos en madera,', señala el vecino. 'Puedo decir que ha sido un muy buen curso, son buenos profesores los militares'.
A unos 500 metros de distancia, el sector de pesebreras servía de escenario para el curso de herraje.
'Yo trabajo de amansador de caballos', asegura Edison Alvarez, de 30 años, y quien hizo su servicio militar precisamente en esta unidad. 'Desde Prodesal me avisaron que se realizaría este curso y me interesó. Yo he herrado, pero aquí he aprendido mucho'.
El mayor Fernando Olave, oficial de Veterinaria del regimiento Tucapel, fue el encargado de impartir el curso.
'La recepción por parte de los vecinos ha sido muy buena, ya que en la cordillera se usa mucho el caballo, tanto como trasporte, como herramienta de trabajo o como sustento familiar gracias a la venta de crías.', asegura el instructor. 'Ellos tienen falencias en el proceso del herraje, por lo que les hemos ayudado a adquirir una mejor técnica'.
REGIMIENTOS
La plaza de Lautaro reunió durante el fin de semana pasado una muestra de material con todas las unidades representativas de la III División: el regimiento Arauco de Osorno ofreció sus pasarelas a los niños que quisieran experimentar el cruce sobre sogas y cables; el Tucapel de Temuco mostró sus muros de escalada; el regimiento Victoria en conjunto con Tucapel ofrecieron gratuitamente café y sopaipillas a los vecinos. Paralelamente la Banda Instrumental del Tucapel se desplazó al sector Liucura, y la Big Band, de banda de la Escuela de Suboficiales, ofreció un par de conciertos muy aplaudidos.
'Para la División una responsabilidad y un agradecimiento de que hayan confiado en nosotros, pues esta es una tarea institucional, que se está desarrollando en cuatro diferentes zonas en el país, donde la geografía es determinante', señaló el general Camilo Vial Castillo, comandante de la III División de Montaña del Ejército.
'La relación comunidad Ejército aquí en esta comuna es muy buena, yo tuve la oportunidad de trabajar en la zona en los inicios de mi carrera y no veo que esto haya variado, sigue habiendo una relación muy rica, muy humana. Somos parte de la ciudadanía, en Lonquimay hay 20 familias de soldados que viven aquí, compran el mismo supermercado o almacén, sus hijos van a los mismos colegios de la comunidad y así ha sido desde que el Ejército se instaló en Lonquimay'.
EXITOSO
'Septiembre Amigo' se despidió de Lonquimay bajo una lluvia torrencial. Mientras el sábado 8 la Big Band y la emotiva obra de teatro 'La batalla de La Concepción' regalaban una jornada inolvidable para los vecinos, el domingo 7 las diferentes unidades militares cerraban el operativo con la tranquilidad del deber cumplido.
'La jornada del sábado en el Gimnasio Municipal ha sido extraordinaria, donde se sumó la alegría de la banda de la Escuela de Suboficiales, y una segunda parte con una obra de teatro brillante, que nos llenó de emoción y orgullo', aseguró con entusiasmo el coronel José Velásquez, subdirector de la División de Operaciones del Ejército.
'Creemos que ha sido muy exitoso el resumen de esta orientación entregada por el comandante del Ejército, donde hemos llegado a estas 4 zonas aisladas y rezagadas de Chile. Aquí en Lonquimay, hemos sentido el cariño de la comunidad'.
4 fueron las zonas
34 viviendas
3.914 kilómetros