El gran aporte de los pequeños embalses a la "Zona de Rezago"
riego. Estudios por $1.700 millones que impulsa el MOP regional a través de la DOH determinarán las zonas en donde será factible construir tranques para asegurar el riego de los sectores productivos, entre ellos, el secano de Ñuble.
Desde principios de año se está implementando un plan integral de $105 mil millones para paliar la sequía en Chile, una de las más extremas y prolongadas vividas desde la década de los años 60.
Las medidas apuntan a un trabajo conjunto entre los Ministerios de Interior y Seguridad Pública, Hacienda, Obras Públicas, Salud, Minería, y Medioambiente.
Precisamente el 26 de marzo, la Presidenta Michelle Bachelet reafirmó su compromiso con la construcción y rehabilitación de estanques y embalses durante su mandato, tal como lo anunció en su cuenta pública del 21 de mayo pasado.
A ellos se suman la instalación de plantas micro-desaladoras, el establecimiento de casi 6.500 sistemas de captación de aguas lluvia en domicilios que se abastecen por camiones aljibe, entre otras.
En ese contexto, el Ministerio de Obras Públicas asumió el desafío presidencial.
"Quirihue , Coihueco-Pinto, Arauco , San Nicolás - Ninhue, Chillán Viejo y Ránquil son las comunas comprendidas en esta primera etapa de catastro y esperamos en el transcurso del año 2016 tener terminados los estudios, los que nos indicarán en qué zonas se podrían ejecutar pequeños embalses", señala el seremi de OO.PP. René Carvajal.
La autoridad anunció durante la semana que en las provincias de Ñuble, Concepción y Arauco se desarrollarán los análisis y estudios por $1.700 millones para determinar la factibilidad de construcción de nuevos pequeños embalses en la región, cargo de la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH).
"La idea es sondear en siete localidades la existencia de las condiciones adecuadas para desarrollar este proyecto", precisa la autoridad regional.
El seremi de OO.PP. explica que para desarrollar el sector agroalimentario es necesario agua, razón por la que el Ministerio ha destinado una cantidad significativa de recursos para la realización de estudios.
"Con ella se analizarán en diferentes comunas de la región los lugares donde se puedan construir embalses pequeños", acota la autoridad regional.
SEIS AÑOS DE SEQUÍA
La importancia de disponer de obras de acumulación menores, en especial en la zona de secano que involucra en Ñuble a 9 comunas, está ligada a las precipitaciones anuales.
De acuerdo al último informe sobre Coyuntura Agroclimática de abril elaborado por la Unidad Nacional de Emergencias Agrícolas y Gestión del Riesgo Agroclimático (UNEA), del Ministerio de Agricultura, la existencia de ciclos que alternan períodos secos y lluviosos ha pasado de valores negativos en los últimos seis años a valores crecientemente positivos en los últimos meses, lo que indicaría el término del ciclo seco.
"En la zona Sur, con las lluvias de la primera quincena de Abril, se ha empezado una recuperación del nivel de precipitaciones cercano al 50%, entregando la humedad suficiente para la actividad agrícola", señala el reporte.
Con las mismas estadísticas, en cambio, Meteorología de Chile registra a la fecha 36 milímetros de lluvia con 64% de déficit en la zona.
Esta situación de arrastre sería la causante de los bajos rendimientos y pérdidas en algunos frutales y cultivos como uva, trigo y arroz debido a la concentración de lluvias en un periodo corto de tiempo y escasez hídrica desde mediados de septiembre a la fecha.
De ahí que Minagri declarara Emergencia Agrícola en las 21 comunas de la provincia a fines de marzo.
COMUNAS DE SECANO
Para el seremi de Agricultura, Rodrigo García, los estudios de factibilidad de pequeños embalses en la región del Biobío son un reflejo de la preocupación del Gobierno por los pequeños agricultores.
"Destaco que las comunas involucradas en estos estudios de la DOH pertenecen al secano y forman parte de la Zona de Rezago", dice.
