Una votación lenta se vivió ayer en la Comisión de Educación de la Cámara, instancia que -contra el tiempo- continuó tramitando en particular el proyecto del Ejecutivo que termina con el lucro, el copago y la selección escolar.
Aunque el debate nuevamente se vio por momentos entrampado por discusiones de forma, los diputados avanzaron en la discusión y aprobaron varias de las indicaciones propuestas.
Entre las disposiciones aprobadas se encuentra aquella que indica que 'el rendimiento escolar del alumno no será obstáculo para la renovación de su matrícula'. La actual legislación sólo estipula esta norma hasta sexto básico, pero la indicación aprobada por la Comisión la extiende a todos los niveles de la enseñanza.
A la sesión asistió el ministro de Educación, Nicolás Eyzaguirre, quien explicó que esta iniciativa pretende evitar que los establecimientos educacionales exijan notas muy altas a los estudiantes para renovarles la matrícula, más allá del requisito de aprobar. 'En ningún curso, tal como ya ocurre ya entre primero y sexto básico, un promedio de notas no brillante puede ser obstáculo para renovar la matrícula', señaló.
Los diputados de la Alianza expresaron su inquietud con respecto a que esta disposición en la práctica impida que los liceos emblemáticos puedan seguir seleccionando por criterios académicos, lo que fue descartado por el ministro, quien explicó que esto sólo regula la continuidad de los alumnos en un establecimiento, no la admisión.
También se aprobó una indicación de los diputados de la Nueva Mayoría para establecer que esto rija 'en todos los establecimientos educacionales reconocidos oficialmente por el Estado', es decir, que también deberán acatarlo los colegios particulares pagados y no sólo los que reciben subvención del Estado.
Otra disposición que se aprobó ayer es que ningún colegio del sistema -no sólo los subvencionados, como lo indica la ley actual- podrá impedir la continuidad de un alumno debido a que sus padres cambien de estado civil, es decir, que se separen.
Entre las indicaciones que fueron rechazadas se cuenta una presentada por la 'bancada estudiantil', que pretendía que en los procesos de admisión de los colegios no se pudiera considerar el sexo de los postulantes, lo que implicaba que no podían existir los colegios sólo de varones o de mujeres. También establecía que los colegios particulares pagados no podían seleccionar a sus alumnos en virtud del rendimiento escolar. Esto último, para los diputados de la Alianza era 'introducir la tómbola en los colegios pagados', lo que a su juicio no estaba dentro del ámbito del proyecto de ley.
También se rechazó una indicación presentada por la Alianza en torno a la admisión de los estudiantes, que estipulaba que las familias debían 'no sólo adherir' al proyecto educativo del colegio, sino también 'comprometerse activamente en su realización'. El plazo para despachar el proyecto en la Comisión finaliza hoy.