La polémica se encendió ente los parlamentarios de nuestra zona, a raíz del inserto publicado el domingo pasado en el diario El Mercurio, en el que cinco obispos, entre ellos Carlos Pellegrin, entregaron su apoyo al movimiento Acción Familia y que además estaba dirigido a los parlamentarios para que tuvieran coherencia a la hora de debatir sobre el tema del aborto y del apoyo o rechazo al proyecto de interrupción del embarazo por tres causales.
"De la Iglesia católica no podría esperar algo diferente, o sea es lo mínimo que puede hacer la Iglesia, la que fue a la comisión de salud, a través del presidente de la conferencia episcopal, es decir que este es un tema de derechos humanos y la Iglesia habló durante la dictadura militar y eso tuvo costos para la Iglesia y no se amilanó frente a todo esto. Hoy tampoco puede amilanarse frente a los poderes fácticos, que le molesta cuando la Iglesia levanta su voz para defender los derechos humanos", sostuvo el diputado falangista Jorge Sabag.
El controversial artículo, que es pagado, asegura que pedirá a sus fieles no votar por aquellos parlamentarios que den su consentimiento a dicha iniciativa.
"La Iglesia debe levantar su voz para defender a los más débiles que no tiene una voz para defenderse y en ese sentido valoro la declaración de estos cinco obispos que han hecho ver la inconsecuencia de llamarse cristianos y estar por el amor, y por otro lado negarse el derecho a nacer de personas indefensas", dijo Sabag.
Otra de las consideraciones que entrega la carta a los diputados, es que el proyecto del aborto es una discriminación injusta, con consecuencia de muerte y donde el magisterio asegura que no hay un derecho moral de aprobar esta iniciativa.
"Creo que la iglesia como otras instituciones que están en contra de esto, tienen todo el derecho por la libertad de expresión a entregar su impresión sobre esta temática, y ahora como institución cristiana, yo no persigo como una inducción o una suerte de intimidación respecto del voto. Estimo que hace su pega y trabajo", confirmó la diputada del PPD, Loreto Carvajal.
Uno de los puntos que se debatió y que toca de manera crucial, a la hora de rechazar o favorecer esta iniciativa son las cifras entregadas por el Servicio Nacional de Menores (Sename) en las que indican que el año 2013, se registraron 3.200 casos de embarazos adolescentes, de ellos 200 son a raíz de alguna violación.
"No me siento católico y lo que señalan es que están en contra de la ley del aborto y esta no es una ley de aborto, no es así, sino que es el proyecto es la despenalización de la interrupción del embarazo, ante tres causales, la que en Chile existía hasta el año 1909, y por que la comisión de derechos humanos recomendó a Chile para que reponga el aborto", aseguró el diputado radical Carlos Abel Jarpa
A lo anterior se suma la gran cantidad de personas que ingresaron a algún centro asistencial, por haber practicado un aborto mal hecho. En los últimos 30 años son cerca de 70 mil los egresos anuales.
"Esos son los datos duros y esto es una opción que tiene las mujeres después de estar informadas. Esta es una opción voluntaria y eso es lo que quiero resaltar de porque soy partidario del proyecto", sostuvo Jarpa.
Si bien, el inserto iba dirigido hacia la Cámara baja del congreso, donde se discute actualmente el tema, desde el Senado también reaccionaron ante esta solicitud. "Más allá de estar de acuerdo o no con el texto, me perece que es una exageración hablar de una presión indebida, ya que esto es una inquietud, un anhelo, una opinión o tan sencillo como el llamado a las personas de acogerlo o no. Las opiniones o los llamados, se hacen con respeto y no hay ningún tipo de cohesión. Por compartir una opinión nadie se puede sentir presionado", dijo el senador de la UDI Víctor Pérez Varela.
Ingrid Acuña Caballero