García destaca que estas obras se sumarían a otros grandes proyectos de acumulación hídrica.
El de mayor magnitud, el Embalse Punilla, actualmente en licitación, obra por US$397 millones y que beneficiará a seis comunas de la zona nororiente de Ñuble.
El otro, agrega, es el estudio de factibilidad del Embalse Zapallar.
Este embalse beneficiaría a las comunas de San Ignacio, El Carmen y Bulnes -en el sur de la provincia-, y permitiría regular las aguas del río Diguillín, con una capacidad de 80 millones de metros cúbicos.
"Todas estas obras de acumulación van a beneficiar a la agricultura de la provincia de Ñuble", resalta.
El seremi de Agricultura explica que una vez construidas, las obras de riego permitirán asegurar la disponibilidad de agua y el desarrollo de cultivos más rentables.
"Se abren posibilidades para la hortofruticultura y potenciar los viñedos en el Valle del Itata. Por lo tanto el aumento de la productividad y rentabilidad va a ser sustantivo", indica.
TECNIFICACIÓN
Si bien la concreción de estas nuevas obras de acumulación traerá aparejados beneficios económicos y sociales, también plantearán nuevos desafíos. Uno de ellos apunta a la tecnificación del riego para hacer más eficiente el uso del agua.
Paulo de la Fuente, coordinador de la macro región sur de la Comisión Nacional de Riego (CNR) señala que el Gobierno está consciente de la realidad climática que afecta al país y la región.
"Muchos de nuestros esfuerzos, a través de la DOH, están siendo puestos en obras de acumulación, por tal motivo es de suma importancia que se realicen estos estudios y luego se concreten obras que permitan dar seguridad de riego a un gran número de agricultores", afirma.
Dados los ciclos de sequía, el país debe adecuarse a la disponibilidad del recurso; y si el agua abunda en invierno, hay que enfocarse en obras que puedan acumularla, para luego usarla en periodos de escasez. "Como Comisión Nacional de Riego nos interesa que cada vez más agricultores cuenten con disponibilidad de agua para que puedan postular a nuestros concursos de la Ley 18.450 de Fomento a la Inversión Privada en Obras de Riego y Drenaje", dice.
"Se abren posibilidades para la hortofruticultura y para potenciar los viñedos en el Valle del Itata. Por lo tanto el aumento de la productividad y rentabilidad va a ser sustantivo",
Rodrigo García
Seremi de Agricultura
En los últimos años se impuso la frase "La sequía llegó para quedarse", un fenómeno acentuado en las últimas décadas por el llamado cambio climático y que en algunas zonas se tornó un problema más permanente. Por esa razón, el desafío de las distintas administraciones de Gobierno ha apuntado a aumentar significativamente la capacidad de embalsamiento. Para ello se ha priorizado la ejecución de proyectos de acumulación de agua a través de la construcción de obras de mayor y menor cuantía, conforme a una planificación integrada de los recursos hídricos que garanticen un uso eficiente.
Sequía
El país vive una prolongada sequía desde hace seis años afectando a gran parte del país.
Emergencia Agrícola
En los últimos años, la escasez de agua para riego y consumo humano ha llevado a declarar zonas de Emergencia Agrícola.
Obras de Acumulación
Entre las medidas para enfrentar un problema de carácter más permanentes, en especial en el secano, es la construcción de obras de acumulación.
Embalses
En Ñuble hay dos proyectos de grandes obras de acumulación: Punilla y Zapallar.
Estudios de la DOH
El MOP regional destinó $1.700 millones para estudios que determinen la factibilidad de zonas para la construcción de pequeños embalses destinados a riego agrícola.
Marcelo Arroyo L.
$1.700 millones destinó el MOP regional para estudios que puedan determinar las zonas en donde será factible construir tranques que permitan asegurar el riego de los sectores productivos.
6 años de sequía prolongada afecta a gran parte del país provocando situaciones de escasez hídrica que han llevado a declara Emergencia Agrícola en 47 comunas, 21 de ellas de la provincia de Ñuble.