Crónica Chillán
La producción de vinos en el Valle del Itata es parte de la historia de la zona interior de Ñuble. Sus tierras y grandes extensiones de viñas con cepas tradicionales como la moscatel, cinsault y país constituyen parte del paisaje y la cultura de la zona centro sur de Chile.
Lo que partió el 2008 como un apoyo puntual del Complejo Nueva Aldea, de Arauco, al Concurso del Vino de Ránquil, se ha ido convirtiendo año tras año en un trabajo mancomunado con diversas instituciones y productores locales, con el objetivo común de relevar la rica historia del Valle del Itata, la cuna de las primeras viñas del país.
Es así como, por ejemplo, desde 2013 Arauco impulsa y participa como un integrante más del Grupo de Transferencia Tecnológica (GTT), iniciativa que agrupa a productores de Ránquil y Portezuelo, a través de un convenio con el Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA).
Actualmente, en el fundo Cucha Cucha, adquirido el 2010 por Forestal Arauco, existe una importante capacidad de almacenaje y maquinaria para el proceso de vinificación, que están disponibles, como iniciativa piloto, para un trabajo conjunto con la agrupación Cavas de Portezuelo, quienes están utilizando las cubas de almacenamiento.
"Creemos en las alianzas estratégicas y un ejemplo de ello es el trabajo conjunto con la empresa Arauco, a través del cual damos respuesta en parte a estos desafíos: nosotros, los pequeños viñateros aportando con nuestro conocimiento centenario y ellos facilitando nuevas tecnologías o infraestructura para producir un producto uniforme, que pueda ser embotellado y vendido bajo un solo nombre", comenta la ingeniero civil agrícola Susan Olate Olate, gerente del Profo "Cavas de Portezuelo".
Una vitrina en Ñipas
La complejidad de la comercialización al público en general, por las distancias entre los campos donde están los vinos, dificulta que sus dueños puedan ofrecer sus productos. Es por esto que Arauco implementará una sala de ventas en Ñipas, a un costado de la Casa Abierta, para dar a conocer el trabajo de los viñateros, que se remonta por más de 500 años, realzando el lugar donde comenzó la producción de vino en Chile, el Valle del Itata.
Carlos Carrasco es productor de vinos y espumantes 'Don Goyo', del sector Uvas Blancas en la comuna de Ránquil. "Es difícil darse a conocer, nuestras parcelas muchas veces no son conocidas, las distancias son muy largas, los caminos no son los más adecuados. Contar con un espacio para la venta nos abriría una puerta a futuro para que nuestros vinos sean conocidos en todo Chile", afirma.
Para Guillermo Mendoza, subgerente de Asuntos Públicos de Arauco, "esta alianza con pequeños productores ha significado ir explorando nuevas formas de relacionarnos e impulsar iniciativas que estén enfocadas a mejorar sus producciones y agregar innovaciones técnicas. Queremos facilitar nuestras redes de apoyo y trabajo para que los viñateros se puedan beneficiar, para ir generando valor a sus productos".