Un gran susto pasaron los vecinos de San Nicolás, durante la mañana de ayer, especialmente los funcionarios municipales luego que una mujer con evidentes problemas psiquiátricos llegara hasta el edificio consistorial portando una escopeta de doble cañón, calibre 12 milímetros, amenazando de muerte al alcalde de esa comuna, Víctor Toro.
El hecho se produjo cerca de las 8.00 horas una vez que la mujer, quien padece trastorno bipolar, encontró el arma de fuego que pertenece a su marido. Si bien el había escondido el arma detrás de un closet, su mujer de 39 años la extrajo y se dirigió a pie hasta el domicilio del edil de San Nicolás, ubicado en calle Arturo Prat, con el fin de exigirle que la reintegrara a sus funciones como podóloga clínica, cuya ocupación tuvo hasta hace dos años, fecha en que supuestamente, Víctor Toro la despidió del Cesfam de la comuna.
Según comentaron los familiares, la mujer tomaba las pastillas prescritas por su médico tratante en el hospital Herminda Martín de Chillán; sin embargo, durante la madrugada de ayer no hicieron efecto, y apenas se levantó comenzó su plan.
Al no encontrar al alcalde Toro en su casa, la mujer se dirigió hasta el edificio municipal. Según informaron desde la oficina de Relaciones Públicas del municipio, "ingresó con el arma a la Municipalidad donde se encontraba la auxiliar de aseo, quien vivió momentos de terror al ver a esta persona fuera de sí, temor que se vio acrecentado, ya que la funcionaria se encuentra embarazada. A esa hora, se encontraban además una pareja de personas que estaban a la espera de ser atendidas. Al no encontrar al alcalde en la municipalidad (porque se encuentra de vacaciones), se dirigió al retén de carabineros, donde amenazó a los funcionarios e intentó atacar al jefe de retén, suboficial mayor Francisco Labrín, siendo detenida al instante por personal de turno".
Esta versión fue corroborada por la fiscal Tamara Cuello, quien se encontraba de turno y estableció que la mujer pasara a control de detención. De paso comentó que "la detenida es una mujer que ya es conocida en la comuna por tener trastornos mentales". Tras el accidente, y luego de estar detenida poco más de una hora en el retén de carabineros de San Nicolás, la mujer fue trasladada hasta el tribunal de Garantía de Chillán, donde el fiscal Juan Rohr procedió a formalizarla por el delito de amenazas y porte ilegal de arma de fuego.
La jueza Claudia Madsen, quien hasta entonces no sabía de la condición psiquiátrica de la imputada, acogió las medidas cautelares solicitadas por el Ministerio Público, consistentes en firma mensual y orden de prohibición de acercarse al municipio y también a la casa de Víctor Toro.
Sin embargo, los más preocupados por su libertad fueron los familiares que asistieron a la audiencia, ya que manifestaron que la mujer ha presentado durante la última semana un cuadro de desequilibro mental intenso y temen que vuelva a cometer una acción como la que aterrorizó a los funcionarios municipales.
En función de la preocupación de los familiares, la jueza Madsen agendó una audiencia para el 11 de marzo, en la que se presentarán los antecedentes médicos, para determinar si se suspende el procedimiento, dada su condición.
El defensor penal público, Juan Pablo Alday, comentó que en la próxima audiencia del 11 de marzo, en caso de comprobarse que posee trastornos mentales, el proceso penal que existe actualmente en su contra cambiaría. "No se le podría aplicar las penas que establece el sistema penal, debiendo aplicarse otras medidas", comentó el defensor, añadiendo que tendría imputabilidad reducida. Los familiares, por su parte, esperan que la mujer sea internada en un centro psiquiátrico aunque sea por vía judicial, ya que les es complejo contenerla con sus actuales alteraciones psíquicas.
Danny Fuentes Espinoza