Chillanejo y su esposa vuelven a Chile tras estar atrapados en Nepal
Feliz, así se mostró el matrimonio conformado por el chillanejo Andrés Gutiérrez y la penquista María Fernanda Rubio, quienes finalmente, después de más de dos semanas, pudieron pisar suelo chileno tras vivir uno de los eventos más traumáticos al quedar atrapados tras el terremoto que afectó a Nepal, el pasado 25 de abril.
El matrimonio llegó pasadas las 8.30 horas a Santiago, donde los esperaban familiares y amigos para darles la bienvenida. Pero eso no fue todo, la prensa nacional también reaccionó ante la vivencia que vivió la joven pareja que se encontraba realizando una expedición en las faldas del reconocido monte Everest cuando ocurrió el terremoto 7.8 Richter en Nepal y que hoy suma más de 7 mil muertos.
"Ellos se encontraban bien y muy contentos de poder al fin llegar, ya que la experiencia fue terrible", declaró Pilar Muñoz, madre de la joven.
Misma sensación tuvo María Fernanda Rubio, la joven penquista y odontóloga de la UDD, quien señaló que "estamos súper felices con la familia. Claramente fue todo muy complicado, especialmente estar lejos de la familia en los momentos difíciles, además no sabíamos cuando podíamos volver y salir de la montaña, fue todo eso súper angustiante. Así que ahora feliz de estar de vuelta".
Luego de su llegada a Santiago, rápidamente emprendieron rumbo hasta nuestra ciudad, donde vivirán desde ahora.
VIVENCIA
Luego de contraer matrimonio, ambos decidieron irse a Australia a trabajar por un año. Sin embargo, antes de volver a la Región del Bío Bío, decidieron realizar un viaje para vivir aventuras para recordar en el futuro, y así fue.
"El terremoto fue a las 12 del día allá y recién a las 5 de la tarde pudimos mandar un mensaje avisándoles a nuestras familias que estábamos bien, como dos días y medio después llegamos a Lukla donde había un poco más de conexión y nos pudimos comunicar para hablar, pero estuvimos 6 días en la montaña sin poder salir. Fue todo muy traumático, bastante, sobre todo por las condiciones en las que estábamos. Después llegamos al aeropuerto, no había como salir y las condiciones eran súper precarias, era muy distinto a lo que vivimos acá en Chile", recordó María Fernanda.
Además, agregó que todo fue muy complicado porque el sismo los encontró en plena expedición y que mientras estaba nevando debían seguir caminando para llegar a Lukla.
PROYECCIONES
Ahora más tranquilos y junto a sus seres queridos, los jóvenes reviven la experiencia sólo como una aventura más, con amargos recuerdos.
Sin embargo, tienen muchas proyecciones a futuro, y todas son en nuestra ciudad. Él es ingeniero y ella odontóloga, por lo cual se quedarán en Chillán, para retomar sus vidas y dejar lo vivido solo como un mal recuerdo.
"Nuestras proyecciones ahora son quedarnos a vivir en Chillán y seguir con nuestras vidas. Rearmarnos de nuevo, porque antes de este viaje estuvimos un año en Australia trabajando, así que tenemos que retomar nuestras vidas", comentó la entusiasta esposa del chillanejo.