27 mil ñublensinos controlan diabetes en centros de salud
chillán. Hoy se conmemora el día mundial de esta enfermedad.
El sobrepeso, antecedentes familiares o el aumento notorio de la circunferencia abdominal (al medirse la cintura) son signos suficientes para realizarse un control preventivo y detectar a tiempo la Diabetes, una enfermedad que en la provincia de Ñuble registra a más de 27 mil personas en control en los centros de salud públicos.
Se trata de un problema de salud crónico provocado por una anormalidad en el funcionamiento del páncreas, lo que eleva los niveles de azúcar en la sangre. Las complicaciones de esta enfermedad pueden ser crónicas o agudas. Las agudas son producidas por la gran cantidad de glucosa en ciertos momentos, lo que provoca deshidratación y tendencia a infecciones. Las crónicas, en cambio se manifiestan a largo plazo y resultan del daño producido en las arterias coronarias y cerebrales al igual que los daños en los riñones, nervios y las retinas de los ojos.
"Las personas deben controlar su peso y alimentación ya que los síntomas más clásicos de esta enfermedad como son falta de energía, sed y ganas frecuentes de orinar, se presentan cuando ésta ya es evidente y sólo se puede controlar pero no prevenir su aparición", explica la nutricionista del Servicio de Salud, Marycielo Avendaño.
Las personas con diabetes tienen 2 a 4 veces más riesgo de enfermedades cardiovasculares como infarto y ataque cerebrovascular. Otra complicación severa, señala la profesional, es la neuropatía diabética que puede afectar a una de cada 2 personas con esta enfermedad, la cual conjuntamente con la disminución del flujo sanguíneo incrementa el riesgo de úlceras de los pies y de amputación. Asimismo, explica, es una de las principales causas de enfermedad renal crónica, la que obliga a las personas a dializarse.
La retinopatía diabética, a su vez, ocasiona deterioro severo de la visión y en 2% de los casos pérdida total.
El doctor Michel Bergoeing, cirujano Vascular del Instituto Vascular de Santiago, explicó que "el paciente debe hacer autoexamen de sus pies todos los días y usar calzado apropiado: zapato de horma ancha, altura apropiada y sin costuras internas. Además, revisarlo todos los días antes de ponérselo en busca de cuerpos extraños que puedan lesionar el pie (piedras, por ejemplo). Por último, por la neuropatía sensitiva (pérdida de sensibilidad) el diabético no puede caminar descalzo, menos en la playa con arena caliente, y no debe usar guateros por el mismo riesgo de quemadura".