Centro Víctimas de Chillán ha asistido a 590 personas
Ñuble. Desde el 2012 funciona esta instancia, con cobertura provincial, que busca generar apoyo y reparación a personas que han sufrido delitos violentos y accidentes.
Nadie está libre de ser víctima de un delito violento y de accidentes. El problema radica en cómo buscar las herramientas para minimizar las secuelas sicológicas que una situación de este tipo puede dejar en los afectados, más aún cuando las víctimas son menores de edad.
Manuel es padre de una niña de 16 años que, el pasado 24 de marzo, fue víctima de un intento de violación en la comuna de Coihueco. La adolescente caminaba por un sector rural cuando un desconocido se abalanzó sobre ella y trató de abusarla. Los gritos de desesperación de la afectada alertaron a vecinos del lugar, los que acudieron a su auxilio y ante tal situación, la menor pudo zafarse del antisocial, el cual se dio a la fuga y, hasta ahora, no ha podido ser detenido.
El horrible hecho causó daños no solo a la víctima, sino a toda su familia que vio que su tranquilidad familiar se vio abruptamente quebrada por un delito violento, de connotación sexual. La familia afectada fue asistida en una primera instancia en la municipalidad de Coihueco y desde ahí los derivaron al Centro de Atención a Víctimas que funciona en Chillán. Ahí la menor y su entorno reciben asistencia profesional multidisciplinaria.
"Tuvimos un problema muy complicado como familia y nos informaron que en este centro nos pueden ayudar, porque fuimos afectados por un delito violento que le ocurrió a mi hija. Aquí nos están prestando todo el apoyo que necesitamos como familia", expresó Manuel.
¿Qué es el Programa de Apoyo a Víctimas?
El Programa de Apoyo a Víctimas del Ministerio del Interior y Seguridad Pública está destinado a contribuir a la reparación de los daños ocasionados por la vivencia de un delito, a través del contacto rápido, gratuito, y oportuno con las personas afectadas, entregando atención integral y especializada con profesionales de diversas áreas: legal, psicológica, social, y medica psiquiátrica.
El plan depende de la Subsecretaría de Prevención del Delito y tiene por objetivo promover que las personas que han sido víctimas, por medio del ejercicio de sus derechos, superen las consecuencias negativas y no sufran victimización secundaria.
El apoyo está dirigido para víctimas que experimentan consecuencias producto de un delito violento, tales como: homicidio, parricidio, femicidio, robo con violencia, robo con intimidación, robo con homicidio, robo con violación, lesiones, delitos sexuales, secuestro, sustracción de menores, trata de personas, cuasidelito de lesiones y cuasidelito de homicidio.
Centro de Apoyo víctimas en Chillán
En Chillán, existe el Centro de Atención de Apoyo a Víctimas (CAVD) y su equipo está integrado por cuatro profesionales, dos administrativos y funcionan desde el año 2012 en la calle Claudio Arrau al llegar a Constitución. Su coordinador es el abogado Alex Contreras .
"El programa posee dos líneas de acción: la primera línea de atención está compuesta por servicio de apoyo a víctima las 24 horas; servicios de orientación e información, caracterizados por entregar atención presencial o telefónica, durante las primeras horas transcurridos el delito, principalmente primeros auxilios psicológicos e intervención de crisis. La segunda es la atención en los centros de apoyo a víctimas, donde un equipo especializado entrega atención presencial psicológica, social y jurídica, a casos que presentan necesidades más complejas", apuntó.
Además, Contreras manifestó que "se puede llamar al Call Center 6008181000 quienes gestionan una hora y nosotros atendemos. Asimismo, tenemos la demanda espontánea como forma de ingreso; cualquier persona que sea víctima de un delito, independiente que haya o no denuncia".
El Centro ubicado en la capital de Ñuble presta cobertura a toda la provincia y en sus dependencias cuenta con box especializados para diversas atenciones, especialmente la psicológica, función que cumple Daniela Mancinelli. La facultativa manifiesta que su labor va en el sentido de la reparación de las víctimas.
"La labor que con todo el equipo desarrollamos acá está enfocada a la reparación psicológica de las consecuencias o daños provenientes del delito del cual hayan sido víctima los usuarios. Se intenta hacer un trabajo bien completo, abordando las diversas áreas de la afectación de la persona. No tiene límites de tiempo, los objetivos se van planteando a medida que van apareciendo las problemáticas y se trabaja con ellos hasta que se sientan reparados", explicó la psicóloga.
En lo que respecta a la parte legal, la sede chillaneja cuenta con los abogados Guillermo Valdés y el coordinador Alex Contreras. Este último aclaró que se acompaña a la víctima de los delitos en tribunales hasta el final del proceso.
"Nosotros llegamos hasta las últimas instancias con las víctimas. Los acompañamos en todo el proceso de investigación de la fiscalía, la tramitación del juzgado de garantía, el juicio oral y, en caso que se recurriera, por parte de uno de los intervinientes, se llega a la Corte Suprema. Ahí lo ven abogados de la Subsecretaría de Prevención del Delito, que están en Santiago. La mayoría de nuestras sentencias, aproximadamente un 80 %, son condenatorias lo que constituye un elemento importante de reparación de la víctima", aseveró Contreras. La atención social y los ingresos los realiza Carla Villagrán, trabajadora social que integra la dupla psicosocial. "Mi tarea principal es activar las redes y ver qué solución se le puede dar de acuerdo a una consecuencia negativa en el ámbito social que esté asociada al delito", afirmó Carla Villagrán.
Ampliación de atenciones
Alex Contreras comentó que dentro de las nuevas oportunidades que se presentan para este equipo multidisciplinario, se encuentra el compromiso del gobierno de Michelle Bachelet, que este programa se transforme en un servicio público. Contreras explicó que desde fines del año pasado se amplió la atención y no sólo se atienden delitos violentos.
"Desde noviembre del 2014 se amplió el catálogo de atención de delitos. Antes de esa fecha era para lesiones graves, y otros ilícitos violentos. Ahora se atienden víctimas de cuasidelitos y accidentes.
Lucy Jaque, de 24 años, sufrió una experiencia traumática en noviembre pasado, cuando su hija y su madre, fueron mordidas por unos perros, en Chillán Viejo. "A mi hija y a mi mamá las mordieron unos perros, y yo sentí mucha impotencia por no poder socorrerlas frente a este ataque. El Centro de Atención a Víctimas nos contactó y empezamos a venir a terapias reparatorias. Toda la familia resultó afectada por esta situación. Después de un hecho como este se nos viene el mundo abajo", expresó Lucy Jaque.
Según información estadística del INE, entregada por este Centro de Atención a Víctimas, desde mediados del 2012, En la Provincia de Ñuble han asistido hasta a 514 personas, de las cuales 343 son mujeres y 171 son hombres. El 2012 se atendieron 81 personas de las cuales el 56% (45 en total) fueron por delitos sexuales. El año 2013 se ingresaron 204 casos y el porcentaje mayor de atenciones también lo registraron los ilícitos como violaciones y abusos sexuales con un 40% (81 casos). En tanto, el año 2014 se atendieron a 229 personas y de esta cifra un 32%(74 casos) corresponde a delitos sexuales (32%). Finalmente el Coordinador del programa informó que en lo que va del año 2015 se han realizado 75 atenciones, teniendo un promedio de 25 por mes.