Minería: atracciones y desafíos para la Generación "Y"
Hace pocas semanas, la ministra de minería, Aurora Williams, invitó a los jóvenes a estudiar carreras técnicas ligadas al sector que lidera. Hoy, en pleno período de postulaciones, el llamado del Gobierno hace mucho sentido, ya que uno de los principales desafíos de la industria es encontrar a personas que cuenten con los perfiles necesarios para desempeñarse en este rubro. La minería, poderosa fuente de empleos en nuestro país, es una actividad que requiere de personal profesional y técnico con un alto grado de especialización. Para la próxima década, la gran minería requerirá cerca de 30.000 nuevos profesionales y técnicos. De éstos, un 80% corresponderán a mantenedores eléctricos y mecánicos y operadores de equipos fijos y móviles, según datos del Consejo de Competencias Mineras (CCM). Se requerirá mucha mano de obra calificada no sólo en las faenas actuales, sino también en los futuros proyectos de los años venideros. Quienes están llamados a ocupar estos puestos son parte de la "Generación Y" o también conocidos como "Millennials". Ellos aprovecharán las oportunidades que presenta la minería, pero para que ocurra deberán estudiar y adquirir las habilidades necesarias. Este escenario es el que nos obliga detenernos y relevar la capacitación de nuestros jóvenes a un tema estratégico de futuro. Finning, como Compañía proveedora de la minería, se ha hecho cargo de este desafío a través de la creación y sostenimiento de 3 centros de formación técnica, donde se forman a los futuros trabajadores del rubro con un alto nivel de especialización. Pero lo anterior no es suficiente, Además de la capacitación, la industria minera requiere atraer, motivar y comprometer a los jóvenes trabajadores. Para esto, debe conocerse lo que a esta Generación "Y" le gusta. Según nuestra experiencia, persiguen el desarrollo profesional en un entorno que les permita la clara y rápida promoción interna; estar conectados siempre o casi siempre, lo que nos obliga a dar mayores espacios de conectividad en las faenas. Si es que están en un lugar remoto, hay que evitar que se sientan "prisioneros". En un mundo globalizado como el actual, es clave que el trabajador sienta que está conectado.
Marco Berdichevsky
